Ucrania logra su primera victoria en la contraofensiva en el frente de guerra de la región sur de Zaporiyia. Según ha informado el propio gobernador impuesto por Moscú en esta área, Vladimir Rogov, las fuerzas ucranianas habrían tomado el asentamiento de Piatykhatky en las últimas horas.
Este funcionario ruso ha publicado a través de Telegram un mensaje en el que reconoce que “las ofensivas del enemigo dieron resultados, a pesar de las enormes pérdidas”, según ha informado Reuters. Rogov añade que a artillería rusa está golpeando ahora a sus adversarios para evitar que se atrincheren en la localidad.
Por el momento ningún representante de Ucrania se ha pronunciado al respecto, pero de confirmarse este avance se trataría de la primera conquista de una aldea de Ucrania en casi una semana.
Rogov también ha señalado que de afianzarse en Piatijatki, el próximo movimiento de las fuerzas ucranianas podría estar dirigido a la localidad de Zherebianki, acabando por reafirmarse en la ciudad de Vasilivka.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso no ha confirmado a pérdida de control sobre Piatijatki, pero sí reconoció que los combates más duros se libran ahora en el frente de Zaporiyia: “Durante la última jornada, las fuerzas armadas de Ucrania continuaron los intentos de atacar en los frentes de Zaporiyia, sur de Donetsk y Donetsk”, señala el informe castrense.
Desde hace dos semanas a lo que asistimos en la guerra en Ucrania es la una contraofensiva, que consiste en la realización de reconocimientos armados, llevados a cabo por pequeñas unidades, que principalmente buscan detectar los puntos débiles de la defensa rusa.
“Ni la recuperación de un puñado de localidades por parte ucraniana –un total de unos 100 kilómetros cuadrados, según Kiev– ni la destrucción de una docena de blindados por parte de Rusia permite extraer ningún juicio concluyente sobre el devenir de la guerra para los próximos meses”, explica en elDiario.es Jesús A. Núñez, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria, que también señala que Rusía podría “intentar prolongar el conflicto todo lo posible, buscando el cansancio entre los países que suministran ayuda y armas a Kiev y el agotamiento del empuje ofensivo de los atacantes”.