Casi sin querer Calle, con un centrochut, fue el artífice de que el Haro logre la primera victoria de la temporada en El Mazo. Un triunfo de fe, de garra y de coraje. Tres puntos merecidos que dan tranquilidad en la tabla, pese a que estamos en la jornada 5, a los jarreros y que provocan que el cuadro riojalteño evidencia que se ha recuperado de la derrota inicial y que está dispuesto a competir cada partido en esta categoría. Aitor Calle, además, está involucrando a toda la plantilla en aras de lograr un objetivo complejo pero que tras el duelo de este domingo se ve más cerca si se mantiene la misma tónica.
Casualidad o no, Fermín ha vivido los dos triunfos y en ambos no ha encajado gol. Si ante la UDL su presencia fue fundamental para desarticular el juego de los logroñeses, contra el Guijuelo no tuvo que ser tan decisivo, una señal de que el Haro no sufrió demasiado frente a un rival que apenas generó oportunidades. Y eso que los de Ángel Sánchez entraron con mejor pie en el partido. Más asentados y con mayor proyección ofensiva. Así, Espina rozó el larguero y después casi sorprende a Fermín por bajo, además de que Juanjo probó al portero de Baños de Río Tobía. Todo en apenas 10 minutos. Le fue costando el ritmo al conjunto jarrero, pero en cuanto Facu, Josua y Monterde empezaron a entrar en contacto con el balón y hacerse dueños del centro del campo, el panorama fue distinto.
Pirri debutaba en liga en compañía de Armando en el centro de la zaga. Cuarto central tras Javi Duro -importante hasta que se lesionara- y Simón (convincente en las dos presencias que ha tenido). El defensa tuvo tajo en el tramo final, pero solventó sin dudas el trabajo. Pese a las modificaciones del técnico vasco, no se vieron lagunas ni falta de compenetración, aspecto a destacar.
El encuentro fue tomando otro cariz tras el paso por los vestuarios. El Haro ya había dado un paso adelante. El Guijuelo estaba sufriendo. No en vano pasó agobios con una sucesión de ataques locales. Primero vino el gol anulado a Mikel Bueno tras un córner en una acción dudosa cuando menos. Después Iván Pérez sacaba en la línea de gol lo que ya se celebraba en la grada después de una vaselina de Valiño. Parecía que los chacineros sobrevivían ante el ímpetu de un Haro consistente al que es cierto le cuesta generar. Pero tiene otras cosas. Entonces apareció Calle para escorarse por su perfil diestro. La quiso poner al área, pero el cuero fue describiendo una parábola que sorprendió a Guillermo. Ni se movió. El balón tocó en el poste y para dentro. Alegría. Delirio.
Faltaban casi un cuarto de hora para la conclusión, así que había que ponerse el mono de trabajo para aguantar las embestidas de un Guijuelo que quemaría sus naves. Antes, Mikel Bueno se gustó demasiado en el área con dos ‘ruletas’ que terminó con tiro de Valiño flojo a las manos del portero. Fue la última visita al área rival porque hasta el final, el conjunto verdiblanco insistió en el juego directo, en los balones a la olla. Con esa idea, Bolaños tiró sin precisión, aunque sí fuerte, para que Fermín se adornara. El tiempo avanzaba sin que pasara nada, mejor. Aunque Iván Pérez aún tendría el empate en su cabeza tras un saque de esquina. Se marchó fuera. Entonces sí que llegó el momento de celebrar la victoria.
Ficha técnica
Haro: Fermín; Calle, Armando, Pirri, Medrano (Loza, min. 63); Facu, Josua; Joseba (Ibrahima, min. 70), Monterde, Valiño; y Mikel Bueno (Simón, min. 91).
Guijuelo: Guillermo; Juanjo, Jonathan (Dan Ojog, min. 19), Iván Pérez, Razvan; Carmona, Carlos Rubén, Cristóbal (Iván Agudo, min. 79), Andi (Adrián Cruz, min. 65); Espina y Bolaños.
Gol: 1-0, min. 78: Calle.
Árbitro: Imanol Irurtzun Artola (Comité Navarro). Amonestó a los locales Medrano (min. 21) y Mikel Bueno (min. 65) y a los visitantes Bolaños (min. 29) y Carlos Rubén (min. 88).
Foto: Haro Deportivo