La CNMC y su homólogo galo tumban el proyecto del gasoducto hispanofrancés MidCat
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Commission de Régulation de l'Énergie (CRE), la autoridad de regulación francesa, desaconsejan seguir adelante con el proyecto del gasoducto hispanofrancés MidCat, una infraestructura con una inversión estimada de unos 3.000 millones de euros que la compañía española Enagás y la gala Teréga llevan intentando promover desde hace más de una década.
Ambas partes han acordado “que el proyecto de interés común, STEP, (que correspondería con la primera fase del MIDCAT) en su configuración y capacidades actuales, tal como lo han presentado los transportistas, no cumple con las necesidades del mercado y carece de madurez suficiente para ser considerado en una asignación de costes transfronteriza”.
El proyecto presentado, según la CNMC y CRE, “falla” al no ofrecer capacidad para contratar de forma firme por los comercializadores, por lo que no ha recibido apoyo en los sucesivos test de mercado realizados. “Los altos costes de la infraestructura, con el nivel de tarifas que resultan de aplicación, junto con el hecho de que ya se disponga actualmente en la interconexión de capacidad interrumpible, con un bajo nivel de utilización anual, no garantizaría el acoplamiento de precios de gas con el norte de Europa”.
Por estos motivos, ambos reguladores han acordado rechazar la solicitud de inversión y aconsejan “la reconsideración del proyecto por parte de los transportistas promotores de la infraestructura, buscando una solución más eficiente en beneficio de los consumidores”, atendiendo a factores como “el papel futuro” del gas natural en la región tras la aprobación del paquete de energía limpia recientemente acordado en Europa.
CNMC y CRE subrayan que “el mercado no ha mostrado ningún interés comercial por la nueva capacidad de interconexión” de MidCat, añaden que “la capacidad de interconexión actual de gas entre Francia y España no está congestionada” y que “el coste del proyecto es elevado en comparación con los estándares europeos”.
“Herramienta clave”
La CNMC recuerda que “las infraestructuras de interconexión son una herramienta clave para alcanzar los objetivos del mercado interior” y que la Península Ibérica “es una de las regiones que, debido a su posición geográfica, tiene un nivel relativamente limitado de interconexión con el resto del mercado europeo”, por lo que recomiendan continuar con los esfuerzos hacia una mayor integración de los mercados de electricidad y de gas en el sudoeste europeo.
Incluido el año en la lista de “proyectos de interés común” de la Comisión Europea, el MidCat uniría España y Francia a través de una tubería que atravesaría el Pirineo catalán y llevaría hasta el corazón de Europa el gas natural procedente de Argelia como alternativa a Rusia. Tuvo el apoyo decidido del Gobierno de Mariano Rajoy, pero siempre fue visto con tibieza por la parte francesa. Y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ya pidió “cautela con respecto al gas” y sus infraestructuras en su primera comparecencia en el Congreso.
“Habrá que evaluar, que entender, que ponderar si lo que tenemos basta porque nos acompaña en el proceso de salida o si se necesita algo más y en ese caso qué, pero desde luego ser extraordinariamente cautelosos con respecto a delirios de grandeza en un impulso o crecimiento masivo de algo que ni poseemos ni tiene a priori una larga vida por delante. Por tanto, cautela con respecto al gas”, dijo en julio pasado.
La decisión ha sido aplaudida por grupos ecologistas que consideraban esta infraestructura innecesaria. “Con presión ciudadana y política, acabamos con este insostenible e inútil proyecto de gasoducto entre Francia-España”, ha indicado en su cuenta de twitter el eurodiputado de Equo Florent Marcellesí.