El alto representante de la UE, Josep Borrell, ha lamentado que no se logre un acuerdo para un alto el fuego en Gaza y ha recogido el llamamiento que le ha hecho el Gobierno egipcio en su visita al país para que la comunidad internacional presione a Israel, pero se ha mostrado pesimista. “Podemos poner presión diplomática sobre las autoridades israelíes, pero nuestra capacidad es limitada”, ha reconocido el jefe de la diplomacia europea en declaraciones a la prensa en el paso fronterizo de Rafah.
“Hacemos lo que podemos, también Estados Unidos, pero algo va mal aquí. No entiendo por que el alto el fuego no se ha logrado. Alguien está procastinando”, ha expresado Borrell, que ha vuelto a criticar la masacre que el Gobierno de Benjamin Netanyahu está perpetrando sobre la población palestina. Tras recordar que la UE condenó en los términos “más enérgicos” el ataque de Hamás a Israel, ha asegurado que “un horror no puede justificar otro horror”. “Y lo que pasa hoy en Gaza es otro horror, no es una cuestión de defensa, es una violación de derechos humanos”, ha apostillado.
Durante su visita, el Gobierno de Egipto ha destacado la responsabilidad de la comunidad internacional y de la UE para ejercer una “presión intensa” con el fin de alcanzar un acuerdo que ponga fin a la guerra actual en Gaza, informa Francesca Cicardi. El ministro de Exteriores egipcio, Badr Abdelaty, denunció este lunes que el Gobierno de Israel “miente” sobre la razón de no retirarse de la frontera entre Gaza y Egipto con el objetivo de “desviar la atención de sus crímenes y asesinatos contra civiles” en el enclave palestino, informa la Agencia EFE
Borrell ha secundado los esfuerzos de los mediadores (Estados Unidos, Egipto y Qatar), pero ha reconocido que hay falta de “voluntad política” para que el alto el fuego sea una realidad.
El jefe de la diplomacia europea ha cargado, además, contra el bloqueo en el paso fronterizo de Rafah que impide la llegada de apoyo humanitario a la población palestina. Se ha referido a la zona como un “museo de productos rechazados” en un lugar en el que hay hasta 1.400 camiones bloqueados y ha puesto como ejemplo la negativa a dejar pasar barritas energéticas que suministrarían el aporte calórico necesario bajo la premisa de que es un “artículo de lujo”.
“Hay demasiados obstáculos”, ha dicho Borrell sobre ese apoyo humanitario que sostiene que es el primer paso en la crisis y que después se debe abordar la búsqueda de una solución política. “La cosa má urgente es que estas ambulancias entren o reciban a los heridos”, ha clamado Borrell, que también ha recordado que la UE está dispuesta a facilitar medios para que la frontera pueda ser reabierta, pero que se deben dar unas condiciones de seguridad y un acuerdo que impliqe a las partes.