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Endesa rebaja a 300 millones el impacto del nuevo impuesto y eleva un 28% su previsión de beneficio ordinario en 2022

Economía

23 de noviembre de 2022 10:28 h

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Endesa ha revisado a la baja el impacto previsto por el nuevo impuesto a las compañías energéticas, tras las enmiendas introducidas la semana pasada en el Congreso para eximir a las actividades reguladas de la nueva tasa. En concreto, la eléctrica pronostica un impacto de entre 250 y 300 millones de euros al año en 2023 y 2024, frente a los 400 millones por ejercicio previstos a principios de mes. Eso supone hasta un 37% menos, aunque los directivos de la eléctrica creen que el impacto se quedará en la banda alta de esa horquilla.

El nuevo cálculo, recogido en una nota publicada este miércoles por la compañía, tiene en cuenta “las últimas enmiendas incluidas, sin los negocios regulados”, ha explicado a las analistas el consejero delegado de la eléctrica, José Bogas, que ha pronosticado que se situará en la parte alta, unos 300 millones, lo que supondría un recorte del 25% respecto a su previsión inicial. El director Financiero, Luca Passa, también se ha referido a esa estimación de 300 millones en su presentación a los analistas.

La compañía ha revisado al alza su estimación de beneficio neto ordinario para este año, la base que toma como referencia para el reparto de dividendos, hasta entre 2.200 y 2.300 millones, lo que supone hasta casi un 28% más frente a los 1.800 millones previstos hasta ahora. Con ello, ha revisado al alza el dividendo por acción que pagará en 2023 con cargo a 2022, hasta 1,5 euros por acción, frente a los 1,2 euros previstos en el plan anterior.

El grupo, que ha presentado este miércoles la actualización de su estrategia para el trienio 2023-2025, va a mantener su política de entregar a sus accionistas el 70% de sus beneficios. Esto implica que va a repartir hasta 5.390 millones en dividendos entre 2022 y 2025. Tras la presentación de las nuevas previsiones, la cotización de la compañía en Bolsa ha llegado a ceder más de un 5%, aunque pasadas las 10 horas las pérdidas se quedan en algo más del 2%.

La filial del grupo semipúblico Enel, que cifra la rentabilidad para sus accionistas en los últimos ocho años en el 138%, prevé que para 2023 ese resultado ordinario neto descienda hasta los 1.400-1.500 millones, aunque se recuperará en 2024 a una horquilla de entre 1.700 1.800 millones y en 2025 se situará en los 2.000 2.100 millones. En total, a lo largo de estos cuatro años esta partida podría sumar 7.700 millones.

Por su parte, el beneficio bruto de explotación (ebitda) se situará este año en una horquilla de 5.000-5.300 millones, frente a los 4.100 millones inicialmente previstos. En 2025, oscilará entre 5.200 y 5-500 millones.

Foco en renovables

Para 2025, la eléctrica prevé un incremento de 4,4 gigavatios (GW) en su capacidad eólica (1,4 GW) y solar (3 GW), con una inversión de 4.300 millones, de forma que la producción renovable aumentará un 85% frente a 2022, con una capacidad libre de emisiones de 13.900 megavatios (MW) al final del periodo.

Las renovables coparán la mitad de la inversión en ese periodo, que sumará en total 8.600 millones, un 15% más respecto al plan 2022-2024. Con ello, el 91% del parque generador peninsular estará libre de emisiones a cierre de 2025, frente al 72% al cierre de este año.

En cuanto a las redes, el volumen inversor “se reduce ligeramente para adaptarse a un contexto de incertidumbre regulatoria”, hasta 2.600 millones. Tres cuartas partes de esa cantidad van a digitalización de la red y a aumentar su calidad y resiliencia, el resto, a facilitar el previsto incremento de las instalaciones de generación distribuida

Por su parte, la deuda neta crecerá hasta el entorno de 11.600-12.100 millones, frente a los 11.149 millones actuales, “por ese esfuerzo inversor y por el impacto del nuevo impuesto a las energéticas en España que supondrá unos 500 millones para Endesa en los dos años en que estará en vigor”. Así, tras las últimas enmiendas introducidas al texto, la nueva tasa tendrá “una afectación de entre 250-300 millones por año”, frente a los 400 millones estimados inicialmente.

La eléctrica prevé precios de venta de la electricidad a sus clientes finales un 10% inferiores a los de 2022, con precios del gas que en el caso de la referencia holandesa TTF se situarán en 110 euros por megavatio hora (MWh) los dos próximos ejercicios y ya en 2025 se situarán en 66 euros/MWh. Endesa prevé alcanzar en 2025 la cifra de 7,3 millones de clientes en el mercado libre, un 6% más que a cierre de este año, y alcanzar la meta de cubrir el 95% de toda la energía vendida a precio fijo a partir de fuentes no emisoras. El número de puntos de recarga para vehículos eléctricos se multiplicará por cinco al final del periodo, hasta los 66.000.