Cultura contratará 600 funcionarios para “los presupuestos más ambiciosos de la historia”

Javier Zurro

7 de octubre de 2022 14:16 h

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Los presupuestos de Cultura para 2023 han vuelto a marcar techo. Las cuentas, que tendrán que ser aprobadas en el Congreso de los Diputados, han sido defendidas por el ministro Miquel Iceta, que ha sacado pecho de lo que ha calificado como los presupuestos “más ambiciosos de la historia”. También los que tienen más dinero. La cifra global asciende a 1.804 millones, un 13,5% más que el año anterior, una cifra que, como aclaró “corresponde al conjunto de la política cultural y deportiva y donde se incluyen los presupuestos del ministerio pero también los que se gestionan desde el Instituto Cervantes, patrimonio cultural o Acción Cultural Española”.

Iceta ha destacado que con estas cuentas se otorga a la cultura “la consideración de bien público de carácter esencial” y ha querido dejar claro que “todo esto sale de los impuestos” de los españoles. Unos presupuestos “diseñados para fortalecer las industrias culturales, construir nuevos públicos y proteger a los trabajadores del sector cultural”, especialmente en un momento de crisis que afecta al “bienestar social y a la clase media y trabajadora”.

Fijándose solo en Cultura, el presupuesto es de 1.703 millones de euros, de los que 296 son del fondo de recuperación y resiliencia. La cifra europea es un poco más baja que el curso anterior, pero Iceta ha aclarado que no es un descenso, sino que el reparto estaba configurado así desde el principio: “Se distribuyeron en tres ejercicios y preferimos no dejar todo para el final, por lo que se priorizo el ejercicio de 2022 para ello”.

Uno de los anuncios de estas cuentas es la contratación de 600 funcionarios, para lo que se destinarán 10 millones de euros de las nuevas cuentas. El total de dinero para pagar los sueldos —incluida la subida salariar a los funcionarios ya anunciada— ascenderá a 88 millones. Una cifra que tienen como objetivo “mejorar la capacidad de gestión para hacer frente a las nuevas necesidades”. Ha negado que ese “arreón” en la contratación, como él lo ha definido, sea por las dificultades a la hora de ejecutar los fondos europeos en 2022. “No tiene nada que ver con la gestión de esos fondos, es para el ejercicio de las funciones encomendadas, pero no con carácter excepcional”.

Sí que algunos de esos 600 nuevos funcionarios irán para puestos en salas de museos estatales, algo que, como contó este periódico, es una demanda clara, ya que alguno incluso tuvo que cerrar por falta de personal: “Sí, la cifra incluye, entre otras cosas, el cubrir plazas vacantes, algunas de ellas no solo para servicios centrales sino en las instituciones que dependen del Ministerio. Esto está pasando porque el Gobierno anterior puso una tasa de reposición cero a bajas y jubilaciones. No se cubrían, pero desde que llegó el Gobierno progresista ya no es cero y estamos haciendo un esfuerzo importante”.

Preocupación por las salas

En plena resaca de la Fiesta del Cine, Iceta se manifestó inquieto con la situación de las salas. “Me preocupa y mucho”, dijo de forma tajante. Por ello las cuentas del cine vuelven a tener una partida destinada a ellas y mayor que el anterior curso. Será de 14,5 millones de euros. “El cine es importantísimo, vivimos un momento extraordinario de nuestro cine, pero si queremos afianzarlo la gente tiene que volver a las salas, al menos como antes de la pandemia. La pandemia ha traído cosas muy malas, y una de ellas es que los hábitos de consumo cinematográfico se han centrado en las televisiones y las plataformas y no en la vuelta a las salas, y esto tiene incidencia en el sector de la exhibición y vamos a prestar esa ayuda”.

El cine es importantísimo, vivimos un momento extraordinario de nuestro cine, pero si queremos afianzarlo la gente tiene que volver a las salas, al menos como antes de la pandemia

Las cifras del cine son las mejores que se recuerdan. Por primera vez el fondo de protección a la cinematografía, de donde salen las ayudas para producir películas, supera los 100 millones, una demanda histórica del sector. Alcanza los 107 desde los 70 del curso anterior, lo que supone un crecimiento del 52,8%. La partida total dedicada al cine aumenta un 72% hasta los 163 millones. Se incorporan 14,5 millones para el desarrollo de guiones y 10 para que las comunidades favorezcan la creación en lenguas cooficiales.

El bono cultural parece que ha llegado para quedarse, e Iceta lo destacó como medida estrella para 2023. Para su realización se dedicarán 210 millones de euros. Patrimonio Histórico es otra de las áreas donde se aumenta significativamente, se pasa de 2,2 millones a casi 11. Cinco veces más. De los museos, el que se lleva la mayor subida es el Prado, que recibe 13,4 millones más que en 2022, pero casi todo será para las obras del Salón de Reinos.