Más de 100 muertos y decenas de heridos por un ataque israelí contra una escuela en Gaza

Más de 100 personas han sido asesinadas y decenas han resultado heridas este sábado por el bombardeo del Ejército israelí en la escuela Al Tabin, en Ciudad de Gaza, que servía como refugio para desplazados por la guerra. Israel ha defendido que su ataque tenía como objetivo un centro de mando de militantes de Hamás que se escondían en las instalaciones.

El Ministerio de Salud de Gaza ha informado este domingo que el número de víctimas mortales de la ofensiva israelí sobre la Franja, que comenzó el pasado 7 de octubre en represalia por los atentados de Hamás, supera ya los 39.790. Las autoridades sanitarias también han confirmado que los heridos ascienden a 91.702, en su gran mayoría civiles.

“El Ejército de ocupación ha bombardeado directamente a los desplazados mientras realizaban la oración del amanecer en la escuela Al Tabaín, ubicada en el barrio de Al Daraj”, ha indicado el gobierno de Hamás en un comunicado en el que responsabiliza a Israel y a Estados Unidos, su principal socio y proveedor de armas, por “el crimen de genocidio y limpieza étnica”. “Debido al horror de la masacre y al gran número de muertos, los equipos médicos, de Defensa Civil, de socorro y emergencia aún no han podido recuperar todos los cuerpos”, añaden.

Abbas pide a EEUU que ponga fin a su “apoyo ciego” a Israel

Imágenes de cuerpos destrozados entre los escombros, aparentemente tras el bombardeo en la escuela, circulan ya por las redes sociales. En ellas, numerosos civiles aparecen tratando de recuperar cadáveres. El portavoz del presidente palestino Mahmoud Abbas ha pedido a Estados Unidos que ponga fin “al apoyo ciego que sigue llevando al asesinato de miles de civiles inocentes, incluidos niños, mujeres y ancianos”, informa The Guardian.

A la condena de Abbas se suma la de los gobiernos de Egipto, Jordania, Arabia Saudí, Irak y Qatar. Todos ellos han emitido sus respectivos comunicados en los que rechazan el bombardeo de Israel sobre una escuela donde se albergaban civiles. El Ministerio de Exteriores de Jordania ha definido el ataque como “una violación flagrante de las normas del derecho internacional” y ha criticado la “ausencia de una posición internacional firme que frene la agresión israelí y lo obligue a respetar el derecho internacional”.

El Gobierno español también ha condenado el ataque contra la escuela Al Tabin. “Exigimos una vez más el cumplimiento íntegro de las medidas provisionales impuestas por la Corte Internacional de Justicia y la protección de la población civil”, ha declarado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado. El Ejecutivo ha reiterado tanto a Israel como a las milicias palestinas de Hamás “que es imprescindible un acuerdo de alto el fuego inmediato para acabar con esta catástrofe humanitaria y obtener la liberación de los rehenes”.

La relatora especial de Naciones Unidas para los territorios palestinos, Francesca Albanese, ha acusado a Israel de estar cometiendo un genocidio en Gaza “en cada barrio, cada campo de refugiados y caza zona declarada como segura”. Albanese ha añadido que el Ejército israelí está llevando estos ataques “con armas europeas y de Estados Unidos” y “ante la indiferencia de todas las naciones 'civilizadas'”.

El Ejército de Israel ha reconocido el ataque y ha asegurado sin mostrar pruebas que se trata de una operación “con precisión” dirigida por sus servicios de inteligencia contra “terroristas de Hamás que operaban dentro de un centro de comando y control integrado en la escuela Al Tabaín”.

El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel Nadav Shoshani ha asegurado en X que, en base a la información de la inteligencia israelí, en la escuela se refugiaban “aproximadamente 20 militantes de Hamás, incluidos algunos comandantes” y que operaban desde el centro para lanzar ataques.

“El centro de mando sirve como escondite para los terroristas y comandantes de Hamás, desde donde se planearon y avanzaron varios ataques contra las tropas” israelíes, indica otro comunicado castrense. El Ejército asegura también que se habían tomado medidas para reducir el riesgo de dañar a civiles, aunque no ha hecho comentarios sobre los informes de víctimas civiles procedentes de Gaza.

Tres misiles atravesaron la escuela y la mezquita que había en su interior, donde se refugiaban de la guerra unas 6.000 personas desplazadas, declaró Mahmoud Bassal, portavoz de los primeros intervinientes de Defensa Civil, que operan bajo el gobierno de Hamás.

A las cifras mortales de los ataques israelíes se suman también al menos 10.000 desaparecidos bajo los escombros y 1,9 millones de desplazados que sobreviven en una crisis humanitaria sin precedentes por la destrucción generalizada, el colapso de los hospitales, los brotes de epidemias, la amenaza de la hambruna y la escasez de agua potable, alimentos y medicinas.

Este viernes, al menos 14 civiles, entre ellos dos periodistas, murieron en Jan Yunis, una importante ciudad del sur de la Franja, adonde incursionaron nuevamente las tropas terrestres de Israel tras una evacuación parcial de los civiles.