‘Outlander’, aventura y magia en Escocia

En 1991 Diana Gabaldón publicó el primer libro de la saga ‘Outlander’, en nuestro país: ‘Forastera’. Ahora, años después la cadena americana Starz (‘Boss’, ‘Black Sails’, ‘Spartacus’) se ha encargado de la adaptación televisiva de esta odisea que ha vendido más de 20 millones libros en todo el mundo. El encargado de este proyecto es nada menos que Ronald D. Moore, que para todos aquellos que no os suene es el guionista y productor del ‘reboot’ de ‘Battlestar Galactica’, que marcó época en el mundo de la ciencia-ficción. La primera temporada, con un total de 16 episodios, está dividida en dos partes, y actualmente está en la recta final, con una segunda temporada asegurada. En España se ve al día a través de Movistar TV, así que no tenéis excusa para sumaros al fenómeno. 

Promo/Trailer de Outlander:

‘Outlander’ se sitúa al final de la Segunda Guerra Mundial, donde Claire Randall (Caitriona Balfe) es enfermera del ejército británico. Casada felizmente con el historiador Frank Randall, no sabe lo que el destino le tiene preparado. Mientras se encuentra de vacaciones en las mágicas tierras escocesas será transportada en el tiempo al siglo XVIII, más concretamente a 1743. Tierra de clanes y un mundo muy distinto para ella, se encontrará en medio del conflicto entre ingleses y escoceses. Aquí entrará en juego el joven guerrero Jamie Fraiser (Sam Heughan), que la cambiará por completo.

He sido de los que me he convertido con el paso de los capítulos en un auténtico fan de esta historia, de la que fui bastante escéptico tras el piloto. Tras esto, la serie se ha ido soltando la melena episodio tras episodio, y quizás el éxito de la misma es la mezcla de géneros. Dentro de una aparente historia de amor entre los dos protagonistas, se esconde aventura, ficción histórica, fantasía y ciencia-ficción; con halos de intriga, acción, mística, magia y traición. Una apuesta entretenida que con el paso de las semanas va denostando cada vez más madurez en personajes y en tramas. Incluso en las escenas de sexo y de violencia, ya que el canal Starz, para todos aquellos que no lo conocen, tiene casi como esencia escenas muy gratuitas de este tipo. Se podía considerar el hecho de contar con Moore como un cambio de dirección.

La voz de Claire se convierte en la narradora de la historia, haciéndonos partícipes de sus pensamientos, de su conciencia y deseos. Ella es nuestra guía. Las diferencias culturales marcadas por la época se hacen pronto evidentes: un mundo de hombres, donde no existe una balanza equilibrada entre los derechos del hombre y la mujer. Una sociedad ‘nueva’ llena de peligros a la que tendrá que adaptarse. Todo se convertirá en una aventura épica para una heroína, ya que el personaje de Claire Randall lo es sin dilación. Es fuerte, inteligente y hecha a sí misma, y se enfrenta con valentía a las adversidades, con el handicap de que conoce muy bien la historia. Se ha llegado a tildar a la serie de ‘feminista’ por esa dominación/control en las escenas de sexo de la protagonista. Incluso ser una ficción ‘solo’ para la mujer, cosa que no puede estar más equivocada, ya que ‘Outlander’ te da algo más. Además, yo soy de los que piensa que la televisión necesita de más heroínas, a las que dedicaré una entrada más adelante.

Jamie Fraser es junto con Claire el otro protagonista, un joven guerrero escocés que encontrará en ella una persona algo más que especial. Sobre todo, lo relevante de este personaje es cómo se tendrá que adaptar y conquistar a una mujer que no es de su época, y de la que aprenderá mucho. Él va tomando mucha más importancia e incluso algunas partes de la historia las cuenta desde su perspectiva.

En sus primeros capítulos, primera parte, desprende un ritmo lento; estamos adaptándonos junto con Claire a un nuevo régimen. Aún así no dejan de pasar eventos en esta fase de introducción. Pero la auténtica evolución es cómo la serie va tomando un tono más sobrio y oscuro con el paso de la historia. En algún momento, casi sin enterarte, se instala la épica en ‘Outlander’, ya que al fin y al cabo esconde una gran aventura detrás. Eso hace que la historia de amor entre Claire y Jamie esté en segundo plano, ya que la serie esconde mucho más; nada parece lo que es. Cuando menos lo esperas caes en las garras de esta maravillosa ficción.

La épica la pone no solo esa adaptación de Claire sino también las propias diferencias entre los clanes y el gobierno británico. En el lado de los clanes tenemos: Dougal MacKenzie (Graham McTavish), jefe de guerra; Colum MacKenzie (Gary Lewis), jefe del Clan MacKenzie; y Geillis Duncan (Lotte Verbeek), la única amiga que encontrará,. Entre los británicos destaca la figura de Jonathan “Black Jack” Randall (Tobias Menzies), capitán de las tropas británicas. Que es ni más ni menos pariente del marido de Claire Randall, con un parecido más que razonable. Por lo tanto tenemos un reparto a priori bastante desconocido, excepto Tobias Menzies, aunque para los fans y la propia autora de la saga, están acercando al público perfectamente la esencia de los libros.

Pero si hay algo que enamora más que la propia serie es el contexto maravilloso en el cual se enmarca: Escocia. Los paisajes escoceses son uno de los extras de ‘Outlander’ ya que consiguen aportar magia a la ficción, sabiendo muy bien combinar la ‘barbarie’ de la época con la belleza que supone contemplar los terrenos vírgenes. La perfección llega cuando asociamos a esto una gran banda sonora que empieza a conquistarte desde los propios títulos de crédito. El compositor es Bear McCreary al que también podemos asociar con ‘The Walking Dead’, ‘Agents of S.H.I.E.L.D.’ o ‘ Battlestar Galactica’.

No me gustaría irme sin señalar y recalcar lo verdaderamente bonitas, apasionadas y épicas que son las escenas de sexo, para mí las mejores de la actualidad. Cada secuencia es especial, con una gran carga significativa que hace evolucionar a nuestros dos protagonistas.

‘Outlander’ es altamente entretenida y muy adictiva que va camino de ser una ficción mucho más adulta y oscura. Una aventura totalmente recomendable que te llevará a los rincones más místicos de Escocia.

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