Casado rechaza regular la eutanasia y dice que es un debate que interesa a la izquierda
El presidente del PP, Pablo Casado, ha insistido este sábado en que su partido no impulsará desde el Gobierno ni apoyará desde la oposición una legislación que regule la eutanasia. Además, ha criticado que se hable de ello en campaña y, como en el caso del aborto, ha dicho que es un asunto del que interesa hablar a la izquierda.
En una entrevista en La Sexta Noche Casado se ha pronunciado por primera vez sobre el caso de Ángel Hernández, detenido por suministar a su mujer una sustancia para ayudarla a morir. Ella, enferma de esclerosis múltiple desde 1989, había expresado su deseo de que le ayudaran a morir en varios medios durante los últimos meses y esperaba la promulgación de una ley sobre eutanasia que decayó con la disolución de las cortes.
Casado ha calificado el caso como “algo terrible” para luego presumir de que su partido fue “pionero” en la aprobación de la muerte digna y el testimonio vital. Esas normas no regulan la eutanasia, solo contemplan la posibilidad de rechazar que la vida se alargue mediante fármacos cuando el enfermo ya está en fase terminal.
“No voy a hablar de una circunstancia en concreto”, ha dicho el líder del PP ante la insistencia de las preguntas sobre este caso. Casado ha criticado que Pedro Sánchez quiera convertir la eutanasia “en el eje de su campaña porque se le está yendo la mano con Torra y Otegi”.
“Una cosa es hablar de un caso particular en campaña y otra una legislación en la que ni siquiera los expertos están de acuerdo”, ha dicho el líder del PP, que ha criticado que haya partidos que pidan impulsar una norma “en 20 días” sin tratar con expertos. La propuesta sobre la eutanasia se comenzó a debatir en el Congreso en el 2017 pero tanto PP como Ciudadanos bloquearon su tramitación hasta que, con la convocatoria de elecciones, la norma ha decaído.
Casado ha desligado sus creencias personales de la posición que mantiene en este asunto -“Nosotros no hacemos religión en política”- y ha insistido en varias ocasiones en criticar que sus oponentes quieran hablar de este asunto en campaña: “No voy a permitir que la izquierda me recete de lo que tengo que hablar”.
“Es dramático, y como es dramático saquemos de la agenda electoral y de la campaña circunstancias que son dramáticas, es como sin vengo con un caso de violencia de género y pongo el testimonio para que mi adversario opine”, ha añadido Casado.
Un rescate a los ahorradores, no a los bancos
En la entrevista, Casado ha repetido algunos de los mensajes de las últimas semanas: ha criticado el “adoctrinamiento” en las escuelas Catalanas, ha presumido de los datos económicos durante el Gobierno del PP y ha vuelto a tender la mano a Ciudadanos. Además, en respuesta a las preguntas ha defendido el rescate bancario que supuso un desembolso de 60.000 millones de euros de dinero público para los bancos que no se ha recuperado.
El candidato del PP ha afirmado que “no fue un recate a los bancos, fue un rescate a los ahorradores” y ha confiado en que quizá, en el futuro, pueda recuperarse la totalidad del montante de dinero público gastado en ese rescate porque “el Estado aún tiene un porcentaje de esa banca”. “Se podrá recuperar, dependerá de la bolsa y de cuándo se pueda vender”, ha añadido.
Ha pasado de puntillas por las revelaciones sobre la policía política y la investigación abierta en la Audiencia Nacional. Ha dicho que él, cuando era jefe de Gabinete de Manuel Pizarro, cogió “a varios agentes del CNI y de la policía de Rubalcaba espiando”, y ha esquivado todas las preguntas sobre este asunto. “Cuando haya condenas en firme, hablaremos”, ha concluido.
Casado ha vuelto a cargar contra los decretos del Gobierno aprobados en la Diputación Permanente: “No había visto un uso tan electoralista de las instituciones desde Zapatero con el Plan E”. Ha prometido que si es elegido presidente del Gobierno impulsará una regulación de este instrumento legislativo durante el periodo en el que las cortes están disueltas, aunque no ha aportado más detalles.
Ha insistido en que el Ejecutivo del PSOE ha sacado esas normas gracias al apoyo de Bildu y ha dicho que “todas las cabezas de esa hidra que es el entorno batasuno proetarra” se felicitan de lo ocurrido porque “nunca habían conseguido tanto”.
