La Xunta multa al Gobierno, Naturgy e Iberdrola por el vaciado de embalses

La Xunta ha impuesto sendas multas por valor total de 200.000 euros a la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (dependiente del Gobierno central), así como a Naturgy y a Iberdrola, por “mala praxis” al no haber comunicado “de modo oficial” a la Administración autonómica el vaciado de los embalses de Cenza, As Portas, Belesar y Salas el pasado verano.

La sanción del Gobierno de Alberto Núñez Feijóo se produce a pesar de que la decisión de vaciar embalses sí le fue comunicada con tiempo suficiente como para imperdirlo, como desveló elDiario.es el pasado mes de septiembre. Así lo ha recordado este martes la propia Confederación Hidrográfica en un comunicado: “La Xunta de Galicia era plenamente consciente del proceso de bajada del nivel de las aguas en dichos embalses, pues así se lo comunicaron las propias concesionarias y, cuando el descenso alcanzó cotas inferiores al 20%, también la CHMS desde el Centro de Control de Cuenca, como ya se ha demostrado”.

La conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, ha precisado este martes que el expediente sancionador se ha tramitado en base a la ley gallega de pesca continental. Sin embargo, ha advertido que el procedimiento por parte de la Xunta “sigue abierto”, porque el “descenso abrupto” del nivel de los embalses -que ha cifrado en torno al 70%- podría conllevar multas de hasta 2 millones de euros si hay “afectación grave” a la fauna y la flora, una cuestión que hay que analizar “en un tiempo prolongado”.

La Confederación Hidrógráfica dice, por su parte, que la multa ni siquiera respecta el procedimiento legal autonómico. “La consellería anuncia la sanción antes de que concluya el plazo para presentar alegaciones”, aduce, “e incluso antes de que este organismo cuente con toda la información que le ha valido a la Administración autonómica para sostener su tesis acusatoria”. La nota añade que la CHMS actúa “con escupulosa observancia de la normativa vigente” y considera “muy grave que se utilice el agua como arma de demagogia política”.

Esta polémica entre la conselleria y la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), organismo presidido por José Antonio Quiroga y dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, se remonta al pasado verano. A pesar de que la CHMS alegó que había avisado en los meses de junio y julio al servicio provincial de Medio Ambiente en Ourense y a la Consellería de Presidencia a través del 112 de Galicia, la Xunta insistió en que no lo había hecho “formalmente”.

En cualquier caso, el expediente sancionador de la Administración autonómica ha concluido con una multa de 200.000 euros: 50.000 por cada uno de los cuatro embalses que tendrán que pagar a partes iguales tanto la Confederación Hidrográfica como las empresas responsables de cada uno. De este modo, el Ministerio abonará 100.000 euros, mientras que Naturgy -concesionaria de las presas de Salas y Belesar- e Iberdrola -As Portas y Cenza- pagarán 50.000 euros cada una.