Las cárceles vascas acumulan 113 positivos en COVID-19 entre presos y funcionarios
Los centros penitenciarios vascos acumulan 113 casos positivos de COVID-19 entre los reclusos y el personal, según los datos ofrecidos este miércoles por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal. Son 94 los presos que han contraído el coronavirus en las últimas semanas, el 6,88% de la población reclusa total, una proporción muy similar a la incidencia en la población general en Euskadi. Los funcionarios contagiados son 19, el 2,71% de una plantilla estimada en 700 personas. Artolazabal ha considerado que “no existe un problema de salud” porque el grueso de los cuadros son leves ni tampoco para garantizar el servicio en Zaballa, Basauri y Martutene.
El brote de mayor importancia -cuyo origen se desconoce- está en la cárcel guipuzcoana. En Martutene 70 presos han dado positivos, como también cinco trabajadores. De ellos, 50 son “asintomáticos” y 20 tiene síntomas “leves”. Además, hay once personas pendiente de confirmación de resultados de pruebas diagnósticas “indeterminadas”. En este presidio se hizo un “cribado masivo” tras la aparición de los primeros casos y Artolazabal ha agradecido la colaboración de los presos, que “entendieron perfectamente la situación” que ha obligado a endurecer los aislamientos y protocolos.
En el caso de Zaballa, la cárcel de Álava, hay 22 internos con COVID-19 y ocho funcionarios. Esta prisión fue la primera de España que tuvo positivos allá por marzo de 2020 y los brotes se han ido sucediendo desde entonces. Artolazabal ha explicado que 14 de los infectados terminarán la cuarentena “en breve”. Finalmente, en Bizkaia (Basauri) hay dos internos y seis funcionarios positivos. Según la consejera, estos datos son reflejo de la elevada transmisión comunitaria en el conjunto de la sociedad, aunque ha enfatizado que “de momento no hay un problema a la hora de poder dando el servicio de calidad” en los centros penitenciarios.
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