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“La herida de la izquierda no es lo más preocupante para el PSOE”

Ignacio Urquizu, número uno de la lista del PSOE en Teruel \ Foto: Alejandro Navarro Bustamante

Irene Castro

Ignacio Urquizu (Teruel, 1978) es el número uno del PSOE por Teruel y uno de los elegidos de Pedro Sánchez para el Comité de Estrategia que analiza la campaña electoral. Es un sociólogo y profesor universitario que aspira a representar en el Congreso a una de las provincias más rurales. Reconoce precisamente que el PSOE tiene un problema en el polo opuesto, las grandes ciudades, y recrimina a Podemos y Ciudadanos su escasez de propuestas para los pequeños municipios. Se muestra convencido de que los socialistas están en un empate técnico con el PP y que podrán aventajarle según avancen las tres semanas que quedan hasta las generales. 

¿Qué les dice en Ferraz cuando le preguntan por la validez de las encuestas que se están publicando?

Confío en los institutos de opinión, yo colaboro con uno, y creo que son totalmente válidas. Los datos brutos son iguales para todos: una situación de mucha igualdad entre PP y PSOE; Ciudadanos se está acercando mucho, y Podemos está más descolgado. Luego está la interpretación, que significa que hay dos tipos de personas: gente que oculta el voto y hay que buscarlos y otra que se sube al caballo ganador. Cada sociólogo tiene su tipo de interpretación y yo tengo la mía, que no siempre coincide con la de los institutos de opinión.

¿Y cuál es su interpretación?

Hay una gran igualdad entre PP y PSOE, con una diferencia mínima, por lo que la campaña y los debates van a ser determinantes. En los datos que yo he visto Ciudadanos nunca ha dejado de ser tercera fuerza y nunca ha superado el 18%. Podemos se descolgó ya en las autonómicas a la cuarta posición. Está en una situación de mejorar lo que fue la mejor IU de 1996 (podría superar ligeramente un 11%). Si pensamos que la gente de Podemos no oculta el voto y no se sube a caballo ganador, creo que es razonable pensar que está en ese escenario. 

Los datos brutos indican que el PP sigue siendo la primera fuerza. ¿A qué lo atribuye?

Hay muchos factores. Venimos de un PP con el 44% de los votos y, aunque perdiera 15 o 16 puntos, que es lo que puede perder, tiene un resultado en torno al 27%. El PSOE viene del 28% en un escenario en el que no teníamos competidores, ahora tenemos a Podemos y a Ciudadanos. Hay elementos añadidos: la corrupción no se castiga tanto como a muchos nos gustaría. Además, la interpretación de la economía es lo que determina el voto y hay gente que puede estar a favor de la política económica del Gobierno.

Todo ello puede explicar una cierta ventaja del PP pero la campaña lo va a determinar y el PSOE tiene oportunidad de ganar porque la diferencia es muy pequeña. El candidato es muy importante porque los indecisos están muy pendientes de ellos y Pedro Sánchez está mucho mejor valorado que Mariano Rajoy por lo que puede mover más voto. 

Dice que la campaña va a ser determinante. ¿Cómo la están orientando para intentar rascar esos votos?

Yo puedo decir cómo lo estoy haciendo en mi circunscripción. Estoy haciendo mucha calle, es una provincia muy pequeña, muy rural. La campaña que he planteado es visitar muchísimos pueblos, muchísimos colectivos y mucha gente y explicar las cosas. Estoy viendo que cuando te acercas a la gente, te quiere escuchar. Se ha producido una repolitización en la sociedad porque el interés por la política ha aumentado. En mi caso se escapan los medios de comunicación más allá de los regionales pero también van a ser determinantes en el voto de los indecisos. 

¿Es en esas circunscripciones pequeñas donde tienen más posibilidades de tener un buen resultado que se traduzca en más escaños?

Sí. Los partidos tradicionales tenemos estructuras que no tienen los nuevos. Al final son muchos factores los que determinan el voto y uno de ellos es conocer a gente próxima a un partido. Y ahí tenemos una ventaja competitiva frente a los nuevos, que son más urbanos. Les veo hablar de grandes cuestiones, lo que no sé muy bien es qué piensan sobre pequeños municipios. Solo se ha pronunciado Ciudadanos que quiere eliminarlos, es decir, que su única propuesta es que el mundo rural no exista. Más allá de eso no hemos visto un debate en profundidad hacia esa parte de España que vive en los pueblos más pequeños y que tiene problemas tan importantes como las grandes ciudades de igualdad de oportunidades, de prestación de servicios, de infraestructuras...

Ahora que hay mayor interés por la política, ¿cree que va a haber una mayor participación el 20D que en 2011?

Va a ser muy similar y como mucho uno o dos puntos por encima.

¿A quién puede perjudicar o beneficiar que, pese a haber más partidos, se vaya a mantener igual la participación?

La respuesta está en las autonómicas en las que se mantuvo prácticamente el nivel de participación pero el resultado fue distinto al de hace cuatro años porque seguramente hubo gente progresista que se movilizó y hubo gente más conservadora que se quedó en casa. Lo que se produjo es una transferencia de la participación o la abstención hacia la izquierda frente a la desmovilización de la derecha. Dentro de unas semanas, una participación similar puede dibujar una España totalmente distinta porque probablemente se repitan ese tipo de transferencias. Habrá más movilización en la izquierda, menos en la derecha y una parte del voto conservador se irá al PSOE o a Ciudadanos. 

Pero en las elecciones municipales y autonómicas el PP fue la fuerza más votada...

Sí, pero a años luz de lo que había conseguido en sitios como Madrid o Valencia donde cayó 20 puntos. 

Pese a bajar mucho,  ¿asume que va a ser la primera fuerza?

No, en absoluto. Todavía no hay nada dicho. He visto encuestas, no solo la del CIS, donde el PSOE es el primero en intención directa de voto y se interpreta que será el PP porque se presupone que tiene más voto oculto. ¿Y si no tiene tanto? Son interpretaciones que quedan en el aire y los sociólogos nos la jugamos hasta el día de las elecciones. Mi idea es que la gente del PP lo oculta menos que hace años. Se ve en encuestas donde se ha cocinado poco la intención directa de voto y han acertado bastante. Si se presupone que el PP no tiene tanto voto oculto, hay muchísimo partido por jugar. 

¿Cree que Rajoy ha elegido el 20D para desmovilizar?

Eso debería responderlo él porque no entiendo por qué ha elegido el 20D. Creo que no lo ha hecho por razones electorales sino por la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. Ha tenido cuatro años de legislatura y ha hecho cinco presupuestos. Es algo histórico porque ha dejado bastante atado al Gobierno que se forme a partir del año que viene. La única razón electoralista que puede existir es que el pensaba que la recuperación económica se acabara percibiendo cuanto más tiempo pasara, pero no es del todo cierta y no está llegando a la gente porque hay precariedad, salarios bajos y no se ve que los servicios públicos se estén recuperando. 

Más allá de las nuevas fuerzas, ¿por qué no ha conseguido ser fuerte en las grandes ciudades?

Es algo que viene de muy atrás, desde hace 20 años. Tiene que ver, simplificando mucho, con un fenómeno particular: el PSOE es el partido que creó las clases medias en los 80. La clase media son los trabajadores que no necesitan destinar parte de su salario a los servicios básicos de forma que se ahorra ese dinero y su bienestar aumenta. Esa clase media empieza a expandirse por los grandes núcleos y acaba en muchos aspectos votando al PP. Qué ha fallado es una muy buena pregunta y hay que reflexionar pero no en cuatro semanas, sino es una cuestión más de largo o medio plazo. Una cosa particular de las clases medias es que valoran más el tiempo de ocio que el trabajo. Entonces a lo mejor está más sensibilizada con cuestiones más allá de lo laboral que es el discurso tradicional de la izquierda. Los cambios sociales relativos a la clase media son los que habría que incorporar al proyecto del PSOE.

El discurso ya se ha modulado hacia el centro. ¿Tiene que ver con este nuevo modelo de sociedad?

Los partidos siempre compiten por el centro porque es donde más gente hay, más indecisos, más abstención y son más promiscuos en el sentido de que cambian más de voto. 

¿Puede perjudicarles que la izquierda vea al PSOE demasiado en el centro?

No. Podemos tiene un nivel de apoyo como el que tuvo IU. Ahora mismo la herida de la izquierda no es lo más preocupante para el PSOE bajo mi punto de vista. Las elecciones siempre se ganan en el centro. Es una estrategia que hacemos todos: Podemos dice que quiere ganar la batalla de la centralidad en el tablero político; Ciudadanos dice que es un partido de centro; el PP aspira a representarlo... No es solo una cosa del PSOE. 

¿Qué va a pasar después del 20D si el PSOE no tiene números para formar Gobierno o si las fuerzas que podrían facilitarlo no lo hacen?

Ni idea. Todos trabajamos para el 20D y conseguir que Pedro Sánchez sea presidente. Esta dirección solo ha tenido un año y medio para trabajar o sea que es injusto juzgarles por año y medio en unas elecciones. Lo que vamos a necesitar, si el resultado no fuera favorable, es mucha paciencia, mucha tranquilidad y mucha reflexión. Pero ese escenario no lo contemplo.

¿No daría por amortizado a Pedro Sánchez?

No. Ha tenido año y medio. Es una persona que está demostrando que tiene muchas ganas de estar en política y aportar cosas por lo que no veo ningún motivo para cuestionarle. Pero es un escenario sobre el que nadie está trabajando.

¿El ruido interno que ha habido durante todo este año ha podido influir en que el PSOE no haya conseguido despegar?

La gente penaliza a los partidos divididos. Todo el ruido que se puede generar tiene consecuencias electorales. No sé si ha podido influir en que el PSOE no tenga ahora el 40% de los votos pero desde luego toda imagen de división es penalizable electoralmente.

Dice que los debates van a ser clave. ¿Por qué?

Pueden llegar a mover entre dos o tres puntos y si hablamos de un empate técnico, si conseguimos mostrar a nuestro candidato como el más preparado para estar en la Moncloa así como su partido, y creo que lo vamos a conseguir, esos dos o tres puntos pueden ser decisivos para colocarnos en la primera posición. 

La negativa de Pedro Sánchez de ir a un debate en la Universidad Carlos III o de rechazar una entrevista en El Objetivo de Ana Pastor le puede debilitar?

No creo. No conozco el caso de la universidad. En el caso de Ana Pastor, hay periodistas que le replicaron diciendo que no era la única que tenía problemas para conseguir entrevistas con los políticos. Yo, que soy un humilde candidato por Teruel, te aseguro que tengo problemas de agenda para ver a mis hijos, no puedo hacer casi nada porque lo tengo todo copado. Así que imagínate cómo es la vida de Pedro Sánchez como candidato a la Moncloa. Los tiempos son los que son y él está muy expuesto a la opinión pública, es el primero que va a los programas cuando antes parecía raro ir. 

Pero ha ido al programa de Bertín Osborne y ha dicho no a Ana Pastor. 

A La Sexta ha ido bastantes veces. El formato de Osborne es otro que puede ser interesante para la gente porque puede dar una imagen distinta a la que estamos acostumbrados. Humanizar a los políticos puede ser positivo.

¿Cree que puede perjudicar a Pedro Sánchez ser el único candidato de un partido que ha estado en el Gobierno que debata con Pablo Iglesias y Albert Rivera?

Si Podemos y Ciudadanos deciden convertir ese debate en un duelo contra el PSOE, se equivocarán porque estas elecciones no van del PSOE, van del PP. Lo que se está decidiendo el 20D es si queremos que Rajoy siga siendo presidente o no. Eso es lo que realmente quieren saber los españoles. Anteponer los intereses electorales darán una imagen muy negativa de la política a sus votantes. De lo que tenemos que estar hablando es de las propuestas para este país. Si fuera ellos me centraría en las propuestas, sobre todo en el caso de Podemos. 

¿Se siente más próximo a las medidas de Ciudadanos?

No. Con Ciudadanos puedo debatir de cosas en las que muchas no estoy de acuerdo, como el contrato único o no me gusta el término copago. Podemos presenta grandes objetivos, grandes frases y declaraciones altisonantes pero no acaba de concretar cómo hacer eso. Dicen: “Queremos acabar con el paro”. Yo también, pero cuéntame cómo. ¿Nacionalizando empresas vas a acabar con el paro? ¿Eso dónde está demostrado que se pueda conseguir así? No consiguen pasar de los objetivos de las propuestas. Y cuando proponen algo muchas veces acaba siendo como la renta esta básica de 600 euros que cuando uno la contabiliza descubre que es imposible de aplicar. Las propuestas que tienen son muy pocas y de poca calidad y creo que se han tomado poco en serio esto de la política.

Tienen una gran estrategia de comunicación, manejan muy bien los marcos, los conceptos y la opinión pública pero no tienen contenido político. También por una dificultad: si militas en IU, asesoras a IU, al final ¿qué eres? IU. Las propuestas de IU al final son para un pequeño trozo de la sociedad, nunca ha sido un partido con vocación de mayorías. Podemos nace de ahí y ahora de repente nos quiere decir que se han convertido en socialdemócratas pero es que para ser socialdemócratas hay que tener propuestas socialdemócratas y eso es otra liga. 

Aragón es uno de los sitios donde Podemos tiene más fuerza. ¿A qué lo atribuye?

Al liderazgo de Pablo Echenique a nivel nacional. En segundo lugar, Aragón es una tierra muy particular, en el libro Aragón es nuestro Ohio decimos que es una España en miniatura porque hay una ciudad muy grande, Zaragoza, y un mundo rural amplio. La mitad de la población aragonesa está en Zaragoza y, si decimos que Podemos es un fenómeno urbano, eso explica por qué tiene tanta fuerza en términos porcentuales. 

Como candidato por Aragón, ¿le preocupa el fichaje de Julio Rodríguez, el exjefe del Estado Mayor de la Defensa? ¿Su llegada puede quitarle un escaño al PSOE? 

No creo. Tenemos el voto bastante asentado y no creo que nos pueda perjudicar. El fichaje de Julio Rodríguez no tiene que ver con Zaragoza, tiene más que ver con la política nacional. Él no tiene nada que ver prácticamente con Zaragoza. Es un fichaje con una gran estrategia de comunicación vinculada la política nacional. 

¿No puede buscar contentar a una parte de la sociedad de Zaragoza?

¿A qué parte? ¿A los militares?

Sí. Es un porcentaje...

¿Crees que los militares de Zaragoza van a votar a Podemos por Julio Rodríguez? Tengo todas mis dudas. El mundo militar no se puede generalizar y no tengo datos. En mi vida he visto una encuesta de militares sobre su intención de voto. Pero mi intuición me dice que no han escogido el colectivo más de izquierdas de este país, que es lo que intenta representar Podemos. 

¿Dónde cree que el PSOE está más fuerte en estas elecciones?

No solo en estas elecciones, se ha visto a lo largo de este año que el granero mayor de votos, como ha sido casi siempre, es Andalucía. La fortaleza de Andalucía la seguimos preservando y mi apuesta es que en Cataluña volvamos a ser primera fuerza aunque no con los mismos apoyos que en 2004 o 2008. En el caso de Madrid y Valencia podemos hacer un buen resultado porque Ciudadanos es fuerte donde lo ha sido el PP y si conseguimos conservar lo que teníamos y rentabilizar la gestión de Ximo Puig al frente de la Generalitat tendremos mimbres para plantar cara. 

El PSOE siempre ha necesitado a Cataluña para ganar las elecciones. ¿Qué pasará si el 20D no sucede?

También hemos perdido elecciones con Cataluña a favor en el año 2000. Influye mucho pero no es determinante. Lo que nunca hemos ganado o perdido es sin Aragón. Siempre que hemos ganado ha sido con Aragón. 

¿Les preocupa Madrid?

Nos preocupa como gran ciudad. El fenómeno de los emergentes está en las grandes ciudades. 

¿Y como circunscripción, porque es donde se presentan todos los aspirantes a llegar a la Moncloa?

Me preocupan todas las grandes ciudades, no solo Madrid. Lo que pasa es que los medios nacionales personalizan porque la prensa nacional es madrileña y está muy centrada aquí pero para los que venimos de fuera es distinto. Siempre pongo el mismo ejemplo: llevo años escribiendo en El País desde hace años y nunca nadie en mi pueblo me había dicho nada hasta que un día salí con foto en el Heraldo de Aragón y me paraba todo el mundo por la calle. Todos estáis muy obsesionados con Madrid pero cuando uno sale un poco se da cuenta de que España es muy grande y en Madrid solo se deciden 36 diputados de 350. 

¿Se atreve a decir que el PSOE revalidará los diez diputados que ahora tiene en Madrid?

Espero que sí. Estamos muy cerca de los diez. La idea es mantener los que teníamos. Es cuestión de hacer bien la campaña.

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