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Un acuerdo entre los 5 partidos permitirá a Vox presidir la comisión sobre Memoria Histórica del Parlamento andaluz

Francisco Serrano

Daniel Cela

El partido ultraderechista Vox presidirá la comisión de Cultura y Patrimonio Histórico del Parlamento andaluz, por la que pasan todos los asuntos relacionados con la Memoria Histórica. La formación de Santiago Abascal, con 12 diputados en la Cámara y sostén del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla, tiene firmado un acuerdo con el PP para derogar la Ley andaluza de Memoria -que fue aprobada sin votos en contra- y sustituirla por una Ley de Concordia.

Las comisiones parlamentarias no tienen funciones ejecutivas, es el Gobierno de PP y Ciudadanos quien tiene en su mano las políticas memorialistas, y ninguno de estos dos grupos votó en contra de la ley. Sin embargo, el hecho de que la comisión donde se debatirán los asuntos que afectan a las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo haya caído en manos de Vox -por desinterés del resto de grupos- ha desatado una gran indignación en la ciudadanías.

¿Cuál es la carambola que ha provocado esta situación de la que, 48 horas después, ningún partido se hace responsable? La presidenta del Parlamento andaluz, Marta Bosquet, convocó el pasado lunes a los portavoces de los cinco partidos de la Cámara a una reunión “extraoficial” con el objetivo de pactar el reparto de cupos de iniciativas parlamentarias que tendrá cada grupo en esta legislatura, así como la presidencia de las comisiones donde se dirimen las políticas del Gobierno. Bosquet promocionó un acuerdo previo de los cinco partidos para evitar una votación que hubiera dejado a los grupos de izquierda -PSOE y Adelante Andalucía- con menos representación en la mesa de las comisiones de la que tienen sus diputados en la Cámara.

Hubo dos reuniones de portavoces -lunes y martes- y, según varias personas presentes en la negociación, se llegó a un acuerdo “unánime” de los cinco partidos para repartirse las presidencias de las 18 comisiones parlamentarias, quedando la mesa de Cultura y Memoria Histórica en manos de una diputada de Vox, ha adelantado Abc y confirman fuentes de la negociación. Antes de que se inflase la polémica en las redes sociales, fuentes del PSOE y de Adelante confirmaron a esta redacción de que se había llegado a “un acuerdo global” entre los grupos. Más tarde matizaron que la elección de Vox para presidir la comisión de Cultura fue una “imposición de la derecha”.

En el anterior gabinete de Susana Díaz, las competencias memorialistas de la Junta de Andalucía estaban en la Consejería de Presidencia, pero el Ejecutivo bipartito de PP y Ciudadanos las ha trasladado al departamento de Cultura, que dirige la popular Patricia del Pozo. La Consejería de Cultura es la última en el orden de prelación del nuevo Ejecutivo. Ni PSOE ni Adelante Andalucía reclamaron la presidencia de la comisión de Cultura y Patrimonio Histórico, que finalmente recayó en Vox. La formación ultraderechista tampoco solicitó presidir este órgano, siempre según personas presentes en la reunión de Bosquet con los cinco portavoces.

PP y Ciudadanos aseguran que el acuerdo fue “unánime” entre los cinco grupos y subrayan que, sin pacto, los grupos de izquierda podrían haber logrado menos representación en las comisiones de lo que han obtenido. La mesa de una comisión, que ordena los debates legislativos sobre las políticas del Gobierno que luego pasan al Pleno de la Cámara para ser votados, está compuesta por tres miembros: presidencia, vicepresidencia y secretaría. Dirigir este órgano es importante para los grupos políticos, no sólo porque marca el ritmo de las leyes y ejerce de contrapeso al Ejecutivo, sino porque sus miembros cobran un plus que suman a su nómina de 3.081 euros (de hasta 500 euros por sesión).

El PSOE y la coalición Podemos-IU (Adelante Andalucía) tienen otra versión sobre la negociación: ambas formaciones replican que dejar la Comisión de Cultura en manos de Vox ha sido una “imposición del tripartito de derechas”. “Trajeron la propuesta de reparto cerrada y dejaron los huecos para PSOE y Adelante”, dicen fuentes de la coalición de izquierdas.

El acuerdo escrito, al que ha tenido acceso esta redacción, deja en manos del PP la presidencia de cinco comisiones y cuatro para Ciudadanos, correspondientes a sus áreas de competencia dentro del Gobierno. El PSOE presidirá cuatro comisiones, entre ellas la de Hacienda, que tradicionalmente siempre ha dirigido el líder de la oposición (en la pasada legislatura la presidía el PP). Adelante Andalucía preside dos comisiones y Vox una. “En la negociación nadie peleó por presidir Cultura. El PSOE y Adelante Andalucía reclamaron comisiones que al final no lograron, pero la de Cultura y Patrimonio no fue una de ellas”, aseguran fuentes de la formación naranja.

El acuerdo entre grupos no será oficial hasta el lunes, cuando la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet, (y un miembro de la Mesa en el que ella delegue) presidan las sesiones constitutivas de todas las comisiones parlamentarias, donde se votará la composición de las mismas. En cada comisión participan 18 diputados con representación proporcional a su peso dentro de la Cámara. Vox, que es el grupo minoritario con 12 parlamentarios, tendrá que hacer equilibrios para participar en todas, pero se sabe ya que su líder y presidente de grupo, el juez Francisco Serrano, será portavoz en la comisión de Igualdad y estará también en la de Salud y Familias.

La portavocía de Serrano en la comisión de Igualdad llama la atención porque el juez se ha significado notoriamente en contra de las políticas y leyes de igualdad y lucha contra la violencia machista, que su grupo ha pedido derogar. El diputado y presidente de su grupo parlamentario se estrenó en la Cámara con un discurso negacionista sobre el machismo como origen de las agresiones a mujeres, y ha pedido que se desarrolle una ley que combata la violencia “intrafamiliar”, esto es, en el ámbito doméstico, pero que proteja por igual a mujeres, hombres, niños o ancianos. Serrano y Vox niegan las estadísticas de muertes de mujeres a manos de sus parejas y ex parejas (47 asesinadas en España el año pasado).

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