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Un pozo en la calzada, la cocina fantasma con más tránsito de Tetuán y el búnker de la Guerra Civil

El agujero que se ha abierto dejando a la vista un pozo subterráneo en la calle de José Calvo

Luis de la Cruz

4 de mayo de 2022 01:01 h

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Desde hace algo más de un año a esta parte, la calle de José Calvo ha salido en los medios de comunicación más que en toda su dilatada existencia. La presencia de 31 cocinas de uso industrial situadas en una nave, a la que se accede por el número 10 de la calle, tiene al vecindario en pie de guerra. Lo que les molesta es la proliferación de humos, basuras, ruidos y el trajín constante de numerosas motos de reparto, que permanecen todo el día apostadas frente a la puerta de las cocinas fantasma para retirar los pedidos a pie de calle.

El pasado 20 de abril por la tarde apareció de repente un socavón en la calzada de la calle, casi enfrente de las cocinas fantasmas. Un agujero de un diámetro no muy grande pero que deja ver un pozo de varios metros de profundidad. El modesto perfil del pavimento –formado por el adoquinado histórico de la calle cubierto por la actual calzada– y el aspecto endeble del firme alrededor del mismo, hacen temer que el suelo vuelva a ceder, con funestas consecuencias.

El día del hundimiento, los bomberos y la policía solo dejaron una valla móvil, un cono y un poco de cinta de plástico con el fin de rodear el agujero y disuadir a vehículos y caminantes de pasar sobre la zona afectada. Los vecinos se esmeran en mantener la señalización en su sitio pero, según nos cuentan, es movida constantemente para pasar.

“Yo he visto incluso a coches pasar esquivando el agujero –explica Santiago, vecino de la calle y miembro de la Plataforma de Afectados por las Cocinas Fantasmas de José Calvo–, y las motos de los repartidores lo hacen constantemente, subiendo por las aceras si es necesario. El otro día un camión quería pasar, pero un vecino y yo le dijimos que no lo hiciera, que se podría hundir. Nos tememos que haya un accidente”.

Desde el día del suceso, nadie ha acudido a arreglar el agujero y, por conversaciones informales con personal del Ayuntamiento, los vecinos creen que en la Junta de Distrito no están al tanto del tema. El Grupo Municipal Más Madrid ha presentado una pregunta al respecto para la sesión ordinaria de la Junta Municipal de Distrito de Tetuán, que se celebrará el próximo jueves, 5 de mayo.

“Pensamos que el aumento del tráfico desde que están aquí las cocinas, incluido el paso de camiones de carga y descarga, que paran en este mismo sitio, puede haber provocado que cediera un terreno que no estaba en bue estado”, explica Santiago.

Cabe preguntarse por qué existe este pozo en la calle. Aunque habrá que buscar una razón en los posibles usos que el subsuelo de la calle ha tenido en el pasado, algunos vecinos creen que la respuesta puede estar en los libros de historia.

El libro Los refugios antiaéreos de Madrid durante la guerra civil (1937-1939), de Manuel de Vicente González (Ministerio de Defensa, 2019) da pistas acerca del posible origen de la estructura subterránea que ha aparecido al ceder el pavimento de la calle de José Calvo.

 En sus páginas, aparece catalogado un refugio antiaéreo (probablemente no terminado) entre las calles de José Calvo, Alonso Núñez y Margaritas, con capacidad para 400 personas y una profundidad de 9 metros, del que se desconocen los planos pero se sabe que iba a tener un acceso por la propia calle de José Calvo y otra por la de Margaritas. El refugio subterráneo, para cuya realización se debían mover 854,16 metros cuadrados de tierras, contaba con pozos  –se excavarían 5, verticales–, galerías abovedadas, dos pozos de ventilación, una cámara de gases y 70 metros lineales para asientos. En definitiva, una importante estructura bajo tierra cuya localización exacta y estado avanzado de la obra en el momento que se cegó se desconoce, y que ha llevado a pensar a los vecinos que podría corresponderse con el boquete de la calle.

El suceso del socavón ha servido para reavivar la protesta de los vecinos agrupados en la Plataforma, que han convocado, junto a la FRAVM y la Asociación Vecinal Cuatro Caminos-Tetuán, una concentración en su calle el próximo 5 de mayo a las 12 h. para llamar la atención sobre su problemática. Actualmente está en trámite una nueva reglamentación para las cocinas fantasmas y los vecinos de la calle de José Calvo piden que se incluya a las que están operando ya con un periodo de adaptación.

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