Rajoy elogia a Urkullu como ejemplo de “pacto” frente a Puigdemont
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una visita al País Vasco, no ha escatimado en elogios a la capacidad de “diálogo” y “pacto” mostrada por el lehendakari, Iñigo Urkullu, como ejemplo frente a un Carles Puigdemont al que ha atizado con críticas por mantener vivo el desafío independentista. “El entendimiento es lo que produce resultados positivos. Lo otro, lo que propone la Generalitat, es enfrentamiento. Eso no resuelve nada. Lo que se hace entre el Gobierno de España y el Gobierno vasco es lo que se debe hacer, construir juntos defendiendo los intereses de todos”, ha enfatizado Rajoy entre aplausos de cargos y militantes del partido reunidos en el palacio Euskalduna de Bilbao en el acto final de la semana de homenajes a Miguel Ángel Blanco, secuestrado y asesinado por ETA hace ahora dos décadas.
Rajoy ha recordado que la próxima semana, en Madrid, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el consejero vasco del ramo, Pedro Azpiazu, sellarán lo que se ha venido en llamar “paz fiscal”, una reforma del Concierto Económico (la autonomía fiscal vasca) y una actualización del Cupo hasta 2021 (la aportación al Estado y a la solidaridad interterritorial) que se traducirá en 2017 en un pago de unos 200 millones menos que en 2016. Este acuerdo se suma a otros entre el PP y el PNV (que gobierna en Euskadi en coalición con los socialistas), como las nuevas atribuciones concedidas a la Ertzaintza o el pacto presupuestario en las Cortes Generales que acarrea fuertes inversiones en el AVE vasco.
El guante blanco con Urkullu (a quien por cierto no ha recibido en La Moncloa a pesar de las solicitudes reiteradas desde Ajuria Enea) ha contrastado con la extremada dureza con la que Rajoy se ha referido a Puigdemont y a sus planes. El presidente ha repetido en varias ocasiones que el prometido referéndum “no se va a celebrar” y que frente a quienes “incumplen todas las leyes” (significativamente ha dicho que la primera desbordada es el propio Estatut catalán) el Gobierno hará “lo contrario”. “Si violan la ley, nosotros la cumpliremos y la haremos cumplir”, ha zanjado Rajoy, quien en uno de sus habituales juegos de palabras ha dicho que la mayoría de catalanes “ha desconectado de la desconexión”.
Estas palabras de Rajoy se han producido en un acto organizado por Nuevas Generaciones en Bilbao como colofón a la semana de homenajes a Miguel Ángel Blanco. En puridad, el presidente ha hablado más del yihadismo y de Cataluña que de ETA y ha sido la hermana del concejal de Ermua asesinado, Marimar Blanco, quien ha encabezado la denuncia de que los terroristas y su entorno quieran imponer un relato sin “vencedores y vencidos”.
Blanco, visiblemente emocionada y acompañada de la música de Héroes del Silencio, ha vuelto a cargar contra “una alcaldesa”, en referencia a la de Madrid, Manuela Carmena, por la polémica vivida esta semana en torno a los actos en memoria del edil 'popular'. “Ha sido una semana dura en la que he tenido que aguantar encima la bronca de alguna alcaldesa. Cuando se rinde homenaje a una víctima, simplemente es necesario poner voluntad política. Madrid fue un gran impulso [del espíritu de Ermua]. Madrid nunca ha estado de espaldas a recordar la memoria de las víctimas. Madrid tampoco se podía quedar de espaldas este año”, ha señalado Blanco, quien también ha criticado la actitud de “otros partidos” que no ha citado.
Sobre el futuro, Blanco ha dicho que “el único horizonte es la disolución incondicional y la entrega de armas” por parte de ETA (la escenificación de lo segundo se llevó a cabo el 8 de abril) y ha agradecido que los Gobiernos del PP nunca hayan cedido al “chantaje” ni a los “atajos” de negociar con terroristas. Rajoy ha asegurado también que “ETA tiene que asumir el daño causado, reconocer que nunca tuvo sentido, pedir perdón a las víctimas y desaparecer”.