Los trabajadores de Panrico en Barcelona se han manifestado este sábado para reclamar la intervención de la Generalitat en el conflicto de forma que se pueda volver a negociar el expediente.
Entre 500 y un millar de personas, según las fuentes, se han manifestado en Barcelona, entre la Plaza de Cataluña y la Plaza de Sant Jaume. Lo han hecho reclamando al gobierno catalán que tome un papel activo en el expediente de regulación de empleo (ERE), que supone para el conjunto del Estado un total de 745 despidos que afectan especialmente a la planta de Santa Perpètua de la Mogoda (Barcelona).
Contra este expediente los trabajadores de Panrico hace más de cuatro meses y medio que están en huelga indefinida. Se trata de la huelga más larga de la historia de España después de la guerra civil, desde que en la década de los 60 se produjo el conflicto de mayor duración hasta ahora, el de la firma Laminación de bandas de Echarri, que se prolongó durante 163 días.
A la movilización, se han unido organizaciones estudiantile , asociaciones y trabajadores de otras empresas en conflicto.
El presidente del comité de empresa, Ginés Salmerón, ha declarado que si han llegado a la Plaza de Sant Jaume es para presionar a la Generalitat a que mueva ficha, ya que, según dice, el gobierno autonómico no es de mucha ayuda en su lucha.
El conflicto de Panrico se ha endurecido en las últimas semanas, de forma que la empresa ha demandado a los miembros del comité de huelga de Santa Perpètua de la Mogoda por considerar que la huelga es ilegal. Por este motivo les reclama 5 millones de euros. A su vez, los trabajadores han hecho otra denuncia a la Generalidad en la que piden que tome medidas para garantizar el derecho de huelga, ya que pese a haber paro, se permite que lleguen y se distribuyan productos de la marca procedentes de otras fábricas para suministrar el mercado catalán.
A la manifestación ha asistido el secretario general de CCOO de Cataluña, Joan Carles Gallego. A la movilización, se han unido organizaciones estudiantiles, sindicatos, asociaciones y trabajadores de otras empresas en conflicto, como los de los medios públicos de comunicación y la coordinadora de Medios en lucha.