Un informe alerta a la Eurocámara de la “precarización” de los nuevos pilotos de avión
Fue presentado en febrero pero desgraciadamente puede ponerse ahora de actualidad: el informe 'Anomalías laborales en la aviación', un documento de más de 300 páginas elaborado por la Universidad de Gante con financiación de la Comisión Europea, se debate este jueves en la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo. Llega en un momento sensible, tras el accidente de avión de la filial de bajo coste de Lufthansa Germanwings en el Macizo des Trois-Évêchés, en plenos Alpes de Alta Provenza, con un saldo de 150 muertos. Y varios grupos políticos se han interesado por el documento.
El estudio denuncia sin ambages la “precarización” de los nuevos pilotos y sus consecuencias para la seguridad aérea. “Un alarmante número de pilotos está trabajando sin relación directa con la aerolínea para la que pilotan, especialmente en el sector low-cost”, lamenta el informe, que inmediatamente se refiere a un “dramático ascenso” de los autónomos y –peor aún– los “falsos autónomos”.
Los segundos están en una situación peor, porque suelen ser contratados a través de intermediarios con el fin de que la empresa matriz escamotee de alguna manera el pago de impuestos o las cotizaciones a la Seguridad Social: “Siete de cada diez pilotos contratados como autónomos trabajan para una compañía low-cost. La condición de autónomo todavía es recurrida para esconder lo que en realidad es un empleo regular que debería tener la condición de asalariado”, apunta el dosier. “Esto da una ventaja competitiva injusta para aquellas aerolíneas que recurren a estas contrataciones y distorsionan el mercado de la aviación”.
Para la confección del informe, la Universidad de Gante entrevistó a más de 6.000 personas. Hasta cerca de un 20% de los pilotos en Europa son ya autónomos, destaca una de las conclusiones. Muchos están trabajando para una Agencia de Trabajo Temporal, como autónomos o con los denominados contratos, que no exigen ninguna remuneración y permiten tener a un piloto trabajando gratis, sobre todo si carece de experiencia.
Pilotos jóvenes
Las malas condiciones tienen efectos en la seguridad de los pasajeros. “La precarización del trabajo en la aviación es algo más que evitar abonar impuestos y cotizaciones sociales. La precarización aumenta el riesgo de la inseguridad de esta industria”, avisa. “Más de la mitad de los pilotos autónomos encuestados trata de mejorar sus condiciones”, agrega el texto.
Los “jóvenes pilotos” son los más afectados por la precarización. “Hasta un 40% de los pilotos de entre 20 y 30 años están volando sin ser directamente empleados por su aerolínea”. El trabajo destaca situaciones como esta: “Se dan casos en los que el piloto, para poder conseguir volar, sabe que necesita ganar experiencia y entonces paga a la propia aerolínea, produciéndose un subsidio en toda regla”.
Las conclusiones son palmarias: “Esto constituye una explotación financiera directa”. “Los jóvenes pilotos padecen una presión desproporcionada”, señala en el informe Emmanuel Jahan, presidente del European Sectoral Social Dialogue for Civil Aviation, una especie de consejo social a nivel europeo que intenta acercar a los interlocutores sociales en este sector.
