El tramo Sagunt-Teruel que conecta el Corredor Mediterráneo con el Atlántico queda fuera de la alta velocidad del reglamento europeo

“Con mucha preocupación”, así afirma el eurodiputado de Compromís, Vicent Marzà, que ve el reglamento europeo que ordena las actuaciones de la red transeuropea de transportes tras excluir el tramo Teruel-Sagunt-València como línea de Alta velocidad. El representante de Compromís en el Parlamento Europeo iniciaba el curso político con varias actuaciones referidas a la reivindicación del necesario Corredor Mediterráneo, y tras conocer esta exclusión advierte que “tememos que las consecuencias de esa decisión dificulten las comunicaciones entre los puertos de Sagunt y València con el eje Atlántico del denominado Corredor Cantábrico”.

Por esta razón, el europarlamentario valencianista ha presentado preguntas a la Comisión europea sobre esta cuestión. “Esta situación plantea preocupaciones sobre el futuro del Corredor Mediterráneo-Cantábrico, sobre las intenciones reales hacia este eje y sobre la conectividad y operatividad de la línea en su conjunto, más cuando hace dos décadas se prometió un corredor de altas prestaciones que todavía hoy no se han concretado”, ha explicado Marzà.

Así mismo, Vicent Marzà ha solicitado una reunión con el coordinador del Corredor Mediterráneo en Europa “para tratar la cuestión antes mencionada y muchas más, porque el Corredor Mediterráneo es más que una infraestructura de transporte clave. Es un eje que conecta el País Valenciano y la Costa Mediterránea con el resto de Europa, tanto económicamente como socialmente”.

“Es imprescindible que esta infraestructura se complete rápidamente y se integre con el resto de la Red Transeuropea de Transporte para optimizar el potencial económico y social de nuestro continente. Conectar el País Valenciano con el resto de Europa a través del Corredor Mediterráneo también es una cuestión de justicia territorial y equidad económica”, ha aseverado el eurodiputado de Compromís.

Desde Compromís se ha recordado que entre los retos importantes que quedan para desarrollar, están también los retrasos y aplazamientos en el sur de Francia, y la necesidad de invertir masivamente en cercanías para reducir las emisiones en zonas interurbanas.