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Bolaños avisa de que la reforma laboral “no es de nadie” y pide “altura de miras” para que se apruebe

Irene Castro

20 de enero de 2022 11:12 h

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“La reforma laboral no es un proyecto de nadie, ni siquiera de ningún partido, de ninguna formación”. Aviso a navegantes de Félix Bolaños, el hombre fuerte de Pedro Sánchez en el Consejo de Ministros, ante el protagonismo de Yolanda Díaz en un momento en el que la convalidación del decreto ley parece estar en punto muerto con los aliados habituales del Gobierno. La negativa del PSOE a retocar cuestiones que puedan poner en riesgo el aval de la patronal aboca a la vía Ciudadanos que rechaza Unidas Podemos. La prioridad del ala socialista es que la reforma laboral salga intacta mientras que la vicepresidenta y ministra de Trabajo busca un atraer a ERC y PNV con posibles cambios a futuro. Ahí está el principal choque y el ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática ha dejado claro que antepone el mantenimiento del acuerdo con los agentes sociales, aunque la reforma laboral salga con la derecha, a los socios de la investidura en contra del parecer del socio minoritario de la coalición, representado en el foro en el que se ha pronunciado por la líder de Podemos, Ione Belarra.

“Hay fuerzas que de manera más habitual y más frecuente consiguen acuerdos con el Gobierno y para nosotros esas fuerzas políticas que demuestran que son capaces de dialogar, de pactar, que son capaces de llegar a acuerdos con nosotros para que salgan adelante las iniciativas son fuerzas prioritarias en nuestro diálogo; pero en este caso, en el caso de la reforma laboral, insisto es una reforma de Estado, de país, que es buena para nuestro país. No tiene sentido que demos la espalda a sindicatos y empresarios que han estado a la altura. Todas las fuerzas especialmente principal partido de la oposición tendría que estar a la altura”, ha dicho en referencia al PP. 

“La reforma laboral no es un proyecto de nadie ni siquiera de ningún partido de ninguna formación [ha reiterado en una alusión velada a la vicepresidenta primera]. Es un proyecto del Gobierno en su conjunto y debiera serlo de la mayoría de fuerzas en el Congreso”. “Nace de un acuerdo de los protagonistas, trabajadores y empresarios”, insistido el dirigente socialista que ha reiterado que quieren preservar el acuerdo precisamente para mantener las relaciones laborales en el futuro en el marco del diálogo social. “En la negociación unas partes han cedido en unas cuestiones y otras en otras. Estamos haciendo algo bueno para empresarios y trabajadores”, ha dicho Bolaños, para quien esos “equilibrios” en el diálogo social no se pueden tensar más reabriendo la negociación para la tramitación del decreto ley.

“Estamos virando a todos”, ha admitido a su salida del desayuno informativo que ha protagonizado en el Nueva Economía Forum ante la vía de sacar la reforma laboral adelante gracias a Inés Arrimadas y no con los socios de la investidura, que es la jugada que prioriza Unidas Podemos. “Sindicatos y empresarios han estado a la altura, ahora toca a las fuerzas políticas estar a la altura. Por eso pido que se sumen a un buen acuerdo. Porque todos ganan se ha pactado”, había advertido en su discurso.

“Quien esté en contra de esta reforma laboral es quien pretenda imponer su voluntad a la del resto”, ha señalado en referencia a grupos como EH Bildu o ERC que han anunciado su rechazo al texto y exigen más ambición en asuntos como el despido, los salarios en tramitación o la prevalencia de los convenios autonómicos sobre los estatales. Fuentes del ala socialista del Gobierno ven factible que Ciudadanos vote que sí y mantienen que intentarán atraer al PNV -este jueves el secretario de Organización, Santos Cerdán, y el portavoz parlamentario, Héctor Gómez, almuerzan con la cúpula nacionalista- y ven cierto margen en ERC, del que esperan “sentido de la responsabilidad”, mientras que esta vez ven más complicado conseguir el apoyo de EH Bildu.

Bolaños ha insistido en que el PP debería cumplir con la petición de la patronal y secundar el nuevo marco laboral así como pactar con el Gobierno el cambio del artículo 49 de la Constitución para eliminar el “hiriente” término de “disminuidos” en referencia a las personas con discapacidad o la renovación del Poder Judicial. “El bloqueo les desacredita como una opción madura, creíbe de alternancia en el poder”, ha dicho el ministro socialista, que previamente se había mostrado partidario de esa alternancia en los gobiernos.

“Es difícil que la sociedad pueda entender algunas actitudes que ni siquiera puede explicar el PP. ¿Cómo se puede explicar que no apoye una reforma laboral pactada por sindicatos y empresarios que el propio presidente de la patronal ha pedido que apoye?”, se ha preguntado. “Es muy legítimo interpretar la realidad con una visión conservadora o liberal pero hacer política sin reconocer la legitimidad del adversario es inaceptable al igual que es inaceptable usar falsedades”, ha recriminado Bolaños, que ha reclamado al PP que haga oposición “con altura, rigor, sentido del humor o ironía” pero “sin faltar al respeto y faltar a la verdad”.

Bolaños ha cuestionado especialmente la actitud del PP con los fondos europeos ante su ofensiva judicial y en Bruselas contra el reparto. “Nos preocupa que se intente sembrar dudas”, ha reconocido el ministro, que ha asegurado que hacerlo sobre el Gobierno es hacerlo también sobre la Comisión Europea. “Le pido al principal partido de la oposición patriotismo. En Europa nadie entiende lo que está haciendo el PP con los fondos y este interés en boicotearlos. En Europa están haciendo el ridículo”, ha zanjado.