La autonomía alcanzada el 28 de febrero de 1980 en Andalucía fue un “triunfo” del pueblo andaluz. Así lo defiende y recuerda un grupo de andaluces “comprometidos con el cambio progresista” que se han unido en el marco de esta efemérides para tratar de “reactivar la fuerza” que manifestó la ciudadanía hace 43 años. Todo desde la convicción de que la región necesita de un movimiento social fuerte capaz de hacer prosperar los gobiernos de izquierda que, a su juicio, son los únicos que pueden afrontar los retos que demanda Andalucía en un año eminentemente electoral.
La iniciativa “Manifiesto 28F: impulsando la unidad de la izquierda andaluza” se ha presentado este lunes en Sevilla, en vísperas del día de Andalucía y como paso previo a que se celebre en Málaga un encuentro previsto para el 4 de marzo. Allí se darán cita las 200 personas que, hasta la fecha, se han adherido a este movimiento ciudadano que nace con la vocación de “construir juntas un nuevo proyecto de país”, que sirva de alternativa a las políticas “caducas” de la derecha, con Andalucía “en el centro” y “la justicia social como eje vertebrador”, según expresan los organizadores del encuentro.
Entre los firmantes, se encuentran Aurora León (abogada laboralista), María Márquez (profesora universitaria), Francisco Sierra (profesor universitario) y Rafael Rodríguez (fundador de Paralelo36Andalucía), quienes se han encargado de dar a conocer públicamente la iniciativa desde la capital andaluza. Junto a ellos, otros docentes destacados en la región como Carlos Arenas, así como dirigentes y activistas políticos como Sebastián Martín Recio, Sergio Pascual, José Antonio Jiménez, Toni Valero, Ernesto Alba, José Antonio Pino, Mar González o Blas Rueda entienden que “la unidad de la izquierda” ha de asumir, a tres meses de las elecciones municipales, “el compromiso de movilizar a una mayoría social para conformar gobiernos municipales de progreso”. En este sentido, apuestan por “consolidar el proyecto Sumar” que presentó hace unos meses Yolanda Díaz, por considerarlo “la mejor herramienta” de la que dispone la izquierda para promover “la transformación” que, a sus ojos, necesita Andalucía.
Cumplir con una “necesidad histórica”
“Frente al fracasado proyecto de la derecha, en este 28 de febrero manifestamos la necesidad de un nuevo tiempo para Andalucía. Un tiempo de alternativas en el que nuestro pueblo lidere el cambio de época que se vislumbra, construyendo otro modelo de desarrollo económico, social y ecológico, basado en las potencialidades y riqueza material e inmaterial de nuestra tierra”, reza el manifiesto. De ahí que Aurora León defienda como una “necesidad histórica” el objetivo de promover “una confluencia en el espacio de la izquierda para conseguir alcanzar gobiernos progresistas” que velen por garantizar unos servicios públicos de calidad y lancen políticas basadas en “la justicia social y climática o el desarrollo de nuestro autogobierno” para revertir las carencias estructurales que atraviesan todavía a la comunidad.
Como contrapunto a este proyecto “regeneracionista”, los firmantes critican la “involución que el gobierno del PP en la Junta de Andalucía está provocando en la sociedad andaluza, con un programa caduco de neoliberalismo centrado en la privatización de los servicios públicos a los que, día a día, deteriora, mientras baja los impuestos a los grandes patrimonios”. A tenor de lo expuesto en el manifiesto, el profesor Francisco Sierra ha calificado al Ejecutivo de Moreno Bonilla de “ultramoderado” y ha dedicado su intervención a argumentarlo con “datos y pruebas”, que evidencian, a su parecer, el “patriotismo de bandera”, falta de transparencia y “deterioro” intencionado de “lo común” que representa su Gobierno, al que acusa de hacer un “incumplimiento sistemático del Estatuto de Autonomía”.
Al hilo, Rafael Rodríguez ha manifestado que quienes conforman el movimiento por la unidad de la izquierda andaluza están “convencidos de que Andalucía no ha puesto aún en todo su valor la autonomía conquistada hace 43 años”. Por ello, apuestan por la “esperanza” que arrojan las confluencias desde los niveles más bajos de la política y se amparan en Sumar como “fuerza estratégica” capaz de liderar el cambio que quieren para Andalucía. “Los andaluces no nos queremos quedar atrás nunca más”, ha afirmado María Márquez, apuntando que “estamos a tiempo” de que la izquierda recorra unida y reforzada el camino hacia las elecciones municipales. Y, desde ahí, a las generales que se prevén para final de año.
En definitiva, el encuentro convocado en Málaga el próximo sábado se concibe como punto de partida de un movimiento que aspira a incorporar “a todas las personas progresistas comprometidas con Andalucía para reactivar la vida política” en la región, desde la “participación ciudadana” como “motor del cambio”.