Silvia Andrés es gerente de FEAPS, Plena Inclusión, una Federación formada por cuatro Asociaciones y una Fundación Tutelar que comparten un proyecto común. Nuestro objetivo, explica Andrés, “contribuir, con apoyos y oportunidades a que cada persona con discapacidad intelectual del desarrollo y su familia, puedan desarrollar su proyecto de calidad de vida, así como a promover su inclusión como ciudadanos de pleno derecho en una sociedad justa y solidaria”.
Y en esta labor, el trabajo ocupa un papel fundamental. Y de hecho, cuenta Andrés, en Feaps, Plena inclusión también organizamos talleres de empleo y ayudamos a nuestros socios a buscar trabajo o seleccionar aquel que más se ajuste a sus perfiles.
Y es que como cuenta la gerente de FEAPS, Plena Inclusión afortunadamente “vamos avanzando”. Es muy distinto el panorama que me encontré hace 20 años cuando comencé a trabajar que el que hay ahora. En este tiempo, explica, hemos cambiado todos, también las organizaciones que hemos dejado de ser meramente asistenciales para comenzar a dar una atención y servicios más a medida, en función de las necesidades específicas e cada uno.
Pero a pesar de los cambios, Andrés reconoce que todavía queda mucho por hacer porque “una cosa es convivir con las personas con discapacidad y otra muy distinta compartir”. “Nos tienen que conocer para que la sociedad se dé cuenta de lo que somos capaces de hacer”. Un camino que poco a poco se va recorriendo porque cada vez hay más empresas que deciden contratar a personas con discapacidad o que encargan trabajos a centros especiales de empleo.
Porque el empleo, también para las personas con discapacidad, es fundamental. “Nos da nuestra independencia, nuestra autonomía. El empleo te da el sueldo y el sueldo te da la vida”. Pero además posibilita que estas personas compartan espacios y vida con otras. “Poco a poco la sociedad tiene que quitar el miedo a lo desconocido y darse cuenta de lo que estas personas son capaces de hacer compartir con ellos espacios y vida”, concluye Andrés.