Una supuesta niña robada acude hoy al Juzgado para buscar a su madre

Una supuesta niña robada, Paloma Pérez Calleja, nacida en 1957, prestará hoy declaración ante la titular del Juzgado de Instrucción número 24 de Madrid, Mercedes Pérez Barrios, con el objetivo de buscar a su madre.

Pérez Calleja presentó en el Juzgado unos documentos que acreditan que su madre, P.C.B., dio a luz una niña muerta el 3 de marzo de 1957 en la antigua maternidad de O'Donnell y que, una semana después, el 10 de marzo de 1957, dio a luz otra niña (Paloma) en su casa, sin asistencia médica.

En declaraciones a Efe, Pérez Calleja ha explicado que cuando estaba a punto de cumplir los 47 años su madre le dijo durante una discusión que no pertenecía a su familia, lo que la decidió a buscar documentación sobre su nacimiento.

Aunque estaba inscrita como hija biológica de sus padres, al descubrir que había nacido en casa y no en la antigua maternidad de O'Donnell, como siempre le habían dicho, Pérez Calleja tuvo una conversación con su madre en la que ésta le reconoció: “Tú no eres mi hija”.

En aquel momento, P.C.B. le confesó que, cuando acababa de dar a luz una niña muerta, a las dos horas, una monja le entregó otra niña -la propia Paloma- que supuestamente había sido abandonada por su madre.

Además, el año pasado, Pérez Calleja se enteró a través de un familiar que el 15 de enero de 1956 sus padres habían conseguido una primera niña que tres meses después se murió a causa de una bronconeumonía.

Pérez Calleja ha precisado que a sus padres se les murieron siete hijos debido a un problema de incompatibilidad sanguínea del factor Rh.

“A mí me trataron muy bien. No me faltó comida, ni ropa, ni educación, pero he sufrido la falta de cariño de mi madre, porque mi padre se pasó la vida protegiéndome, pero hace veintiséis años que murió”, ha relatado Pérez Calleja.

Ha recordado que durante su infancia vivió en un barrio de chabolas en la zona de Batán, donde no había ni agua, ni gas, y que ella tenía que pedir ayuda a los vecinos porque sus padres se llevaban “muy mal” y “se pegaban”.

“Todo eso se lo debo a la monja que me cambió la vida porque yo estaba viviendo una historia que a mí no me correspondía”, ha afirmado.

Pérez Calleja planteó primero su caso ante la Fiscalía sin éxito y el pasado 26 de marzo presentó una denuncia en los Juzgados de Plaza de Castilla, que ha sido admitida a trámite, por falsedad documental, detención ilegal y simulación de parto.

“Busco la verdad sobre mis orígenes y espero que se haga justicia”, ha afirmado Pérez Calleja, quien ha precisado que su madre, de 80 años, es la única testigo de los hechos, ya que todos los médicos han desaparecido.

Ha estimado que es “muy sospechoso” que un bebé salga por las puertas de una maternidad y nadie se entere de nada, sea en el año que sea.