Adriana Lastra: “Iglesias no quiere ir a una negociación; quiere ir a un chantaje”
Adriana Lastra (Ribadesella, 1979) fue una de las dirigentes que más peleó dentro del PSOE por sacar adelante una coalición con Unidas Podemos en el mes de julio, pero sostiene que Pablo Iglesias optó por impedir el acuerdo al final tras haber dado un paso atrás. Es su versión de aquel desencuentro y todavía destila un profundo enfado con el que sigue considerando el socio preferente de Pedro Sánchez, aunque solo para un acuerdo parlamentario. La número dos del PSOE asegura que Pablo Iglesias sometió a los socialistas a un “chantaje” durante las negociaciones de julio y advierte de que es lo que pretende ahora con su exigencia de formar parte del Gobierno.
Lastra, una de las personas de mayor confianza de Sánchez, que destaca su lealtad por encima de todo, da por hecho que los socialistas volverán a ganar las elecciones y explica cuál será la fórmula para intentar sacar adelante la investidura: una oferta de “cuatro grandes acuerdos” en materias de Estado a los grandes partidos y una negociación programática para la legislatura con Unidas Podemos. En la recta final de la campaña, antes de viajar a Cantabria, la portavoz parlamentaria del PSOE atiende por teléfono a eldiario.es:
El PSOE encaró la repetición electoral con el convencimiento de que los electores penalizarían a los que habían bloqueado. En las encuestas bajan. ¿Qué lectura hace?
Ahora mismo todos tenemos el mismo número de votos, cero, y estamos viendo que hay una campaña de la derecha, del PP que destapó eldiario.es, que intenta que la izquierda no vaya a votar, como pasó en Brasil, EEUU, Reino Unido o Andalucía. Lo que estamos haciendo es alentar a la participación y el voto al PSOE porque es el único que asegura que no haya bloqueo. Los demás partidos están por debilitar la posición del PSOE porque lo que pretenden es un Gobierno débil. Tienen un proyecto para tres días, hasta las elecciones, pero luego no tienen ninguno y el único partido que tiene proyecto, equipo y un candidato solvente y de Estado es el PSOE. Sobre las encuestas, las hay para todos los gustos: desde el CIS –que por cierto es el que acierta– hasta otras que más que fijar una intención de voto lo que pretenden es generar una tendencia. Estamos convencidos de que vamos a ser la primera fuerza política como lo fuimos en abril y mayo.
Las encuestas marcan tendencias y esa tendencia es de estancamiento para el PSOE. ¿Si no crecen, habrá algún tipo de autocrítica?
Somos la primera fuerza política de este país y lo vamos a seguir siendo. Vamos a ganar las elecciones con solvencia. Autocrítica tendrán que hacerla, en todo caso, los demás, que incluso con una reválida son incapaces de ganar las elecciones. Pero que nos pidan a nosotros autocrítica cuando somos la primera fuerza política de este país y es lo que dicen todas las encuestas, no tiene sentido.
La Junta Electoral ha archivado la denuncia sobre la campaña engañosa en Facebook citando jurisprudencia de 1982, ¿habría que actualizar ese organismo?
Hay que modernizar algunos criterios de la Junta Electoral. No puede ser lo que sucedió la semana pasada: en 40 años de democracia nunca se puso ningún problema ante un presidente del Gobierno que se presenta a las elecciones y concede una entrevista en Moncloa y, por primera vez, se le pone a Pedro Sánchez porque hubo un cambio de criterio. Los criterios tienen que ser claros y explicitarse. Estamos viendo cómo Vox está usando la bandera de España en el mailing o cómo se organizan campañas como la de Facebook y la Junta Electoral, no entiendo muy bien por qué, archiva la denuncia cuando sabemos quién está detrás de esta campaña. En todo caso, los criterios tienen que modernizarse y hay nuevas realidades, como estas campañitas en redes sociales, que entiendo que a la Junta Electoral le genere algún conflicto, pero tenemos que hablar también de eso.
Sánchez ha enfriado las posibilidades de una coalición con Unidas Podemos. ¿Cómo pretenden sacar adelante la investidura?
Queremos llegar a cuatro grandes acuerdos con las fuerzas políticas y queremos un acuerdo programático con la izquierda. Lo que no es posible es que Pablo Iglesias se presente a unas elecciones en las que yo no le escucho criticar a la derecha pero sí al PSOE. Él no quiere ir a una negociación, él quiere ir a un chantaje, como vivimos en julio: o me das esto o no hay Gobierno. No renunciamos a un acuerdo con la otra izquierda de este país, pero un acuerdo programático sobre un Gobierno posible. Estamos viendo cómo los Anticapitalistas de Podemos están pidiendo el voto para la CUP, cómo [Jaume] Asens [su candidato en Catalunya] dice que hay que sacar a los políticos presos de la cárcel, cómo se cuestiona el funcionamiento de nuestra propia democracia por parte de Unidas Podemos, cómo nuestra discrepancia es total en asuntos como la unidad territorial de España...
El 'no' a la coalición se mantiene vigente, como ocurrió en septiembre. Pero una de las cosas que dice Sánchez es que Iglesias propone una coalición que depende inevitablemente de los independentistas. Si no fuera necesario, ¿se podría dar la coalición?
No sé con qué se presenta Pablo Iglesias a las elecciones, pero sí sé con lo que nos presentamos nosotros: un programa socialdemócrata y diciéndole a la gente que queremos un Gobierno unido, coherente, sólido, estable y progresista. Lo que estamos diciendo es acuerdo programático con la izquierda.
¿Y si Pablo Iglesias se mantiene en que o coalición o nada?
También estamos planteando a todas las fuerzas políticas un acuerdo para impedir el bloqueo: la modificación de nuestra investidura para que se no se pueda bloquear. No quiero pensar que Pablo Iglesias votara otra vez contra la conformación de un Gobierno.
Cuando habla de la modificación de la investidura, ¿se refiere a modificar el artículo 99 de la Constitución antes de que hubiera terceras elecciones?
Hablamos de que haya un gran acuerdo para impedir el bloqueo de nuestras instituciones. Se puede hacer de varias formas. En todo caso, queremos que cuanto antes haya un Gobierno, es decir, 48 horas después de las elecciones, lo que queremos es hablar con el resto de formaciones para empezar a trabajar en ese desbloqueo y en esos cuatro grandes acuerdos que ha propuesto el presidente, queremos hablar con el resto de la izquierda sobre ese apoyo programático y que a partir del 3 de diciembre que se constituyen las Cortes, el Congreso empiece a trabajar para que en enero se trabaje ya en los Presupuestos Generales del Estado.
En ese plan antibloqueo, ¿qué se le va a ofrecer a cada uno de los partidos?
Cuatro grandes asuntos de Estado en los que necesitamos que haya acuerdo: recuperar la centralidad del Pacto de Toledo dándole sostenibilidad, futuro y dignidad al sistema de pensiones; un nuevo de modelo de financiación autonómica; un compromiso de defensa de la Constitución y la unidad territorial de España; y la investidura. Y, en el caso de la izquierda, sentarnos para intentar alcanzar un acuerdo programático, cosa que fue imposible en los últimos meses porque siempre que nos dijeron que no íbamos a tener ningún problema en intentar llegar a un acuerdo programático. Bueno, pues intentemos llegar a ese acuerdo programático con Unidas Podemos.
En el caso de que se desbloquee la situación porque el PP se abstenga, ¿cómo se garantizaría luego que salgan adelante los presupuestos? ¿Para los presupuestos sí que se puede apoyar el PSOE en los independentistas?
Estamos presentándonos a unas elecciones en las que precisamente lo que queremos es una mayoría fuerte y consolidada para no depender de los independentistas, para no depender, casi si me lo permite, más que de nosotros mismos y de la izquierda del país. Esa es nuestra hoja de ruta y hay que llevarla el 10 de noviembre a las urnas y luego vendrá una investidura. ¿Quién dice que la derecha y los independentistas no se van a volver a poner de acuerdo para volver a tumbarlos? De todo esto queremos hablar con todas las fuerzas.
La noche electoral, simpatizantes socialistas fueron a la puerta de Ferraz y clamaron “Sí se puede” cuando apareció en la pantallla Iglesias. ¿Entiende que haya votantes suyos que estén enfadados por que no ha habido entendimiento?
Creo que están muy enfadados con Pablo Iglesias por las exigencias y el chantaje al que sometió a este partido y esto es lo que estamos viendo en los actos del PSOE y en las reuniones con colectivos. Pablo Iglesias impidió la conformación de un Gobierno en este país y esa es la realidad porque no fue a una negociación real: o él estaba en el Gobierno o no había Gobierno en España, esa fue la realidad. Nosotros sí que le ofrecimos un Gobierno de coalición que él rechazó y que no quiso con cosas como la vivienda, toda la política de igualdad, toda la política de sanidad y las políticas sociales... y las llamó la caseta del perro.
Lo que hay es mucho enfado con Pablo Iglesias por esa especie de soberbia con la que habla del PSOE y de los militantes del PSOE. Pablo Iglesias con quien ha tenido un problema es con todo su entorno. Es una persona muy complicada y antes de hablar en nombre de los militantes del PSOE que intente hacerlo en nombre de los militantes o simpatizantes de Podemos, que muchos se le han ido como Iñigo Errejón. Le pido respeto para la organización, los militantes y simpatizantes del PSOE. No vamos a permitir que nos den lecciones a nosotros y a nuestra militancia porque quien siempre que puede vota con la derecha es el señor Pablo Iglesias, no este partido.
¿Ve factible que, en el caso de que Iglesias rechace el acuerdo si no está en el Gobierno, alcanzar un acuerdo programático de mínimos con Ciudadanos que allane la abstención del PP?
Ya tenemos nuestra hoja de ruta de aquí al domingo que es movilizar a todo el mundo para que vaya a votar. Somos los únicos que garantizamos el desbloqueo y parar a la ultraderecha. Y después de ver el resultado electoral y si los españoles nos dan la confianza mayoritaria, lo que vamos a hacer es hablar con todos y sobre todo con la izquierda. Y lo que no quiero pensar es que Iglesias bloquee otra vez la conformación de un Gobierno porque sería un irresponsable con su organización política y con el país. Esperamos llegar a un acuerdo con Unidas Podemos en lo que es la coherencia ideológica del Gobierno y con el resto de partidos en los asuntos de Estado como, por otra parte, hemos hecho siempre. Me pregunta por Ciudadanos cuando antes me preguntaba por las encuestas y lo que estamos viendo es que va a quedar como algo residual en el Congreso.
Sobre la propuesta de que gobierne la lista más votada. En el caso de que las tres derechas sumaran más que las izquierdas, ¿deberían dejar gobernar a Casado que sería quien más apoyo parlamentario tendría?
La respuesta del presidente ha sido muy clara: que gobierne la lista más votada. Estoy convencida de que la izquierda en este país va a tener más votos que la derecha. Podemos hablar de ciencia ficción, pero no me parece realista.
¿Por qué la lista más votada y no quien más apoyo parlamentario aglutine?
Bueno, el presidente no ha explicitado si la lista más votada en el resultado de las elecciones o la lista más votada en el Congreso de los Diputados. Ese es el modelo que hay en algunas comunidades como Asturias o Euskadi. De lo que se trata es de acabar con el bloqueo y para eso hay diferentes fórmulas de las que tenemos que hablar con el resto de fuerzas políticas, por supuesto.
¿Por qué han endurecido el tono contra el independentismo en las últimas semanas? Sánchez anunció la incorporación del delito por convocar un referéndum, denunció sectarismo en TV3...
No es nada distinto a lo que hemos hecho. Siempre hemos denunciado el sectarismo en TV3 y siempre hemos denunciado lo que el independentismo estaba haciendo. Apoyamos al Gobierno en la aplicación del 155, que era muy duro pero había que hacerlo. Y ahora estamos viendo al señor Torra decir en sede parlamentaria que en 2020 van a volver a convocar un referéndum ilegal. El Estado, en este caso el Gobierno y el PSOE, no nos vamos a quedar parados mientras vemos que hay algunos que cada vez son más minoritarios, pero intentan vulnerar los derechos de los catalanes y nuestra Constitución. El PSOE responde, como hemos hecho siempre.
Pedro Sánchez dio a entender que había dado instrucciones a la Fiscalía para reactivar la euroorden. ¿Se equivocó?
El presidente lo único que dijo es lo que establece la ley. El Estatuto orgánico del Ministerio Fiscal permite al Gobierno interesar a la Fiscalía General del Estado que promueva las actuaciones pertinentes en defensa del interés público. A lo que se compromete el Ejecutivo es a ayudar a la Fiscalía y al Poder Judicial. Lo importante es que todos somos iguales ante la ley, que Puigdemont es un huido de la justicia, que la decisión de emitir la euroorden es de la Justicia y que el Gobierno tiene el deber de colaborar en este propósito.
Nadia Calviño será la vicepresidenta económica del Gobierno del PSOE pero mostró reticencias a derogar la reforma laboral que Pedro Sánchez, algo que el candidato socialista dio por hecho en el debate. ¿Cuál será la posición del futuro Gobierno?
Se va a derogar la reformal laboral y se va a hacer un nuevo Estatuto de los Trabajadores, se va a recuperar la ultraactividad de los convenios, se va a recuperar la prevalencia del convenio del sector sobre el de empresa y todo esto se va a hacer de la mano de los agentes sociales. En los últimos meses hemos demostrado que hay concordancia en la posición del Gobierno y los sindicatos en lo que tiene que ver con la derogación de la reforma laboral. Ahí no hay debate.
¿A qué atribuye el ascenso de Vox que pronostican las encuestas? Coincide con la exhumación de Franco. ¿Ha despertado a los franquistas que quedan en España?
Creo que el fascismo era una realidad en muchos países de la UE y es un fenómeno que ya ha llegado a España. ¿Por qué hay un auge del fascismo? Porque hay dos fuerzas políticas, PP y Ciudadanos, que pactan con ellos mientras en el resto de la UE se les hace un cordón sanitario porque promulgan el discurso del odio,. En España, PP y Ciudadanos pactan con esa ultraderecha y eso lo que hace es radicalizar el discurso de odio. Y, por cierto, Vox es una escisión del PP, cuando surge Vox lo hace con el PP en el Gobierno. Y el auge de estos últimos meses tiene más que ver con la normalización que PP y Ciudadanos hacen que con la exhumación de Franco.
La incorporación de los delitos de exaltación y apología del franquismo al Código Penal que llevan en el programa, ¿va a por Vox? Usted los llamó fascistas el otro día. ¿Cree que los posicionamientos de Vox se perseguirían con esas nuevas tipificaciones?
Somos una fuerza política que defiende la convivencia en nuestro país y que defiende la Constitución, que es generosa, que reconoce la pluralidad y la diversidad de nuestro país y que es una Constitución que consagra la convivencia. Lo que estamos viendo es a unas fuerzas políticas, no solamente Vox, que llevan el discurso de odio. De lo que se trata es de perseguir ese discurso, de no permitir que haya apología del fascismo. Eso no se permitiría en Alemania y en otras partes del mundo que hubiera apología del fascismo o del nazismo. Eso también es regeneración democrática.
¿Se podría llegar a inhabilitar a un partido como Vox?
Tenemos que evitar esos discursos que vienen a dividir y a romper. Lo que espero es que las fuerzas políticas lo que hagan sea asumir la Constitución y evitar que haya exaltaciones del franquismo, que es lo que estamos proponiendo.
¿Qué está fallando para que en estos 10 meses hayan sido asesinadas más mujeres que en todo 2018 por violencia machista?
La Ley contra la Violencia de Género funciona. Ocho de cada diez víctimas de violencia salen de la violencia de género. Somos un país en el que a diario se ponen más de 400 denuncias por violencia de género, es decir, que hemos conseguido varios de los objetivos de la ley: lo primero, que la violencia de género es un problema de Estado, que no es algo que pasa en casa, que no es algo del ámbito privado. Segundo, hemos conseguido que las mujeres denuncien, aunque aún quedan muchas que no lo hacen. Tercero, una amplia mayoría de las mujeres consiguen salir de la violencia y rehacer su vida y, por lo tanto, la Ley de Violencia de Género funciona. Cuando se implementó la ley había en este país del orden de setenta y muchos asesinatos por violencia de género. Este año tenemos 51 y aunque hubiera una asesinada por violencia de género seguiría siendo un problema de primer orden en este país.
Ahora lo que tenemos que seguir implementando es el pacto contra la violencia de género, dotarlo de presupuesto, como ya está haciendo el Gobierno, y también hacer las reformas legislativas comprometidas en este pacto. Tenemos que mejorar la asistencia a las víctimas de violencia y a sus hijos e hijas, y es un proceso conjunto de todas las administraciones públicas, ayuntamientos, comunidades autónomas y Gobierno central. Por eso también es muy peligroso cuando en algunas comunidades autónomas o ayuntamientos se intenta revertir el pacto contra la violencia de género y se intenta, por ejemplo, quitar las partidas presupuestarias a la lucha contra la violencia de género, a lo que tiene que ver con los pisos tutelados y la protección de las mujeres que es lo que está sucediendo en algunas comunidades autónomas y ayuntamientos donde gobierna la ultraderecha con la derecha.
Entiendo que seguirá al frente del Grupo Parlamentario Socialista, ¿qué es lo primero que llevarán al Congreso? ¿La ley de eutanasia?
Ya lo hicimos en esta legislatura frustrada. Creo que llegamos ya tarde para muchos compatriotas que lo único que querían era morir tan dignamente como habían vivido. Para mí es un compromiso fundamental llevarlo adelante. Así que, sí, será la ley de eutanasia.