Mazazo a empresas y trabajadores: Marina d'Or y Kinepolis presentan despidos temporales y los preparan Ford, Air Nostrum o Servigroup

La crisis sanitaria del coronavirus ha mutado en un terremoto económico sin precedentes y que ya está cayendo encima de empresas y trabajadores. Grandes compañías, pymes y autónomos empiezan a notar el cierre total por cuarentena y eso se va a traducir con la suspensión del trabajo para decenas de miles de personas solo en la Comunitat Valenciana. Marina d'Or, Kinepolis, Avanqua, Ofertas Costa Azahar o las residencias Intur Esport ya han presentado ante la Generalitat expedientes de regulación temporal de empleo, pero gigantes de la economía valenciana como Ford, Air Nostrum o la hotelera Servigroup también preparan despidos temporales sujetos a esta figura amparada por el Estatuto de los Trabajadores.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado el megaplan de medidas económicas para superar esta crisis y hacerla lo más temporal posible y para ello ha puesto los ERTE en el centro de la política laboral para evitar excesos. Pese a esta medida y las ventajas que ofrece a las empresas, incluso la elusión del pago de cotizaciones de la Seguridad Social, todavía hay compañías que están despidiendo a trabajadores, algo que podría ser ilegal. Otras, quieren aprovechar esta catarata de despidos para solicitar plazos temporales “fuera de los razonable”, como denuncia el secretario de Acción Sindical de CCOO, Daniel Patiño.

La Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo ha anunciado que tramitará los ERTE “siempre que se acredite que existe una causa de fuerza mayor derivada de la situación actual, provocada por Covid-19”. “El objetivo de la Conselleria es la aplicación de las medidas urgentes para responder al impacto económico del coronavirus con la implantación del estado de alerta y evitar que se produzcan despidos, garantizando el cumplimiento de todos los requisitos establecidos legal y reglamentariamente en este mecanismo legal”, apuntan las mismas fuentes.

Los datos acumulados de solicitudes de ERTE del 12 al 16 de marzo son un total de 191 que afectan 6.649 personas de la Comunitat Valenciana. Los números se dispararán cuando se sumen los de este martes y empiecen a llegar los de la provincia de Alicante cuando se sutancie el cierre de Benidorm. 

De estas solicitudes, 10 corresponden a empresas que operan en el ámbito de la Comunitat Valenciana y afectan 2.656 trabajadores. En la provincia de Valencia el número de solicitudes es de 72, y afecta 1.119 personas trabajadoras; en Alicante las solicitudes son 77, afectando 2.246 personas y en Castellón el número de ERTE solicitados es de 32, y afecta 628 trabajadores.

Por sectores, los más afectados son el turismo, el ocio y la hostelería, pero también se han presentado numerosos expedientes desde empresas de servicio de comidas a colegios o residencias. Respecto al tiempo de petición, ninguna de las 191 propuestas se ha limitado a los 15 días que decreta el estado de alarma y algunos, como en el caso de Marina d'Or, reclaman un plazo de 365 días. En este caso, tanto los sindicatos como el propio Gobierno valenciano ya han dicho que no se aprobarán. “Seis meses de suspensión de empleo temporal ya es una barbaridad”, asegura Lola Ruiz, secretaria de Acción Sindical de UGT.

Patronal y sindicatos animan a “compensar” vacaciones

El presidente de la Confederación Empresarial Valenciana, Salvador Navarro, muestra su extrema preocupación por la posible “falta de liquidez” de las empresas y, aunque los ERTE pueden ser una figura temporal positiva, se muestra partidario de “compensar” los paros de estas semanas con “vacaciones, incluídas las de verano”. “Psicológicamente es mejor estar de vacaciones confinado que un despido temporal”, argumenta el líder patronal.

El secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, recuerda que los ERTE “no son finalizaciones de contrato, sino suspensiones”. “Vamos a ser flexibles con los que cumplan los requisitos, pero vamos a estudiar todos los casos para que no se utilicen para camuflar otras situaciones”, apunta Nomdedéu.

El expediente de regulación de empleo temporal, regulado en el art. 47 del Estatuto de los Trabajadores (ET), permite a las empresas suspender los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de las personas trabajadoras de manera temporal.

Durante la suspensión del contrato, la persona trabajadora continúa vinculada a la empresa pero sin derecho a percibir su sueldo, ni el resto de complementos como pagas extra o vacaciones, y terminada la situación excepcional, se reincorporará a la empresa, y no perderá la antigüedad a efectos de despido, ya que la suspensión del contrato es por una causa ajena al trabajador.