Hablar de la Asociación Extremeña de Ayuda a las familias afectadas de leucemias, linfomas, mielomas y aplasias, más conocida como AFAL, es hablar de compromiso y apoyo. Como también lo es el Programa Compañía Nacional y el Programa Compañía Regional, los dos programas que esta asociación extremeña lleva a cabo, financiados por el Servicio Extremeño de Salud. Uno dentro de la región, con alojamientos en Cáceres y Badajoz, el Programa Compañía Regional, y el Nacional, para necesidades sanitarias fuera de la Comunidad.
“Un reto solidario al servicio de todos los extremeños y extremeñas”, un Programa Compañía Nacional que muchos coinciden en señalar como “necesario y muy importante”, “uno de los programas más importantes a nivel regional y nacional” o “el programa que me salvó la vida”.
Un programa único en España que da alojamiento en viviendas compartidas a pacientes canalizados por el Servicio Extremeño de Salud a hospitales fuera de Extremadura y que, en la actualidad, dispone de cinco viviendas en Madrid, una en Barcelona, una en Salamanca y otra en Toledo, todas ellas cercanas a los hospitales y totalmente amuebladas y acondicionadas.
Hablamos con su actual presidenta, Francisca Chaves, docente de vocación y profesión y comprometida con la sociedad y la vida. Lleva ocho años en AFAL, a la que llegó por convencimiento de la mano de Jose Mari Paredes, su anterior presidente, y desde el 2019 está al frente de su presidencia.
- Ya son varios años al frente de la directiva de la Asociación, en un momento, además, muy complicado, en plena pandemia...
Estos años de pandemia e incertidumbres han sido muy duros para la familia de AFAL. Desde la Asociación se ha seguido trabajando con la misma ilusión y el mismo compromiso que siempre pero en una situación muy complicada en un contexto de crisis sanitaria, social y económica. Durante los momentos más duros del confinamiento y de la pandemia, desde la Asociación se ha seguido llevando a cabo y trabajando muy duro para que no fallase nada en el Programa Compañía Nacional.
- Se habla y se debate mucho sobre la humanización de los espacios desde diferentes perspectivas, y una de ellas es desde la perspectiva de la persona y la familia, ¿qué hace y qué aporta la asociación en general y el Programa Compañía Nacional en este sentido?
AFAL nació precisamente por la preocupación de sus socios fundadores por las familias de los pacientes que tenían la necesidad de acompañar a los enfermos y que estar en una población diferente a la suya les reportaba unas condiciones muy difíciles. La mayoría de los familiares tenían que pasar semanas e incluso meses durmiendo en las sillas tan incomodas de los hospitales. Si eran dos los familiares que acompañaban, en el caso de los niños, mientras uno estaba en el hospital el otro tenía que pasar las noches en el coche, una situación que cualquier familia extremeña no podía ni puede hacer frente a un hospedaje prolongado, ya que el mismo supone un gasto imposible de mantener.
Esto provoca la preocupación, no solo del familiar, sino también del paciente que sufre por su enfermedad y por ver a su madre o padre, o cualquier otro ser querido pasando malas noches y mal alimentado. Y así al proporcionarles una vivienda, gracias al Programa Compañía Nacional, para tener sus pertenencias, poder asearse, disponibilidad para prepararse su propia comida…se les da, al mismo tiempo, tranquilidad.
- No hay más que escuchar y leer algunos de los comentarios de los pacientes del Programa Compañía Nacional para saber que su valor va más allá del alojamiento...
En efecto, además del alojamiento, a las familias derivadas por el SES fuera de nuestra comunidad, también les proporcionamos ayuda psicológica, tanto al paciente como a los familiares, desplazamiento en taxi desde la vivienda al hospital y por supuesto la atención de nuestro personal para todas las gestiones del alojamiento. Ya que si no tenemos nuestras viviendas disponibles, porque estén ocupadas, les buscamos alojamiento en hoteles.
- Ahora, además, se pone en marcha el Programa Compañía Regional, ¿otra gran apuesta?
Pues sí, la Junta de Extremadura subvenciona el Programa Nacional y desde este año también el Programa Regional. Lo que supone tener vivienda en las capitales de provincia, en Badajoz y en Cáceres. Un compromiso más y un reto más que cumpliremos con creces.
Como ocurre en el Programa Compañía Nacional, si las viviendas estuvieran plenamente ocupadas, ya que son viviendas para compartir, buscamos al paciente y familiares habitación en hoteles, eso sí, siempre que la distancia desde su domicilio supere los 80 kms. Además, tienen apoyo psicológico en el hospital, a domicilio o en nuestra sede, como en el Programa Compañía Nacional.
- ¿Cómo ve AFAL de aquí a diez años?
Nuestro sueño es que AFAL siga proporcionando un servicio eficiente a la sociedad extremeña. Date cuenta que en toda España no existe este servicio, en ninguna otra comunidad autónoma, como el nuestro, todo gracias al perfecto engranaje entre la administración y la Asociación y todos sus trabajadores y trabajadoras.