Navantia Puerto Real reclama más barcos y menos eólicas
Navantia Puerto Real entregará a finales de abril o primeros de mayo el cuarto petrolero que se ha fabricado en el astillero gaditano. La gran preocupación de los trabajadores es que no pare la producción de barcos porque entienden que es el gran sustento, a pesar de que recientemente se haya confirmado un contrato para la construcción de 20 upper jackets (estructuras que hacen las veces de mástil en un generador eólico) para la primera fase de un macroproyecto en el Mar del Norte.
El presidente del comité de empresa de Navantia, Antonio Noria, tiene clara la prioridad de los trabajadores: “Evidentemente los upper jackets pueden cubrir parte del trabajo de 2019, pero con una cantidad mínima de trabajadores y no es lo que realmente reclamábamos. Queremos proyectos de barcos aunque no desechamos las eólicas como un complemento”.
“Los 20 jackets darán unos 300 puestos de trabajo y con un barco, dependiendo de si es un ferry o un gasero, hablamos de 1200 trabajadores”, resalta el sindicalista.
El comité de dirección de Navantia aprobó durante el mes de marzo el inicio del proyecto de ingeniería para un buque de Acción Marítima de Investigación Subacuática (BAM-IS) . Este trabajo se acabará a lo largo del 2019 y la plantilla espera que en 2020 se pueda iniciar la construcción del barco.
Porque, según Noria, en Puerto Real sólo se plantea el futuro a través de los barcos: “Si hay alguien en las alturas de la empresa que está pensando que Puerto Real se va a dedicar sólo a las eólicas se está equivocando. No seremos como el astillero de Fene que está en la ría de Ferrol, que se dedica al tema eólico fundamentalmente y que lleva más de 20 años sin poner una quilla de barco. Eso no va a pasar en Puerto Real”.
El comité de empresa espera que la empresa cumpla con la construcción de dos buques logísticos para el Ejército de Tierra (TLET), que se incluyeron en el plan estratégico firmado por la empresa pública para un periodo que comprende los años de 2018 a 2022.
“Pedimos que se haga el proyecto de ingeniería del ferry para el Ejército de Tierra, para el transporte de tropas. Está también en el plan y si quisieran se podría empezar y no esperar al próximo Gobierno, como nos han dicho”, critica Noria.
La regeneración de la plantilla
Hace unas semanas se llevó a cabo la firma del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que supone el despido colectivo de 1.706 trabajadores de los siete centros de trabajo que la compañía tiene en España. Responsables de la dirección de la empresa naval pública y de las organizaciones sindicales con representación en la misma llegaron a un acuerdo que afectará a todos aquellos operarios que a fecha de 31 de diciembre de 2020 cumplan o hayan cumplido los 61 años.
En el astillero puertorrealeño se ve con buenos ojos el acuerdo. “Supondrá que a los mayores los sustituyen por un 75% de gente joven fija y un 25% eventual. Lo ideal habría sido que se firmara el expediente de salida a la vez que las entradas y ahora se discute en cada centro cuántos entrarán. Además, debemos saber qué responsabilidad tendrán los nuevos trabajadores y queremos que entren técnicos medios y operarios de máquinas”, explica el presidente del comité de Puerto Real.
