Tejero pide un juicio comparativo entre el 23-F y “lo que está ocurriendo en Cataluña”

Antonio Tejero, el ex teniente de la Guardia Civil que protagonizó el fallido golpe de Estado el 23 de febrero de 1981, ha escrito una carta firmada de puño y letra a La Gaceta en la que exige que la justicia española “lleve a cabo un juicio comparativo entre lo ocurrido el 23-F y lo que está ocurriendo actualmente” en Catalunya.

En su misiva, Tejero defiende el golpe de Estado que él perpetró, y arremete contra el supuesto golpe de Estado de la Generalitat por afectar a la “unidad de la patria”: “El 23-F pretendía conseguir un cambio de Gobierno que garantizara la unidad de la Patria (...) El golpe de Estado que se está preparando en Cataluña quiere conseguir la ruptura de la región catalana del resto de la Patria”.

El ex coronel reconoce que los golpistas cometieron “un gran delito que fue castigado con penas gravísimas”, por lo que critica que “los sediciosos catalanes estén incumpliendo leyes y más leyes desde hace tiempo con total impunidad, con el agravante de jactarse de ello y de ir, cada vez, más adelante en la comisión de sus delitos independentistas”. Tejero, que tiene hoy 85 años, permaneció arrestado en el Castillo de la Palma de Ferrol durante dos años, en una estancia de 65 metros cuadrados con varias habitaciones, un servicio con bañera y una cocina.

Asimismo, defiende que el golpe de Estado que protagonizó era “un contragolpe que se dio al preparado en la persona del general Armada, y patrocinado por el Rey Juan Carlos I y los partidos políticos, sobretodo el socialista y comunista”.

Críticas a Rajoy, al rey, a la Iglesia y al Ejército

Además, Tejero arremete contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, por la gestión que está haciendo con Catalunya: “Estamos viendo cómo el Gobierno del Sr. Rajoy es totalmente estático ante los hechos independentistas catalanes, mucho más grave que los nuestros, y continúa intentando diálogos infructuosos y tomando pequeñas medidas, como la persecución de las papeletas del Referéndum, empleando para ello al dignísimo Cuerpo de la Guardia Civil”.

También tiene palabras para el rey, del cual comenta que “debió de haber tomado alguna resolución de que se ejercieran medidas más coercitivas”, y para el Tribunal Constitucional. De esta institución asegura que “es el paño de lágrimas de los políticos cobardes e incompetentes y el retrete del Gobierno catalán”.

Ya al final de la misiva, Tejero comenta el papel de la Iglesia, de la cual dice ser “hijo fiel de ella”: “Los obispos y clérigos, que ondean las banderas esteladas, algunas veces hasta en sus iglesias, podían mejor orar por la unidad de la Patria que tanto expandió la religión católica por el mundo y a la que España dio tantos mártires”.

Por último, lanza un mensaje a favor de la “unidad y grandeza” de España, por la cual “daría gustoso su vida”: “Piénsenlo bien antes de seguir por el camino que han tomado y Dios y España les premiará, y si no se lo demandará ¡Lo juro! Como juro igualmente fidelidad a España, a su historia, a sus mártires, a sus héroes y, en la actualidad, sobre todo a su unidad y su grandeza, en defensa de las cuales daría gustoso mi vida y la vida de mis enemigos”.