Beiras “AGE tiene que ser un puente entre la ciudadanía activa y el Parlamento”
“Debemos fortalecer la alianza política que constituimos las cuatro formaciones que conformamos AGE. Y después debemos sumar muchas más voces a esta Alternativa Galega porque vamos a necesitar todos los espacios políticos y sociales posibles. Porque los próximos meses van a ser claves: estamos a las puertas de un nuevo rescate, con lo que eso supone. Hablar del rescate es hablar de más desempleo, de más recortes y de más pobreza”. Yolanda Díaz sitúa las dos claves de la Alternativa Galega de Esquerda para los próximos meses: la solidificación del acuerdo partidario que tan buenos resultados obtuvo en las elecciones del domingo y el fortalecimiento del tejido social. “Tenemos que conocernos. Tenemos que vencer los perjuicios entre unos y otros”, añade.
Xosé Manuel Beiras incide en esta idea: “AGE tiene que ser un puente entre esa ciudadanía activa y la cámara de representantes, entre todo ese tejido asociativo que no se limita a decir no a lo existente, sino que formula alternativas a lo existente. Eso debe nutrir nuestra acción en el Parlamento”. Y añade: “Debemos restablecer la posición preferente que en un estado democrático le corresponde a la cámara de representantes”. Asimismo anuncia que la acción parlamentaria de AGE va a ser “activa” y no va a jugar a la defensiva: “Nosotros no debemos jugar a la contra, simplemente diciéndole que no a la mayoría parlamentaria del PP, sino que nosotros debemos tomar la iniciativa y poner el gobierno a la contra. La iniciativa no debe ser del gobierno, sino de la ciudadanía”.
Beiras afirma que la entrada de Alternativa en el Parlamento “debe ser el comienzo de una nueva etapa” pues hasta ahora “la ciudadanía estaba organizándose y movilizándose pero carecía de un puente para trasladar eso a la cámara de representantes”. Y pide “que nos utilicen. Depende de nosotros que seamos receptivos a lo que esa base quiere comunicar y quiere hacer”. A este respecto el número uno de AGE cree que el descenso de PSdeG y BNG se debió a que su acción política durante el primer gobierno de Feijoo se centró en hacer “simplemente esgrima parlamentaria”.
Yolanda Díaz destaca en este sentido que “debemos organizar la rebelión cívica, tenemos que luchar por el poder pero desde la calle. Todos los procesos de cambio en la historia nacieron así”. Y añade que “tenemos que acertar en la organización y en la generosidad, tenemos que continuar con esta ilusión que fuimos capaces de generar”. Díaz concluye que “la batalla está fuera del Parlamento y hay que organizarla. Tenemos que tomar las calles para tomar el poder porque estamos viviendo un proceso revolucionario y es posible cambiar el sistema”.
Y es que AGE quiere basar su acción parlamentaria y política en la actividad y vitalidad de los movimientos sociales y plataformas ciudadanas: “hace falta darle más impulso y más dimensión a los procesos de autoorganización de los movimientos sociales y cívicos”, dice Beiras. “Hay que continuar elaborando alternativas políticas para las problemáticas sobre las que se montan las plataformas ciudadanas, que son las que mejor conocen la situación de sus respectivos ámbitos y por lo tanto son las que mejor pueden formular estas alternativas”, concluye.
La huelga general del 14N
Xosé Manuel Beiras y Yolanda Díaz destacan también la importancia de la huelga general de noviembre: “Tenemos que implicarnos en la huelga. Hay que ganar la huelga y ganar el día siguiente a la huelga”, dice la coordinadora nacional de Esquerda Unida, que destaca que “los sindicatos aciertan en la perspectiva de trabajar en una huelga ciudadana que paralice todos los ámbitos de la sociedad”. De igual manera, Beiras afirma que “la huelga debe ser un instrumento de todas las clases trabajadoras -asalariadas o no- y también de los autónomos, comerciantes y pequeños empresarios”, y que “el movimiento obrero tiene que pensar en alianzas de clase. Porque si no, caerá en aquello que se llamó la doctrina de los dos mundos de Lasalle, que decía que sólo la clase obrera podía ser revolucionaria. Eso llevó a echar en los brazos de la derecha a las llamadas clases subalternas o al campesinado”.
La crisis del PSOE
“El PSOE es un partido del régimen. Y este régimen está caduco y todas sus instituciones: desde la iglesia a la monarquía están en proceso de demolición”, afirma Yolanda Díaz. “Estamos en un proceso constituyente, porque por un lado el proceso de la Transición y de la desmemoria está completamente roto y finiquitado, y a la vez por arriba PP y PSOE nos están metiendo en otro modelo, como hicieron con la reforma de la Constitución o con el Pacto de Estabilidad Europeo”, añade para concluir que el PSOE “tiene que escoger de que lado está, tiene que decidir si vuelve a sus orígenes socialdemócratas o continúa por el camino actual. Y por ese lado su debacle va a ser mayor”.
Beiras concuerda en que “el PSOE abandonó sus bases socialdemócratas y de representación de la izquierda social moderada” y dice que “después del desastre de noviembre podría pensarse que iba a haber cambios pero no fue así. Está totalmente secuestrado por las fuerzas del sistema ultraliberal”. Y aunque reconoce que “en la primera legislatura de Zapatero los socialistas tuvieron otro discurso” y que “Caamaño tiene una visión republicana y más reformista” añade que “el PSOE funciona como uno de los dos pilares de este sistema. Mientras no cambien eso cualquier cambio es imposible”. De igual manera Yolanda Díaz afirma que “veo criticas internas en el PSOE pero no veo reflexiones profundas sobre lo que está sucediendo. Si tiene claro que no quiere seguir sosteniendo este régimen tiene que romper con el Pacto de Estabilidad”. Y se pregunta: “¿Dónde está la alternativa en el PSdeG? Yo no la veo”.