En plenas negociaciones entre PP y Vox sobre un posible pacto de gobernabilidad en Balears, la formación de extrema derecha ha dado un vuelco a las mismas tras nombrar como cabeza de lista al Congreso de los Diputados a quien, en los últimos años, se ha erigido en figura clave al frente del partido en las islas: Jorge Campos. El que fuese candidato a la presidencia del Govern balear en las pasadas elecciones autonómicas del 28 de mayo se marcha a Madrid dejando abierto un nuevo escenario en las conversaciones entre conservadores y ultraderechistas.
Mediante un escrito dirigido a la Mesa de la Diputación Permanente del Parlament balear, Campos ha solicitado este lunes la retirada de la credencial de diputado electo, una petición que se realiza un día antes de la constitución de la Cámara balear.
En declaraciones a los medios, Campos ha explicado este lunes que Vox le ha encargado que lidere el impulso de una ley estatal en defensa de los derechos lingüísticos. “Después de más de 20 años trabajando en Balears por la libertad lingüística y el derecho de los padres a educar a sus hijos en la lengua oficial que elijan, voy a luchar con todas mis fuerzas para el cambio necesario que garantice la libre elección de lengua en todos los territorios de España”, ha asegurado.
Tras la salida de Campos, Idoia Ribas, quien durante la pasada legislatura fue la portavoz adjunta de Vox en el Parlament, será ahora la portavoz titular en la Cámara.
Durante estas semanas, Campos ha sido el principal defensor de la entrada de su partido en el futuro Ejecutivo autonómico, apelando al modelo político de Castilla y León, donde gobiernan PP y Vox, partido éste último que, además, ostenta la vicepresidencia de la Comunidad. Una postura que se vería reforzada tras el acuerdo alcanzado entre ambas fuerzas en la Comunitat Valenciana para gobernar en coalición. Para los ultraderechistas, tanto esta región como el archipiélago balear representan dos territorios importantísimos en los que alcanzar el poder y desmantelar las “políticas separatistas y pancatalanistas” que, en su opinión, se han llevado a cabo durante los ocho años de legislatura progresista en ambas comunidades.
“Nuestra petición es clara: entrar en el gobierno”, subrayan desde Vox. E inciden: “Tenemos ocho diputados. No es un piquito que uno necesite para gobernar”. Mientras tanto, el PP insiste en alcanzar un pacto de investidura para “gobernar en solitario”, como ha mantenido hasta el momento la líder popular Marga Prohens. Fuentes del PP señalan a elDiario.es que respetan la decisión sobre la marcha de Campos a Madrid, si bien eluden hablar sobre las “decisiones internas” de otros partidos.
Sobre esto, Campos ha aseverado este lunes que en las conversaciones producidas hasta ahora “nunca” se ha hablado de reparto de cargos ni vicepresidencias sino de cambiar “las políticas de la izquierda”. Según el líder de Vox en Balears, sobre las negociaciones con el PP “en breve habrá noticias”, aunque ha pedido “prudencia” por respeto al resto de partes implicadas. La mesa de negociación, ha añadido, “sigue adelante”.
Campos (Palma, 1975), abogado de profesión, es conocido por haber denunciado al rapero Valtònyc, que le dedicó la siguiente frase: “Merece una bomba de destrucción nuclear”. En aquella época, Campos era presidente de Círculo Balear, una asociación de extrema derecha que fue el germen de lo que sería después Vox-Actúa Baleares. Desde entonces, y durante los últimos cuatro años en los que ha sido diputado en el Parlament balear, Campos ha basado su discurso en denunciar el supuesto “pancatalanismo” de las Islas y los “chiringuitos” –aunque él tuvo uno con el Govern del PP–.