Los presos independentistas vuelven a la cárcel tras la suspensión del tercer grado
Las 20.00 horas de este martes era la hora señalada por la justicia para que Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart, Josep Rull, Jordi Turull, Raül Romeva y Joaquim Forn regresaran a la cárcel de Lledoners. Tras conocer la decisión judicial que suspendía el tercer grado de los líderes independentistas, varios manifestantes se han reunido a las puertas del recinto penitenciario y en diversos puntos de la geografía catalana para solidarizarse con los “presos políticos y exiliados”.
Las protestas, además, han mostrado su rechazo a la decisión tomada este martes por el Parlamento Europeo y que levantará la inmunidad a Puigdemont, Comín y Ponsatí.
Tras conocer la decisión judicial, Oriol Junqueras ha recordado que “la justicia española no parará nunca” y que ellos “tampoco”. El presidente de ERC ha reaccionado asegurando que seguirán “trabajando por la libertad, la justicia social y la república catalana” y ha regresado a prisión entre gritos de “unidad”. En términos similares ha hablado Joaquim Forn, exconseller de Interior, quien ha criticado la “voluntad de escarmiento” de la justicia y ha manifestado que el tercer grado les “correspondería” si no fueran “presos políticos”.
Desde sus cuentas de Twitter también han criticado la decisión el secretario general de JuntsxCat, Jordi Sànchez, y el presidente de Òmnium, Jordi Cuixart. Este último ha compartido en redes sociales una imagen reivindicando la amnistía y ha reiterado: “desde el exilio, la prisión o en la calle nunca dejaremos de luchar, nunca”. Antes de regresar a prisión, Cuixart ha expresado frente a la multitud concentrada que no aceptan “lecciones de democracia de nadie, y menos de aquellos que hoy son capaces de encarcelar a hombres y mujeres libres”, y ha insistido en que los independentistas no renunciarán nunca a ejercer sus derechos democráticos, en sus palabras.
Además de la recepción en la prisión de Lledoners, el independentismo catalán ha convocado concentraciones en la Avenida Meridiana de Barcelona, en un lugar de reivindicación clásico donde ya se produjeron manifestaciones para exigir la libertad de los encarcelados, el regreso de los políticos en el extranjero y la reivindicación de los principios del 1-O. Paralelamente se han congregado manifestantes en la plaza Sant Jaume de la capital, así como en Girona, Banyoles, Vic, Arenys de Munt, Vila-seca, Canet de Mar o Berga, entre otros.
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