Las contradicciones en el caso de la patera libia “abandonada a la muerte”

La querella criminal contra quienes eran comandante y oficiales de la fragata Méndez Núñez en 2011 ya ha sido presentada en la Audiencia Nacional. Si es admitida a trámite, el Ministerio de Defensa tendrá que ofrecer toda la información que se le requiera para la investigación.

Entre otros datos, las autoridades militares tendrían que aportar el nombre del comandante y de los oficiales de la fragata en 2011, la posición de la misma cuando el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo italiano y la OTAN informaron de la existencia de una patera en aguas donde la fragata operaba, o las órdenes y avisos que recibieron los militares españoles de la Méndez Núñez.

El Ministerio de Defensa ha indicado a eldiario.es que de momento no ha recibido notificación de la Audiencia Nacional y que, en caso de recibirla, “facilitarán toda la información al juez”.

Como ya adelantó eldiario.es, en la querella presentada se señala a militares españoles y de otros países de la OTAN por un delito de omisión de socorro a 72 refugiados que huían en patera de la guerra de Libia.

En aquella fecha, marzo de 2011, la OTAN ya participaba en la guerra libia, y la zona marítima recorrida por la patera era un área con presencia de buques militares de la Alianza Atlántica. Uno de ellos era la fragata Méndez Núñez, que habría estado a tan solo 11 millas de la embarcación con los refugiados a bordo.

Existen una serie de incógnitas y alguna contradicción en el caso de la patera “abandonada a la muerte”, así nombrada en un informe encargado por el Consejo Europeo de Investigación, que ya en 2012 concluía que era precisa una investigación exhaustiva de los hechos.

Incógnitas y contradicciones

1.- La OTAN afirmó en su momento, a través de una declaración oficial, que había sido informada por las autoridades italianas de la presencia en la zona de una embarcación pequeña que se encontraba probablemente en dificultades. También reconoció que este aviso fue enviado a todos los barcos de la OTAN, “de acuerdo con la práctica habitual”.

Del mismo modo, el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Roma también envió una alerta sobre la presencia de la patera.

Sin embargo, el Ministerio de Defensa español, al ser preguntado al respecto en 2012, negó “haber tenido noticia de que una embarcación a la deriva, con 72 refugiados a bordo, se encontraba en sus proximidades”, y añadió que “la fragata española no recibió ninguna alerta de emergencia desde el Centro de Coordinación de Rescate Marítimo de Roma ni tampoco desde el Mando de la OTAN en Nápoles”.

Hay por tanto una contradicción en las versiones sobre lo sucedido. “El organismo de rescate marítimo envía una señal a todos los barcos de la zona. Un pesquero puede que no tenga el aparato adecuado para recibir esa señal, pero no así un buque militar. El sistema de avisos de naufragios en el mar no puede no tenerlo una fragata española”, explica a eldiario.es Gonzalo Boye, uno de los abogados que ha presentado la querella.

2.- No se ha esclarecido aún de qué nacionalidad era el helicóptero militar que sobrevoló la patera.

Los nueve supervivientes han relatado cómo un helicóptero militar les sobrevoló y lanzó galletas y botellas de agua.“Después se fue, pensábamos que iba a volver para rescatarnos pero no lo hizo”, recuerdan.

3.- Queda por saber también de qué nacionalidad era el buque militar que fue visto por los refugiados de la precaria embarcación. “Vieron nuestra patera, les mostramos un bebé muerto pero no nos ayudaron”, han denunciado los supervivientes. El encuentro con el buque militar relatado por los tripulantes que lograron salvarse se produjo cuando ya había cadáveres en la barca.

“Les mostramos a nuestros muertos. Y también les mostramos nuestras botellas de agua vacías. Todo el mundo, incluso la persona más estúpida, podía entender lo que nos había ocurrido. Pero nos abandonaron”, han relatado.

4.- Según diversas informaciones, en la zona había al menos dos buques militares. Uno era la fragata española Méndez Núñez, que se encontraría a once millas de la patera, y que llevaba un helicóptero. A la patera se acercaron dos helicópteros.

“La Méndez Núñez tenía un helicóptero. Es lógico preguntarse si alguno de los helicópteros que sobrevolaron la patera era español”, indica el abogado Gonzalo Boye.

“Hay un código de silencio entre los países involucrados”

Tras la presentación de la querella en la Federación Internacional de Derechos Humanos en París, los principales medios de comunicación internacionales se han hecho eco de la noticia y de los testimonios de los supervivientes.

Uno de ellos, Abu Kurke, de 25 años, ha explicado que sobrevivió bebiendo su propia orina y tomando pasta de dientes. Cuando finalmente la patera alcanzó tierra en abril de 2011, tras quince días de travesía, los supervivientes se dieron cuenta de que estaban de nuevo en territorio libio, donde las fuerzas de seguridad les hicieron prisioneros.

Después fueron enviados a Italia por las propias autoridades libias. En la actualidad Abu Kurke vive en Holanda, con su mujer y su hijo, y está aún pendiente de una operación en la oreja para tratar las heridas que la exposición al sol le provocó durante la travesía.

“Tengo pesadillas constantes. Ver morir a 63 personas, de ese modo, no es algo que se pueda olvidar fácilmente”, ha declarado.

Por su parte, el padre Mussie Zerai, un sacerdote eritreo en Roma, que fue la última persona en comunicarse con la patera antes de que ésta se quedara sin teléfono satélite, ha denunciado la existencia de una omertá o código de silencio entre los países de la OTAN involucrados en el caso.

En España, a raíz de las últimas acciones legales y de su publicación en prensa, Iniciativa Per Catalunya Verds (ICV), de Izquierda Plural, ha pedido al Gobierno que aclare la omisión de auxilio a la embarcación con los 72 refugiados, y le ha preguntado si tiene intención de iniciar una investigación para esclarecer los hechos y, en su caso, poner a disposición de la Justicia a los responsables.

El caso de la patera, en el Consejo de Europa

El próximo martes se abordará el caso de la patera 'abandonada a la muerte' en la Comisión de Migración y Refugiados de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, donde participarán algunos de los abogados que han presentado la querella.

Ya en 2012 un informe del Consejo Europeo concluía que “dependía de la OTAN reaccionar”, y que “hubo un fallo de la OTAN a la hora de reaccionar ante las señales de urgencia”. Y añadía:

“La OTAN confirma que sí informó a los buques militares de la OTAN, mientras que las autoridades españolas contradicen esto diciendo que ellos no recibieron el mensaje. Tengo dificultades para comprender cómo la Méndez Núñez y otros buques no pudieron haber recibido los mensajes generales de Inmarsat [un servicio de comunicación por satélite] e Hydrolant [aviso urgente de peligro en la navegación] que fueron enviados a todos los buques del área”.