Yolanda Díaz está convencida de que podrán repetir un Gobierno de coalición progresista con el Partido Socialista. El lunes acudió a Bruselas para reunirse allí con Carles Puigdemont, líder oficioso de Junts, formación clave para que Pedro Sánchez pueda superar una futura investidura. Y después de ese encuentro ve esa posibilidad más cerca, tal y como ha trasladado este miércoles en un foro del Partido Demócrata en Italia. “Después de la conversación con el señor Puigdemont estoy convencida de que va a haber Gobierno progresista en España”, ha afirmado.
El pasado lunes los dos se reunieron en Bruselas, en un encuentro que anunciaron poco antes de que se celebrase y en el que también estuvieron el dirigente de los comuns Jaume Asens y el eurodiputado Toni Comín. Después de la reunión, las dos partes no dieron muchos detalles sobre las conversaciones pero trasladaron un comunicado en el que manifestaban un acuerdo para “explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear el conflicto político”.
Aunque varias personas del núcleo duro de la vicepresidenta segunda han trasladado las sensaciones de Sumar tras esa reunión, como los portavoces Ernest Urtasun y Marta Lois o el propio Asens, Díaz no se había pronunciado hasta ahora sobre el encuentro.
Preguntada por este asunto en un encuentro junto a los diputados italianos Elly Schlein y Andrea Orlando, la líder de Sumar se ha mostrado convencida de que habrá “gobierno progresista”. “Tenemos que ver Catalunya no como problema sino como una auténtica oportunidad. Como un país diverso, con distintas culturas, maneras de hacer política. Toda esta riqueza nos hace mejores. Creo que sí vamos a tener gobierno progresista en mi país”, ha sostenido.
Díaz cree que un acuerdo con los socios de la anterior legislatura a los que ahora deben sumar a Junts va en la dirección de lo que han votado los ciudadanos. “Han votado seguir ganando derechos, seguir avanzando en derechos laborales, económicos, seguir luchando contra el cambio climático, avanzando en los derechos de las mujeres, en feminismo, de las personas LGTBI. Y han dicho que quieren una España diversa”, ha dicho para recordar que este mismo miércoles tanto su formación como el PSOE y fuerzas nacionalistas en el Congreso han registrado la reforma para que los diputados puedan usar las lenguas oficiales en todos los ámbitos de la Cámara Baja.
La reunión de Díaz con Puigdemont se produjo apenas un día antes de que el expresident catalán expusiese públicamente las demandas de su formación a cambio de dar su apoyo a una futura investidura de Sánchez. En una conferencia de prensa en el Parlamento Europeo exigió una ley de amnistía y un “relator” como paso previo para negociar ese apoyo a un gobierno de coalición progresista.
El expresident advirtió de que se tienen que establecer ciertas “condiciones previas” para iniciar la negociación: “reconocer la legitimidad del independentismo”, el “abandono de la vía judicial” y la amnistía; un relator que medie y verifique los acuerdos, y el impulso al catalán en la Unión Europea. Todas estas condiciones, aseguró, caben en la Constitución y pueden ser realizadas antes de la votación sobre la investidura de Pedro Sánchez.
Asens: “La amnistía es la condición para la investidura”
Esta misma mañana, Asens ha descartado que una ley de amnistía sea una “condición previa” para empezar a hablar de la investidura sino que es la condición para que esa votación pueda salir adelante. Asens hace de enlace entre la política española y Waterloo gracias a su buena relación con Puigdemont y los suyos. Esta mañana en los micrófonos de Onda Cero ha insistido en que “el centro del acuerdo pasa por la amnistía”.
“La investidura depende de eso. Después lo acompañó de otras reflexiones, pero en cualquier negociación se parte de posición de máximos y luego uno va suavizando sus posiciones y creo que hay voluntad en el caso de Puigdemont para acercar posiciones”, ha dicho en una entrevista en la que sí ha mostrado más problemas acerca de la figura del relator que puso sobre la mesa Junts. “Cuando se habla de un relator, a mí eso me parece que es propio de los conflictos armados o los procesos de paz. Yo creo que hay otras fórmulas”, dijo Asens para criticar que esa figura “alargaría mucho” un proceso de negociación entre partidos y no “entre gobiernos”.