Uno de los principales nudos ha sido superado. La vinculación del respeto al Estado de Derecho con el reparto de fondos europeos, ya sean del presupuesto plurianual (el MFF) o del fondo de recuperación de la crisis del coronavirus, tenía atascadas las negociaciones entre el Parlamento Europeo y el Consejo de la UE (los gobiernos de los 27). Pero este jueves, después de media docena de reuniones presenciales, se ha superado el bloqueo, según han anunciado las partes, entre ellas la ponente socialista, Eider Gardiazabal (PSOE/S&D).
Gardiazabal considera “una gran noticia que al fin haya un mecanismo que vincule el presupuesto de la Unión Europea al Estado de Derecho, tal y como hemos reclamado los socialistas en los últimos años”. La negociadora socialista se ha referido al acuerdo alcanzado esta mañana con el Consejo como “una gran victoria de los principios de la Unión Europea”, que ahora se podrán “defender de un modo eficaz”.
“Europa es una comunidad de valores basada en la dignidad humana, la libertad, la democracia, la igualdad, el Estado de Derecho y respeto de los derechos humanos. Formar parte de la UE supone mantener un compromiso firme con la defensa de esos valores, y, por tanto, desde hace años venimos reclamando un mecanismo efectivo que nos asegure que estos principios se cumplen”, ha señalado.
La eurodiputada socialista ha destacado que “el acuerdo final recoge un ámbito de aplicación amplio, como pedía el Parlamento, que incluye no solo los valores fundamentales contenidos en el artículo 2 del Tratado de la Unión Europea, sino también los ataques a la independencia judicial y el fraude fiscal”.
“Nos hemos asegurado”, dice Gardiazabal, “de que la posible sanción recaiga sobre los Estados que no respetan los valores de la Unión Europea, y no sobre los beneficiaros finales de los fondos europeos. Ya sean investigadores, becarios o empresas, tienen que saber que no serán ellos quienes paguen las consecuencias de que sus Gobiernos no respeten el Estado de Derecho”.
Ernest Urtasun, vicepresidente del grupo Verdes/ALE y eurodiputado de Catalunya en Comú ha comentado: “Este mecanismo no es tan fuerte como quería el Parlamento Europeo y será un reto, pero podemos hacer que funcione. No es perfecto, pero sienta las bases para actuar contra los estados miembros que atacan la democracia y el estado de derecho. Ahora, los estados miembros ya no podrán ocultar su inacción sobre el estado de derecho, tendrán que actuar, incluso cuando sea difícil”.
La propuesta de la presidencia rotatoria alemana de la UE resultaba demasiado laxa para los grupos de la Eurocámara y para países como Holanda. No obstante, resultaba excesiva para países como Polonia y Hungría, sometidos a procedimientos de censura tanto por el Consejo como por la Eurocámara, por sus vulneraciones al Estado de Derecho, sancionadas por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Esas reticencias del Gobierno de Viktor Orbán amenazan con hacer fracasar el paquete completo si no ratifica en su parlamento nacional que la Unión Europea ponga en marcha nuevos impuestos comunitarios para el repago de la deuda de la deuda emitida por la Comisión Europea de 750.000 millones para financiar el fondo de recuperación.
El embajador alemán ante la Unión Europea, Michael Clauss, ha afirmado, tras el el acuerdo provisional para el un nuevo régimen de condicionalidad: “Es un hito importante en nuestros esfuerzos por finalizar el próximo presupuesto plurianual de la UE y el paquete de recuperación. El nuevo mecanismo de condicionalidad reforzará la protección del presupuesto de la UE cuando las infracciones de los principios del Estado de Derecho den lugar a un mal uso de los fondos de la UE”.
“Ha llegado el momento de llegar a un acuerdo sobre el resto del paquete también”, ha dicho Clauss, en relación al reglamento del propio fondo, que empezará a negociarse la semana que viene; los recursos propios –nuevos impuestos– y el aumento de algunas partidas presupuestarias: “Tenemos un paquete financiero histórico de 1,8 billones de euros sobre la mesa. Con la segunda ola de la pandemia golpeando fuertemente a los estados miembros no hay tiempo que perder”.
“Con el acuerdo de hoy en el trílogo”, ha afirmado el comisario europeo de Presupuestos, Johannes Hahn, “logramos establecer un pilar clave de la construcción general del presupuesto plurianual. Tendremos un mecanismo eficaz para proteger el dinero de los contribuyentes, en caso de que la situación del Estado de Derecho ya no nos permita rastrear los fondos de la UE. La introducción de esta condicionalidad es un paso y una señal clara de que la Unión Europea está lista para proteger los intereses de sus ciudadanos. Espero que el acuerdo de hoy permita centrarse plenamente en la finalización del acuerdo del presupuesto plurianual y el fondo de recuperación. Los ciudadanos, las empresas, las regiones lo necesitan”.
Fuentes de la presidencia alemana han explicado que “el régimen de condicionalidad, que forma parte del paquete de medidas vinculadas al próximo marco financiero plurianual y al plan de recuperación, permite proteger el presupuesto de la UE cuando se establece que las infracciones de los principios del Estado de derecho en un Estado miembro afectan o pueden afectar gravemente a la buena gestión financiera del presupuesto de la UE o la protección de los intereses financieros de la UE en una manera suficientemente directa”.
“Todos los fondos de la UE incluidos en los recursos asignados a través del instrumento de recuperación están cubiertos”, explican las fuentes: “El acuerdo provisional con el Parlamento se basa en la orientación política proporcionada por los líderes de la UE en la reunión del Consejo Europeo del 17 al 21 de julio de 2020. Ahora se presentará para su aprobación por ambas instituciones”.