Alcoa pide retrasar una segunda vez la reactivación de su planta en la Mariña de Lugo, comprometida para abril

Alcoa ha pedido en una carta a los trabajadores de su planta de aluminio primario en la Mariña de Lugo volver a retrasar, y sería la segunda vez, la reactivación de las instalaciones, que la multinacional de origen estadounidense había comprometido para el 1 de abril. La empresa había sembrado dudas ya sobre el plan acordado con la plantilla, que ya estaba retrasado con respecto al primero que se aprobó, pero en las últimas semanas ha concretado la amenaza y ha manifestado que prevé pérdidas cuantiosas y que habrá pérdidas de empleo. “Si la situación no cambia significativamente en los próximos meses, anticipamos que los fondos disponibles se agotarán en la segunda mitad de 2024”, dijo hace cuatro días el presidente y consejero delegado de Alcoa, William Oplinger, que añadió que en ese caso, tomarán “decisiones difíciles que tendrán un impacto adverso y potencialmente irrevocable en el empleo y la economía de Galicia en general”.

En la misiva que la empresa dirige a los empleados de la fábrica de San Cibrao (Cervo, Lugo), citada por Europa Press, solicita posponer el rearranque de las 32 cubas de la fábrica de aluminio por esas “pérdidas sustanciales” que calculan en los próximos meses. Asegura que está buscando “cualquier acción” para que el negocio sea “viable”, pero se enfoca en el largo plazo. Mantener las cubas paradas -una situación en la que están desde que empezó 2022- permitiría, según Alcoa, “proteger el efectivo disponible”. Plantea el incumplimiento de lo pactado como una “oportunidad” porque, de lo contrario, se gastarían de forma más rápida “los fondos existentes”.

Alcoa pide una respuesta del comité de empresa antes del próximo miércoles, para cuando ha convocado a los representantes de los trabajadores a una reunión. El compromiso inicial era encender de nuevo las cubas para que estuviesen a pleno rendimiento a mediados de 2024, pero en febrero de 2023 la empresa negoció con el comité de empresa un retraso que suponía que no funcionarían al 100% hasta octubre de 2025.

El comité de empresa ha indicado que no se va a negar a acudir a la reunión planteada por la firma, pero “a nivel informativo”. En un comunicado, los representantes de los trabajadores han solicitado además una cita “de urgencia” con responsables del Gobierno y de la Xunta, para conocer los contactos que ambos han tenido con la dirección de la compañía y analizar conjuntamente el alcance de la vía que propone Alcoa.

El presidente del comité, José Antonio Zan, ha recalcado que existe un “acuerdo firmado” que la sociedad debe cumplir. También ha lamentado que en noviembre deberían haberse aprobado las operaciones para el horno de cocción de ánodos en San Cibrao, la principal inversión que estaba prevista para este complejo industrial, con unos 109 millones de dólares.

Después de conocer la postura de la empresa, el diputado del BNG en el Congreso, Néstor Rego, y la cabeza de lista del Bloque por Lugo, Olalla Rodil, volvieron a reclamar que el Estado intervenga Alcoa si esta no cumple con sus compromisos. La misma petición hizo Podemos, que considera que es la vía para garantizar los puestos de trabajo.