Josep Sorribes. Professor d´Economia Regional i Urbana en la Universitat de València. Cap de Gabinet de l' Alcaldia de l´Ajuntament de València (1983-1988). El seu darrer llibre : 'Valencia 1940-2014: Construcción y destrucción de la ciudad' (PUV, 2015).
València Metropolitana?
Tengo serias dudas sobre si lo que he venido escribiendo sobre el Área Metropolitana de Valencia( en adelante AMV) tiene o no sustancia. Discutimos poco por estas latitudes yel que a uno no le contesten no significa prácticamente nada en términos de acierto o error. Voluntad y constancia, eso sí, no me han faltado
Constaté que el AMV era un área metropolitana “de libro” en mi tesis doctoral leida en 1978 y publicada en 1985 por Alfons el Magnànim.. Volví a la carga con ocasión de la publicación del primer y último libro del extinto CMH (Areas metropolitanas :anàlisis teórico y experiencia comparada. CMH . Papers nº 1 1999). Con ocasión de las Primeras Jornadas Valencianas de Estudios Regionales (València, 9 i 10 de abril de 1999) publiqué una primera aproximación al tema de las Gobernaciones( Sorribes Monrabal, Josep (1999): «La gestió eficient del territori: una alternativa per al País Valencià», y de nuevo volví a poner blanco sobre negro en 2011 (en colaboración con Joan Romero). Por último, en mis dos últimos libros (Sorribes, J. 1912 La Ciudad. Ed. Tirant L Blanch y Sorribes , J. 2015 . Valencia 1940-2014. Construcción y destrucción de una Ciudad. UPV), el tema volvió a la palestra.
Por último, dos aportaciones muy recientes , La primera con motivo de la publicación de un libro colectivo (Joan Romero y Andrés Boix . Eds. 2015 Democracia desde abajo. Nueva agenda para le gobierno local. Coleccíon Desarrollo Territorial nº 17 . PUV) Democracia desde abajo. Nueva agenda para le gobierno localen el que hice una pequeña aportación con el título “La Ventaja colaborativa”) Pgs.113-123 ). La segunda, con motivo de la serie de reportajes que están saliendo desde ya hace más de un año en la web paisvalenciaseglexxi.org: Aquí, aquí y aquí.
A esta review le faltan algunos papeles menores editados por un servidor y, por supuesto, la aportación de otros autores (Joan Romero, Andrés Boix. Rafael Boix., Mª Dolores Pitarch., Luis del Romero, Josep Vicent Boira, Fernando Gaja, González Móstoles etc.). Por tanto, material, lo que se dice material, haylo
Cuando en 1999,el PP se cargó el CMH por “ineficiente y politizado” (SIC), los del PSPV- PSOE se deshicieron en lamentaciones y a principios del XXI, me invitaron dos veces seguidas a decir la mía en sendas reuniones “orgánicas”. En las dos ocasiones les dije que si querían demostrar que tenían voluntad metropolitana y que el desaguisado del PP era estúpido y anacrónico , lo tenían muy fàcil. Por aquel entonces (luego ya no), en la comarca de l´Horta había numerosos “·racimos” de municipios gobernados por la izquierda, agrupaciones de municipios colindantes del mismo “color. Crear una mancom unidad ”fuerte“ en estos espacios- les dije y expliqué- y así se verá que hay voluntad ,posibilidad y viabilidad y que es mejor trabajar juntos que ir cada uno a la suya. La respuesta fue inequívoca en ambas ocasiones: el silencio más absoluto, lo cual me llevó a concluir que todo era pura fachada, que no les interesaba el tema y que , si había próxima, declinaría la invitación. .
Con el nuevo gobierno local de 2015 (ya salió en la campaña de turno), vuelve a salir el monstruo del Lago Ness. Al igual que quedé profundamente decepcionado de la respuesta del PSPV PSOE hace más de una dècada, no tengo motivos para dudar de la buena fe e intenciones de Compromís, siempre mucho más receptivos a este tema , al menos avant la lettre.
Y en esas estamos con el grave riesgo de volver a descubrir las Américas o la sopa de ajo. En primer lugar, no se trata de resucitar ningún muerto ( léase el CMH) que no solo murió ya hace 30 años sino que nació medio muerto por falta de competencias y recursos ante los múltiples recelos. Y es que, en España, a pesar de existir una docena de áreas metropolitanas “evidentes” , el taifismo municipal, la lucha de las Diputaciones por mantenerse a flote ( con las áreas metropolitanas, a menudo, son prescindibles) y los sempiternos recelos de los nacientes gobiernos autónomos) , sólo existe un Área Metropolitana ( la de Barcelona) que fue “realumbrada” en 2010 (Pujol se cargó la CMB como Thatcher el Greater London Coubcil ) y que posee rango legal.
Taifismos locales, resistencias diputacionales y recelos autonómicos siguen, me temo, vigentes y nadie ha gastado ni un euro en la pedagogía extraordinariamente necesaria para conseguir que los ciudadanos entiendan que una cosa és la “identidad” (Santos patrones, fiestas e historia local) y otra cosa muy distinta y compatible es definir áreas lógicas de gestión del territorio. Como le decía Joan Fuster a un buen amigo mío cuando le exponía sus planes de “cambio”: “Què no volen , què no volen”. Demasiados intereses creados.
Eppur si muove que diria Galileo. Las áreas metropoltanas gozan de buena salud en todo el ámbito de la OCDE y no es por casualidad. Los términos municipalales son anacrónicos, producto de una historia feudal y las dinámicas territoriales no les tienen ningún respeto. Hay tantas economías de escala desperdiciadas, tantas economias de red, tantas externalidades y tantas indivisibilidades que clama al cielo hacer caso omiso de la ventaja colaborativa. Evidentemente, no existe área metropolitana sin conflicto y los niveles de desarrollo son distintos. Pero andan que no es poco. Algunos ejemplos como Lyon , Lille, Frankfurt., Sttugart o Manchester están ahí a nuestra disposición.
Volviendo a nuestro caso, el AMV, tiene o tendría sentido un gobierno supramunicipal que entendiera, al menos, de la ordenación de usos del suelo, la vivienda , el transporte, el ciclo del agua, la gestión de los residuos sólidos y el medio ambiente , la promoción económica (incluyendo el turismo) y la protección ciudadana. Otros temas, a discutir. ¿Financiación? El AMV representa más del 80% del producto provincial. Mejor nos iría con un AMV colindante con la Ribera y las Comarcas Centrales. De cualquier forma la financiación y los recursos humanos deberían proceder mayoritariamente de la Diputación y de la Generalitat que debería ceder competencias y recursos y dedicarse más a planificar y coordinar que no a gestionar.
Pero todo esto son sueños de una noche de verano. Mientras maduran los higos (muy verdes todavía) y hay un cambio cultural producto de la pedagogía (a ver si empiezan), ya me daría yo por satisfecho si se constituyeran en l´Horta i el Camp del Túria 3 o 4 mancomunidades “fuertes”. Más que nada por ir practicando. Salut.
Sobre este blog
Josep Sorribes. Professor d´Economia Regional i Urbana en la Universitat de València. Cap de Gabinet de l' Alcaldia de l´Ajuntament de València (1983-1988). El seu darrer llibre : 'Valencia 1940-2014: Construcción y destrucción de la ciudad' (PUV, 2015).