Oliver Stone compara a la administración de Obama con la de Hitler y con la Stasi
Oliver Stone lleva ya semanas paseando su mensaje 'antiescuchas' por el mundo. Pasó por la ComicCon, por el Festival de Toronto... y hoy le ha tocado el turno a Europa, al Festival de San Sebastián. El director estadounidense ha presentado ante la prensa Snowden, su película sobre el exagente de la CIA y de la NSA que reveló el sistema masivo de escuchas llevado a cabo por el gobierno de Washington. La primera pregunta a la que se ha enfrentado durante su comparecencia ante los periodistas ha sido muy política: ¿cree que los candidatos a la Casa Blanca resolverán la situación de Edward Snowden? “Lo primero que debo decir es que la película fue concebida hace dos años, así que no tengo una agenda política”, comenzaba. “Ninguno de los dos candidatos se ha referido al Estado de Vigilancia, ni mucho menos a Edward Snowden. La mejor esperanza es que el presidente Obama, al que le quedan unos meses, en su infinito sentido de la piedad, le conceda el perdón”.
Hay que recordar que el exagente se encuentra en Moscú, de donde no puede salir porque el gobierno norteamericano le retiró el pasaporte. Obama ha seguido en el centro de las declaraciones de Stone, que asegura que la vigilancia sobre los ciudadanos no ha ido a menos... a pesar de que el caso que retrata en su película ha provocado algunas reformas legislativas. “Obama ha creado el más global y masivo Estado de Vigilancia que se pueda concebir, mucho más allá que la Stasi alemana. Mucho más”, decía. Y añadía esto sobre la llamada guerra contra el terrorismo: “Eso de la necesidad de sacrificar las libertades civiles por el terrorismo... eso lo hemos oído muchas veces. Los alemanes lo oyeron en los años treinta, fue una de las primeras cosas que hicieron los nazis. Tengamos cuidado con los fascistas y tiranos que se hacen con los gobiernos y que nos dicen que nos van a proteger, yo no quiero esa protección”, decía entre aplausos de algunos de los presentes.
El director ha contado cómo fueron sus encuentros con Snowden en Rusia, y cómo tras sus conversaciones con él se impregnó del mismo secretismo que invade todas sus acciones. “Mantuvimos el guión offline el mayor tiempo posible porque, ya sabe, habría una gran recompensa para quien hackease el guión sobre el mayor hacker del mundo. Teníamos encuentros en persona e hicimos que chequearan nuestros teléfonos móviles”, ha dicho el director de Platoon o de JFK: Caso abierto. A su lado se sentaban Joseph Gordon-Levitt y Shailene Woodley, protagonistas de la cinta. Ella se refería a la controversia que genera la figura de Snowden. “Cuando se habla de si es un héroe o un traidor... pienso que es simple simplificarlo solo en una palabra, y creo que se olvida que es un ser humano embarcado en su propio viaje, como todos nosotros”, reflexionaba la actriz.