PNV y PSE-EE rechazan celebrar una consulta popular sobre el nuevo Guggenheim en Urdaibai
Después de la masiva movilización del fin de semana en Gernika contra el proyectado nuevo Guggenheim en Urdaibai, que tendría una doble sede en Cubiertos Dalia y Astilleros Murueta, el Parlamento Vasco ha rechazado sendos intentos de EH Bildu y de Sumar para solicitar formalmente la celebración de una cosulta popular en la comarca. La Cámara, en cambio, ha aprobado una resolución promovida por los partidos del Gobierno, PNV y PSE-EE, que tienen mayoría absoluta, en el que se insiste en abrir “un proceso de escucha, participación y debate que propicie un el diálogo sosegado y plural” sobre el necesario “impulso” de la comarca de Busturialdea, la única reserva de la biosfera de la comunidad autónoma, pero dentro de un plan de actuación más amplio que la construcción del museo.
El Gobierno de Imanol Pradales sí ha incorporado el Guggenheim de Urdaibai en sus proyectos estratégicos para la legislatura. Es ya un cambio con respecto a la etapa de Iñigo Urkullu, mucho más tibio frente al “sí o sí” del PNV de Bizkaia al plan hasta el punto de pedir dos años para estudiar la “viabilidad” del nuevo Guggenheim. Dentro de ese “sí o sí” se enmarcaron los 40 millones del propio Pradales siendo diputado foral vizcaíno, su anterior cargo, o la petición de otros tantos al Gobierno de España. En la sesión, la portavoz nacionalista, Irune Zuluaga, ha rechazado que el proyecto sea dañino con el medio ambiente. De hecho, ha indicado que permitirá “descontaminar acuíferos y aguas subterráneas”, así como la “descontaminación de suelos” o la eliminación de “plantas invasoras” o la “renaturalización” de áreas degradadas. “Esto son hechos y realidades que aclaran dudas”, ha manifestado.
Aunque ha insistido en que el plan de reactivación de Urdaibai va mucho más allá que el museo, Zuluaga ha recordado que el Guggeheim ya fue “elemento tractor” en Bilbao cuando abrió en 1997 y ha deslizado que ese “modelo de éxito” ya recibió críticas de los mismos que se oponen ahora. Desde la bancada del PSE-EE, Estíbaliz Canto ha pedido no caer en “apriorismos” porque el Guggenheim de Urdaibai puede ser “interesante” pero es algo que “habrá que analizar”, a pesar de que la ministra socialista Teresa Ribera ya haya comprometido financiación millonaria para ello.
La proponente del debate, Oihana Etxebarrieta, de EH Bildu, ha cerrado sus intervenciones con una pregunta al aire en euskera en la que planteaba si el proceso de participación servirá de algo o se impondrá el “sí o sí” ya verbalizado por las instituciones. “Ningún proceso participativo que se precie puede empezar con un final marcado”, ha agregado, ya en castellano. La coalición demanda “claridad” e “información veraz” a las instituciones. “La ciudadanía de Busturialdea se merece saber sobre qué se sustenta este proyecto, qué objetivos culturales, económicos o medioambientales puede tener. Y, para eso, hay que dar la cara, explicar, responder a las preguntas y escuchar”, ha señalado igualmente. Etxebarrieta llevaba en la solapa de la chaquea una chapita con el lema 'Urdaibai ez dago salgai'.
Sumar, con una iniciativa similar, se ha adherido a la necesidad de que se pronuncie la ciudadanía. Su único parlamentario, Jon Hernández, ha realizado también un “reconocimiento explícito” a las plataformas opositoras y ecologistas de la zona, algunos de cuyos representantes han seguido la sesión desde las tribunas de invitados del Parlamento.
Por el PP ha intervenido Santiago López, que se ha estrenado en el Parlamento. Ha mencionado que “se ha paralizado” una pasarela asociada al proyecto y que el Ejecutivo vasco va a perder la financiación destinada, 1,5 millones. “Por favor, señores de PNV y de PSE-EE, aclárense y digan ya qué quieren hacer con el tema”, ha implorado, si bien los 'populares' no han secundado tampoco las iniciativas de la oposición de izquierdas. Vox, que insiste en denunciar cordones sanitarios y que se silencian sus intervenciones, no ha tomado la palabra en ningún momento.
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