El Parlamento Europeo ha concedido el premio Sájarov a la libertad de conciencia de 2023 a la joven Mahsa Amini, que murió detenida por haberse colocado mal el velo, y el movimiento Mujer, Vida y Libertad de Irán que lideró las protestas por los derechos en ese país. Los grupos mayoritarios del Parlamento (PPE, S&D y Renew) presentaron esta candidatura para reconocer las movilizaciones y mandar una “gran señal” de apoyo a la libertad de las mujeres en Irán.
La muerte de Masha Amini generó una oleada de indignación en Irán. La represión policial, que costó la vida a decenas de personas, provocó la reacción de la UE que ha incrementado las sanciones a Irán en los últimos meses.
La presidenta de la Eurocáma, Roberta Metsola, ha anunciado el premio, que ha sido recibido en pie por el hemiciclo. “El 16 de septiembre de 2022 es una fecha que perdurará en la infamia”, ha expresado la dirigente conservaora, que ha señalado la muerte de Masha Amini como “un punto de inflexión” que “desencadenó un moviemieno de mujeres que está haciendo historia”. “Que nuestro premio sirva de tributo a los jóvenes, mujeres y hombres valerosos que están impulsando la lucha por el cambio en Irán. El Parlamento Europeo les oye y estamos de su lado”, ha sentenciado Metsola.
Vilma Núñez de Escorcia y Rolando José Álvarez Lagos, dos defensores de los derechos humanos frente al régimen de Daniel Ortega en Nicaragua eran finalistas a recibir el premio. La primera es directora del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos y el segundo es un obispo encarcelado por negarse a abandonar el país. La propuesta la hicieron 43 eurodiputados para denunciar las “continuas violaciones de derechos humanos” en ese país.
La tercera candidatura era para tres activistas por el derecho al aborto seguro que impulsó el grupo de la izquierda para mandar un “mensaje político” sobre el retroceso de los derechos de las mujeres en algunos países. En concreto se trata de Justyna WydrzyÅska, condenada en Polonia por proporcionar píldoras abortivas a una mujer; Morena Herrera, activista feminista y presidenta de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto en El Salvador; y Colleen McNicholas, una doctora que practica aborto seguro en Estados Unidos.