El estado de Nueva York, el epicentro de la pandemia de coronavirus en EE.UU., había confirmado hasta este sábado 52.318 casos positivos y 728 fallecidos, con más de 200 muertes en las últimas 24 horas, según anunció el gobernador Andrew Cuomo.
En su actualización diaria, Cuomo explicó que desde el viernes se habían confirmado 7.681 nuevos casos en el estado, más de la mitad de ellos en la ciudad de Nueva York, la urbe más poblada y más afectada por la enfermedad en todo el país.
De los enfermos, 7.328 están hospitalizados y 1.755 de ellos en cuidados intensivos, mientras que un total de 2.726 han sido dados de alta, casi 700 en las últimas 24 horas.
En medio de las duras cifras, Cuomo destacó una que podría suponer una señal positiva: el ritmo de nuevos ingresos hospitalarios se redujo entre el viernes y el sábado, con un aumento de 847, frente a los más de 1.100 y más de 1.200 de los dos días anteriores.
Pese a ello, el gobernador pidió no dar demasiada importancia a esos números y recordó que lo peor de la enfermedad está aún por llegar.
Las proyecciones que maneja el Gobierno apuntan a que el “pico” de la pandemia en el estado llegará en un plazo de entre 14 y 21 días, por lo que las autoridades están trabajando contrarreloj para aumentar el número de camas de hospital disponibles y, sobre todo, de respiradores.
Cuomo dijo que se espera que puedan ser necesarias hasta 140.000 plazas hospitalarias -frente a unas 53.000 disponibles hasta ahora- y unos 30.000 respiradores.
Esas proyecciones han sido cuestionadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, a quien indirectamente respondió este sábado el gobernador demócrata, subrayando que esos son los cálculos basados en los “datos” y la “ciencia” con los que trabajan los expertos.
“Estamos planeando para el peor escenario que predicen los modelos”, recordó Cuomo, que dejó claro que es posible que nunca se alcancen esas necesidades por las medidas que se han ido tomando para frenar los contagios, pero que insistió en que hay que prepararse.
El gobernador anunció que, tras una conversación con Trump, se ha acordado acondicionar cuatro grandes instalaciones como hospitales de emergencia en la ciudad de Nueva York, que añadirán 4.000 camas extra.
Esos hospitales estarán repartidos en Brooklyn, Queens, Staten Island y El Bronx y se sumarán al centro de convenciones Javits de Manhattan, que ya ha sido preparado y abrirá sus puertas el lunes, con lo que los cinco distritos de la ciudad quedarán cubiertos.
Según Cuomo, también se espera que el lunes llegue a Nueva York un buque hospital enviado por la Armada estadounidense, cuyo despliegue a la ciudad ya había sido anunciado previamente.