Las llamas han devorado más de 1.000 hectáreas en los municipios ourensanos de Cualedro y Monterrei en las últimas 24 horas. El incendio, que se inició el pasado jueves al mediodía, puso en peligro núcleos de viviendas y obligó a desalojar a varios vecinos. Esto provocó la activación de la situación 2 de emergencia como medida preventiva ante la cercanía de viviendas, aunque la Xunta asegura que el fuego “evoluciona favorablemente” y ya no es un peligro para ningún núcleo de población.
Este incendio se convierte en el más grande del verano en Galicia desde que el 1 de julio se inició la temporada de riesgo extremo. Pocos días antes, también en el ayuntamiento de Monterrei, quedaron calcinadas 720 hectáreas de bosque y pasto. Con este último incendio, que se inició en Cualedro a las 14:15 horas del pasado martes y se extendió a varias parroquias de Monterrei, se ha duplicado la superficie quemada de todo el verano, que el lunes alcanzaba las 1.200 hectáreas.
Este sábado 1 de agosto, el personal técnico del Servizo de Prevención de Incendios Forestais (SPIF) iniciará una huelga indefinida con la que reclaman a la Xunta la mejora de sus condiciones laborales. Pretenden que se les compense el exceso de horas ocasionado por el período de guardias que regula un acuerdo aprobado en el año 2008 y que apenas ha sido modificado.