Tras el anuncio del fichaje del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, por Ciudadanos, la hemeroteca recoge las críticas lanzadas por este político mientras militaba en el PP a su nueva formación, así como los reproches del líder del partido de Albert Rivera en la Comunidad de Madrid a su nueva incorporación.
En el perfil de Twitter de Garrido todavía se pueden leer mensajes con reproches a Aguado en los que destaca su “falta de principios” y en los que le acusa de llevar “mintiendo meses” para perjudicar a Cristina Cifuentes. En sus redes no solo ha cargado contra su nuevo presidente, también contra su nuevo partido. “La 'idea' de Rivera de limitación de mandatos ya la presentó @ccifuentes en un Proyecto de Ley hace meses. Este es el programa de C's”, publicó en un tuit junto a la imagen de un teclado en el que se destacaba “Copy Paste”.
En sus publicaciones en esta red social, también calificó a este partido como “populismo pop” y aseguró que sus actuaciones en el Parlamento autonómico consisten en preguntar sabiendo “que algo no es cierto” para “crear incertidumbre.”
El nuevo fichaje de Rivera también criticó que en 2016 Ciudadanos firmase con el PSOE un acuerdo de investidura en el que figuraba como uno de los puntos “cargarse la prisión permanente revisable”. En otro mensaje, se dirigió a sus próximos electores, reseñando que “los votantes de Ciudadanos deben saber que su partido está haciéndole el juego sucio a la izquierda en la Comunidad de Madrid”.
Las críticas no han ido solo en un sentido. El líder de Ciudadanos en Madrid también ha realizado reproches a su nuevo compañero de lista, en septiembre aseguró que seguía siendo “un presidente interino”, con “un proyecto agotado que no da para más”. Cargó también contra él tras uno de los últimos conflictos a los que hizo frente durante su mandato. “La violencia no es la solución. Sr. Garrido, deje de escurrir el bulto y siéntese con el Ayto. de Madrid, taxistas y VTCs para solucionar el problema”, publicó Aguado.
El caso Cifuentes también ha servido para enfrentar a estos dos políticos. “Garrido debe decidir si el problema de la universidad pública madrileña son los que montan los chiringuitos, o los que los denuncian”, espetó Aguado. Ya en el pleno de investidura, tras la renuncia de su antecesora, el líder de Ciudadanos aseguró que “no hizo ni una sola mención a los más de 40.000 estudiantes de la URJC que son los grandes damnificados de esta crisis”.