Ifema gastará 47 millones de euros en tres nuevos pabellones junto a la Fórmula 1 y provocará 13 años de números rojos
“Esta actividad no supone gasto para el Ayuntamiento como administración, aunque sí, como se verá más adelante, como participante del Consorcio”. La frase, extraída de la memoria de viabilidad y sostenibilidad económica del plan especial en Ifema Madrid que allana el terreno al circuito de Fórmula 1, sintetiza los planes del Gobierno de José Luis Martínez-Almeida respecto a la cita automovilística que llegará a Madrid en 2026. La “inversión pública 0” anunciada por Almeida y la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso no será tal, sino que se ejecutará a través de una entidad con capital público-privado. Un organismo, Ifema, que gastará 47,5 millones de euros y no espera recuperar la inversión hasta que transcurran 13 años.
En la memoria económica, a la que ha tenido acceso Somos Madrid, se prevé un coste total de 47.551.864.000 para la ejecución de los trabajos. La mayoría del dinero se destinaría a levantar tres nuevos pabellones en el recinto ferial donde alojar instalaciones como el paddock o talleres. Los pabellones 11 y 12 tendrían un coste de 10.371.585 euros cada uno, mientras que para el 14 se anticipa una inversión de casi 15 millones.
A ello hay que sumar más de 2,5 millones en un nuevo aparcamiento de vehículos pesados o más de 3 millones en obras de urbanización. Estas cifras se complementan con los gastos anuales en mantenimiento y gestión. Estos números dejan fuera el circuito y otras instalaciones indispensables para las carreras, que precisarían de un proyecto de ejecución propio que podría no ser asumido por Ifema, sino a través de capital eminentemente privado. Ese es al menos el objetivo, y el compromiso, del Gobierno autonómico y el municipal.
La revista Forbes estima en 1.000 millones de dólares (unos 932 millones de euros) el coste de organizar este evento durante 10 años. Son cifras de 2017, por lo que la inflación ha podido incrementar sensiblemente esa cantidad. Esa cantidad incluye la edificación de las infraestructuras o su mantenimiento, pero también el canon millonario que los promotores deben abonar anualmente a F1 por el mero hecho de acoger el Gran Premio.
En pérdidas hasta 2040
La memoria económica prevé 13 años en números rojos antes de compensar el dispendio de 47,5 millones. Los beneficios anuales se moverían entre los 3 y los 7 millones de euros por edición, pero en 2040 todavía seguiría en déficit con unos 18 millones de pérdidas.
Por ello se aconseja alargar la concesión a Ifema de la parcela más allá de su actual límite en ese 2040: “El inicio de la explotación de la inversión en el año 2028, con plazo de amortización a 30 años tras la ampliación de la actual de concesión de la parcela, permite la rentabilidad del proyecto”. El beneficio con una extensión por tres décadas, según la memoria del plan especial, superaría los 6 millones de euros. La ampliación de la concesión es lo más esperable, pero también tendría que producirse la del acuerdo entre la Fórmula 1 y las autoridades madrileñas para ampliar los 10 años de contrato inicial.
Los 13 años de pérdidas serían asumidos por Ifema. Su capital procede en un 31% por la Comunidad de Madrid, un 31% por el Ayuntamiento, un 31% Cámara de Comercio de Madrid y un 7% Fundación Montemadrid. Así, un 62% de su financiación corresponde a entidades públicas, aunque dispone de beneficios operativos propios al margen de estas aportaciones. “Lo hemos hecho a través de Ifema con la premisa, además, de que no hubiera inversión de dinero público”, avanzó en declaraciones a la prensa Almeida el pasado diciembre sobre la llegada a Madrid del acontecimiento deportivo.
Este particular organigrama propicia un lenguaje ambiguo al respecto de la inversión y posible pérdida para las arcas públicas. De este modo, en el mismo documento pueden leerse frases como “la actuación no supone ni ingresos ni gastos para la Administración Local” y “estamos por tanto ante una actuación realizada con capital público”.
La demora en obtener rentabilidad cobra especial importancia porque, después de la presentación de la Fórmula 1 en Madrid el pasado enero, fuentes de Ifema detallaron a este periódico que la ausencia de financiación pública directa se sustentará en los beneficios generados por la propia carrera: “La cuenta de resultados del Gran Premio va a soportar todas las inversiones y compromisos financieros, sin aportación de dinero público en ningún concepto”.
Obras con “camuflaje” al servicio del futuro Gran Premio
Desde el grupo socialista expresan a este medio sus dudas con la fórmula elegida, la participación de Ifema y el contenido de este plan especial: “Sí a la F1, sí a que en Madrid se pueda desarrollar este evento, pero con total transparencia. Dijeron que no nos costaría ni un euro público y ya vamos por 47 millones”. El portavoz del PSOE en la Comisión municipal de Urbanismo, Antonio Giraldo, critica que “se camufle” como una actuación al servicio de Ifema lo que “al final son las obras para el Gran Premio”.
El plan especial es un primer paso del Ayuntamiento de Madrid para que desde 2026 Ifema acoja el Gran Premio de Fórmula 1. También es el antecedente directo de cara a un futuro proyecto de ejecución enfocado específicamente a la cita automovilística en el entorno de Valdebebas, en un ámbito de superficie del que Ifema posee casi el 69%.
“Al final se están ejecutando varios cambios con la finalidad última y única del circuito: dos pabellones paddock y un tercero en un aparcamiento para oficinas. Es un poco trampa, el plan especial se destina a incrementar metros cuadrados de Ifema para utilizarlos de cara a la Fórmula 1”, opina. La edificabilidad del recinto aumentará en 13.600 metros cuadrados hasta los 353.600, el máximo permitido.
Hacer espacio a las instalaciones automovilísticas supone además mermar las plazas de parking en el entorno. Actualmente, Ifema cuenta con un total de 9.712 aparcamientos. Pasará a disponer de 8.360. La memoria del plan especial lo justifica porque continúa dentro de la normativa: “La dotación de plazas de aparcamiento cumple con amplio margen el rango más elevado previsto en la legislación. Las 8.360 plazas que finalmente se proponen superan la ratio de 1,5 plazas por cada 100 metros cuadrados construidos, ya que suponen alcanzar una ratio de 2,36 plazas”. Sin embargo, el proyecto supone la pérdida de casi 1.400 plazas, en torno a un 15% del total.
Son algunas de transformaciones del enclave que se conocen ya, al igual que la tala de 729 árboles o los cuatro meses de montaje para vivir tres días de carreras a principios de septiembre. Pero el plan especial está sujeto a modificaciones (PSOE y Más Madrid ya han anunciado alegaciones), todavía no se conoce el proyecto de ejecución para el circuito. “Hasta que exista sabremos cómo serán específicamente esos pabellones”, apunta Giraldo.
El edil socialista profundiza en las alegaciones que presentará su grupo: “Son de carácter técnico, aunque también creemos que la finalidad no es la que se dicen, ya que no es una mejora de Ifema sino la alfombra roja al Gran Premio. Por ello vamos a exigir esos ajustes técnicos”. Concluye recordando que “el recinto ferial es una infraestructura parcialmente pública, así que sí nos va a costar dinero público” y puntualizando que “la alegación es al plan especial de mejora del Ifema, no a la Fórmula 1”.
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