Unos 5.500 niños irán al comedor escolar en verano en la Comunidad de Madrid

Unos 5.500 niños se incorporarán desde el jueves a los comedores escolares en 160 colegios que están abiertos durante el verano en la Comunidad de Madrid, adonde acudirán para recibir la comida y para participar en las actividades extraescolares, medida que costará un máximo de 4 millones a las arcas de la región.

Una medida promovida por la Comunidad en la que han participado gran parte de los Ayuntamientos, salvo una decena, entre ellos el de la capital, que han declinado la propuesta al tener sus propias iniciativas.

El consejero de Educación, Juventud y Deporte, Rafael Van Grieken, ha explicado que los niños se han seleccionado partiendo de aquellos que durante el curso recibían la beca comedor: familias beneficiarias de la renta mínima de inserción, familias víctimas del terrorismo, alumnos en acogimiento familiar y familias con renta per cápita inferior a 3.500 euros.

A estos, los ayuntamientos han agregado otros menores que, según los servicios de asuntos sociales, cumplen con los requisitos para ser beneficiarios de esta medida.

Según la Comunidad, el “universo potencial” de posibles beneficiarios de las ayudas era 16.000 niños (unos 9.000 de la capital), y para ello se ha diseñado un programa de hasta 4 millones de euros, aunque tras hacer una evaluación con los ayuntamientos el número se ha cerrado en unos 5.500.

Y en el caso de Madrid capital, si el Gobierno regional cree que la comida a domicilio que el Ayuntamiento tiene previsto repartir no llega a todos los menores que lo necesitan, a finales de la semana próxima se baraja la apertura de los comedores de algunos institutos sobre todo en los distritos donde hay más beneficiarios de la renta mínima de inserción, como Puente de Vallecas, Usera o Carabanchel.

El coste estimado por niño, según ha especificado el consejero, es de 500 euros, y la medida estará en marcha aproximadamente hasta el 8 de septiembre, fecha de comienzo del curso escolar.

En el caso de localidades muy pequeñas, en las que sólo uno o unos pocos menores estén en situación de necesidad, la Comunidad ha considerado más eficiente hacerles llegar la comida a domicilio en lugar de abrir específicamente un colegio para atender sus casos.

Son en total 260 los colegios que ofrecen actividades extraescolares y que podrían acoger niños, aunque en principio se trabajará con unos 160, los que tienen el calendario de actividades más extenso, que incluye también agosto.

El consejero ha señalado que en el caso de Madrid capital, el Ayuntamiento ha optado por repartir comida a domicilio, pero ante la discrepancia del censo de niños que necesitan la ayuda, la Comunidad estudia abrir a finales de la semana próxima institutos, polideportivos o centros propios donde los menores puedan acudir, eso sí, sólo a recibir comidas, ya que estos centros no tiene programadas actividades lúdico-educativas.

También han rechazado sumarse a la iniciativa de la Comunidad Majadahonda, San Sebastián de los Reyes, Villalbilla, Casarrubuelos, Daganzo, Torrelodones, Alpedrete, Hoyo de Manzanares y Moralzarzal, y como en el caso de la capital, el Gobierno regional se pondrá en contacto con las familias con perfil potencial de recibir ayuda para asegurarse de que ningún menor se queda sin asistencia.