Euskadi confirma seis casos de la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido

El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha confirmado este jueves 31 de diciembre los primeros seis casos de la nueva cepa del coronavirus en Euskadi. Son casos que no presentan especial gravedad y que no han necesitado atención hospitalaria. Todos ellos están guardando aislamiento en sus domicilios.

Según han explicado a este periódico fuentes internas de la Sanidad vasca, los laboratorios del hospital Donostia y del hospital de Txagorritxu de Vitoria vienen confirmando desde este lunes que algunos casos positivos de infección por el coronavirus Sars-Cov-2 en Euskadi responden a la nueva variante VUI/2020/12/01, la nueva cepa que fue detectada en el Reino Unido. Las primeras referencias del centro europeo para el control de enfermedades apuntan a que esta variante tiene mucha mayor transmisibilidad, si bien se estima que ni los cuadros de COVID-19 que provoca son más graves ni es más resistente a las vacunas que se están ya distribuyendo.

Madrid, Málaga y Granada eran, hasta ahora, los puntos en España donde habían aparecido casos de esta nueva cepa. Además, en la península se había dado también un foco en Gibraltar, territorio británico. En el mundo, además de en el Reino Unido, hay caso en Italia, Bélgica, Países Bajos, Dinamarca o Australia. Según las fuentes internas consultadas, el origen de los positivos aparecidos en Euskadi -detectados tras una secuenciación genética del virus- podría estar en Andalucía y se analiza también si la alta transmisión comunitaria que se registra en la localidad guipuzcoana de Arrasate-Mondragón guarda relación con ellos, una zona cuyas pruebas son analizadas en Vitoria.

Allí, aunque ha bajado la incidencia un 25% en los últimos siete días, la tasa sigue por encima de 800 casos por cada 100.000 habitantes, cuando el umbral de la alerta roja es de 500. Es la localidad vasca con mayor incidencia.

Precisamente este lunes la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, manifestó que era “posible” la llegada de la nueva cepa a Euskadi, aunque se felicitó de que la tendencia de la pandemia seguía yendo a la baja y afirmó que, en aquel momento, no había constancia de ningún caso de este tipo. Todavía ahora mantienen esa versión oficial. Un día antes, ella misma firmó en el propio hospital de Txagorritxu el albarán de entrega de las primeras 405 vacunas de Pfizer contra la COVID-19. Se trata de un punto muy simbólico en la pandemia en Euskadi ya que fue allí, en la tarde-noche del 28 de febrero, cuando se confirmaron los primeros casos, concretamente el de una internista que había viajado unos días antes también a Andalucía.