Geroa Bai mantiene en vilo a Chivite y alarga las conversaciones para repetir el Gobierno progresista en Navarra
Jornada maratoniana en Navarra en las negociaciones para conformar Gobierno. Geroa Bai, la coalición integrada por Socialverdes y PNV que lidera la expresidenta Uxue Barkos, están tensando la cuerda y, por el momento, no termina de dar luz verde a la continuidad del Gobierno de coalición en Navarra con PSN y Contigo/Zurekin, la marca de Podemos, IU, Batzarre y Berdeak Equo, entre otros, que ya aceptó la pasada semana. A las 20.30 horas, los partidos continuaban reunidos en la sede del Parlamento, en el centro de Pamplona.
Han pasado dos meses largos desde las elecciones forales y quedan apenas tres semanas para no tener que repetirlas, por lo que el tiempo empieza a apretar. La formación de Barkos, con todo, se había asegurado ya mantener todos sus cargos de la pasada legislatura (presidencia del Parlamento ya lograda, senador autonómico y cuatro carteras del futuro gabinete cambiando Vivienda por Salud -una cartera de 1.300 millones en vez de una de 88- y una de ellas con menos competencias pero con el rango de vicepresidencia segunda) pero está elevando a la categoría de críticas algunas diferencias programáticas con el PSN y también la fórmula de relación dentro del gabinete compartido.
Este lunes ha sido una jornada frenética en pleno agosto. Por la mañana, a las 10.00 horas, Geroa Bai ha mantenido una reunión interna a la que han llegado separadamente las dos patas de la formación. Después, a las 17.00 horas y en el Parlamento, una amplísima delegación de Geroa Bai encabezada por Barkos y con dirigentes de PNV y de Socialverdes se ha reunido con los equipos de PSN y Contigo/Zurekin. En estas semanas, están capitaneando las negociaciones por un lado una dirigente del PNV navarro, María Solana, y, por el otro, el socialverde Pablo Azcona.
El encuentro ha ido teniendo al menos dos recesos, según las fuentes consultadas, de modo que las partes han ido analizando las contrapropuestas. La que será presidenta, María Chivite, no ha participado en las conversaciones, aunque sí ha estado permanentemente informada por sus colaboradores, encabezados por Ramón Alzórriz.
Ya el pasado viernes Geroa Bai desactivó la euforia del entorno de Chivite asegurando que quedaba mucho trecho. Llevan semanas exhibiendo sus reticencias a pesar de que el 28M les dejó con menos fuerza que el pasado cuatrienio. Geroa Bai ha caído de tercera a cuarta fuerza en el Parlamento navarro, superada por EH Bildu. Retiene siete escaños y uno de los argumentos esgrimidos en los últimos días es que cuatro áreas de trece totales de la coalición de Gobierno no representan el tercio que suponen los siete escaños de 21 que tendría ese Ejecutivo compartido.
Con todo, internamente no prevén que la sangre llegue al río y que haya que forzar la repetición electoral. Geroa Bai, en las generales, cayó a la séptima plaza, superada incluso por Vox. Es más, EH Bildu ya se ha ofrecido a pasar de la abstención activa imprescindible para superar al bloque de la derecha, como en 2019, al 'sí'. Chivite teme ahora menos esta opción dado que Pedro Sánchez está en la misma tesitura con los diputados abertzales en el Congreso para su propia investidura. En todo caso, el proceso parlamentario tiene que ser activado con una ronda que controla precisamente Geroa Bai, ya que el presidente de la Cámara es el líder del PNV navarro, Unai Hualde.
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