“Malestar y preocupación” en los colegios católicos por la reducción de unidades en la concertada
Hace apenas dos semanas, el conseller de Educación, Vicent Marzà, acompañado del secretario autonómico, Miguel Soler, presentaban su propuesta de arreglo escolar (las unidades previstas en Infantil y Primaria en la Comunitat Valenciana para el próximo curso). La idea del gobierno valenciano es que todos los centros sustentados con fondos públicos, ya sean gestionados por la conselleria o concertados, se rijan por los mismos criterios.
Ante la propuesta de Conselleria, la Fundación de Colegios Diocesanos 'San Vicente Mártir' -integra a 68 centros dependientes del Arzobispado de Valencia- ha mostrado su “inquietud, malestar y preocupación” por la supresión de aulas prevista en la concertada, según informan desde la agencia Avan. Así, Miguel Ángel Coello, gerente de la fundación, ha asegurado que se trata de un sentir “generalizado” ante la propuesta “muy elevada” de reducción de unidades en los centros concertados.
En concreto, en nueve de los centros diocesanos -Colegio Claret (Xàtiva), San Antonio de Padua (Catarroja), San Juan Bosco (Valencia), El Salvador (Alcoi), Sagrado Corazón de Jesús (Chella), La Baronia (Gilet), San Antonio Abad (Canals), Nuestra Señora del Socorro (Benetússer) y Juan XXIII (Burjassot)- se propone una reducción de unidades. En opinión de Coello, muchas de las propuestas de eliminación de unidades se deben a que “se ha producido, por circunstancias, una pequeña disminución de alumnos que se considera que se va a producir para siempre”.
Y ello, ha puntualizado el portavoz del colectivo católico, cuando todavía no se ha comenzado el proceso de admisión de alumnos. “Incluso hay un colegio en Catarroja donde se propone quitar una unidad de tres años cuando hay 18 alumnos matriculados”.
“Sorprendidos” por la creación de unidades en la pública
A juicio de Coello, quien se reconoce “sorprendido” por la “elevada creación de unidades” en centros públicos, Conselleria “lo que se está buscando es un trasvase de alumnos de la enseñanza privada concertada a la pública, totalmente en contra del texto constitucional”.
La Fundación defiende la libertad de elección de centros por parte de las familias, ya que creen que ambas redes -pública y concertada- “son complementarias”. De este modo, están formulando alegaciones para que “se pueda atender a las familias”.
