Navarra abre la puerta a solicitar el estado de alarma para garantizar las limitaciones de la movilidad

El Gobierno de Navarra abre la puerta a solicitar el estado de alarma como medio para aplicar las medidas restrictivas anunciadas el lunes por la presidenta María Chivite si se diera la circunstancia de un revés judicial. En el Ejecutivo foral son conscientes de que cabe la posibilidad de que la Justicia no avale algunas de las restricciones y, en caso de que fuera así, estudiarían la posibilidad de solicitar el estado de alarma al Gobierno de Sánchez para que pudieran seguir vigentes. “Vemos el Estado de alarma como un instrumento y no como un fin. El fin es doblegar la curva de contagios, reducir la carga asistencial hospitalaria y reducir los fallecimientos”, ha explicado este miércoles el vicepresidente y portavoz del Gobierno de Navarra, Javier Remírez.

Navarra es la primera comunidad que va a cerrar todo su territorio, algo que no se ha hecho hasta el momento en ninguna otra comunidad sin estado de alarma. Los jueces han avalado hasta la fecha confinamientos de municipios, pero nunca se han tenido que pronunciar sobre el cierre perimetral de toda una comunidad autónoma. Corre el riesgo de que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra tumbe esta restricción, ya que los tribunales han dado por buenos aquellos confinamientos con una limitación temporal y geográfica clara. En el caso de la comunidad foral se aplican las mismas restricciones para zonas con alta incidencia de COVID-19, como Pamplona, que para municipios con apenas casos de coronavirus o incluso ninguno, como en la zona del Pirineo, lo que podría llevar al la Justicia a no avalarlo.

Con todo, desde el Gobierno foral confían en que al igual que sucedió con los decretos anteriores, la Justicia avale todas las medidas recogidas en la orden foral que se ha publicado este miércoles. También se está esperando al consejo interterritorial de Salud de mañana en el que participará la consejera Santos Induráin con sus homólogos autonómicos y con el ministro Salvador Illa, en el que se puede acordar que el Estado aplique otros criterios generales como el toque de queda que han pedido varias comunidades y que Navarra no rechaza, que obligaría a la aplicación del estado de alarma en todo el territorio.