¿Favoritismo o simple cortesía? El debate está servido en conversaciones de café y grupos de Whatsapp de la comunidad jurídica barcelonesa a raíz del trato dispensado por el tribunal del caso Neymar al astro brasileño y a sus padres, también acusados. El presidente del tribunal, José Manuel del Amo, ha negado con contundencia este martes trato de favor alguno y ha enmarcado sus decisiones en las “circunstancias” laborales del jugador. No todo el mundo opina lo mismo, incluso en su sala de vistas.
En los últimos años son varios los tribunales que han abandonado viejas costumbres y han ensanchado el derecho de defensa del acusado. Son cuestiones que pueden parecer secundarias, pero que son importantes en un juicio donde está en juego la libertad de una persona. Por ejemplo: permitir al acusado sentarse junto a su abogado para que pueda hacerle comentarios o dejar que el procesado declare en último lugar, una vez conozca todo lo que han dicho contra él testigos y peritos.
Precisamente la sección 6ª de la Audiencia de Barcelona, la que juzga el caso Neymar, es una de las consideradas más respetuosas con el derecho de defensa de los acusados por parte de la abogacía, colectivo nada sospechoso de tener manías a la hora de criticar a los jueces.
En la actuación del juez Del Amo, que se ha erigido en estrella del juicio por sus conocimientos futbolísticos y sus intervenciones para cortar preguntas impertinentes de las partes o ayudar a los traductores, hay decisiones que se enmarcan dentro de ese ensanchamiento del derecho a la defensa. Es el caso de permitir a los Neymar y a su familia ausentarse del juicio este martes una vez completada su declaración como acusados.
Cada vez es más habitual que en los juicios largos –en el de Neymar hay programadas un mínimo de siete sesiones– los jueces dispensen la asistencia de los acusados tras la primera sesión, a la que tienen acudir sí o sí. También suelen tener que estar el día de su declaración y en la última jornada, para decir de viva voz si ejercen su derecho a la última palabra.
El tribunal también ha alterado el orden de declaración de Neymar y sus padres, adelantándolas de este viernes a este martes para que el jugador pudiera volver a su trabajo en París. Los interrogatorios de los tres acusados se han sucedido entre declaraciones de testigos. Una decisión poco ortodoxa pero que en nada perjudica a los acusados porque así lo pidieron ellos mismos, según valora otro togado consultado.
Pero sí hay dos decisiones más infrecuentes del tribunal con Neymar y su familia. Se trata de lo ocurrido este lunes, cuando apenas había transcurrido hora y media de juicio. El tribunal aceptó la petición de la defensa y autorizó al astro brasileño y a su familia a irse en medio del trámite de cuestiones previas. La defensa basó su petición en el inusual argumento de que Neymar se había ido a dormir tarde tras su partido contra el Marsella.
Los padres del delantero no jugaron partido alguno, pero el juez Del Amo aplicó por igual la dispensa a los tres. “El señor Da Santos Silva Jr. estaba marcando un gol y yo estaba ya en la cama”, dijo el magistrado, que acumula ya varios comentarios que le han convertido en protagonista de la vista. Este martes el jugador ha agradecido al juez su “humanidad”: “Estaba cansado de verdad”.
La otra novedad introducida con Neymar es permitirle renunciar a su turno de última palabra por videoconferencia desde París y no tener que volver a Barcelona. Esto ocurrirá el próximo 31 de octubre, última jornada del juicio. Según justificó el juez Del Amo, es la “solución” más factible dadas las “peculiaridades” del calendario laboral del jugador.
Además, este martes Neymar ha llegado al Palacio de Justicia pasadas las 11:00h., hora y media más tarde del inicio de la sesión, cuando lo habitual es que los acusados estén desde el inicio aunque terminen por declarar al final de la misma, lo que ha obligado al tribunal a decretar un receso de 15 minutos. El propio juez Del Amo ha querido intervenir para desmentir que el jugador se hubiera retrasado, tal y como ya había publicado la prensa: “El señor Neymar ha llegado cuando ha llegado, pero no ha llegado tarde”.
Fuera de la sala de vistas, donde mantener el orden ya no corresponde al tribunal sino a los Mossos d'Esquadra, también se ha vivido una escena inusual este martes. El jugador, su familia e incluso alguno de sus letrados se han hecho varias fotos en el salón de los pasos perdidos del Palacio de Justicia, pese a la prohibición de realizar fotografías dentro de las sedes judiciales catalanas.
La sesión fotográfica particular de los Neymar ha trascurrido ante la mirada de dos mossos d'esquadra, que no han avisado al jugador y a su familia hasta que la prensa les ha recordado que la prohibición de tomar imágenes dentro del juzgado es para todo el mundo y no solo para los informadores. Una reacción que contrasta con la rápida advertencia que los agentes realizaron este lunes a un periodista que sacó su móvil para fotografiar a los Neymar mientras esperaban entrar en la sala de vistas.
El juez Del Amo: “No le hacemos la ola a Neymar”
El magistrado Del Amo también ha querido contestar durante la sesión a las críticas por haber permitido al astro brasileño irse a descansar al hotel. “Se le dejó marcharse no porque sea un jugador de élite mundial sino porque estábamos en el trámite de cuestiones previas, que son especialmente áridas para el señor Neymar Jr., aunque para nosotros no lo sean”, ha alegado.
El astro brasileño, ha abundado el magistrado, acudió al tribunal este lunes al juicio “viajando de madrugada”. “Por encima de supuestos tratos de favor, que no los ha habido, está tratar a las personas con dignidad y de forma adecuada, y a Neymar Jr. se le está tratando como se trataría a otro acusado en las mismas circunstancias”, ha añadido, para a renglón seguido apostillar: “A los que creen que aquí estamos haciendo la ola a Neymar, pues no”.
El jugador no ha escuchado la réplica del juez a los periodistas porque ya se había ido de la sala de vistas. La prensa le ha preguntado si ya estaba más tranquilo tras declarar. “Yo siempre estoy tranquilo”, ha respondido el delantero, que lucía una sonrisa de oreja a oreja como si acabara de ganar un partido.