Roberto Santamaría tiene contrato con la Unión Deportiva Las Palmas hasta el 30 de junio de 2013 (con opción de prorrogarlo por un año más), pero ni el portero desea continuar en la disciplina del club amarillo, ni la entidad grancanaria quiere que el guardameta navarro pase una temporada más en sus filas. Así que, con este panorama, ambas partes tantean el mercado para buscar la mejor salida posible -e inmediata- para una situación poco agradable.
Problemas con algunos compañeros en el vestuario, al término del curso pasado, motivaron que Paco Castellano y José Manuel León (entrenadores que cerraron la campaña al frente de la UD Las Palmas) optaran por apartarle del once titular en las últimas -y decisivas- jornadas de la Liga Adelante. Al término del ejercicio, Santamaría ofreció una rueda de prensa en la que explicó que deseaba abandonar el club amarillo porque su mujer presentaba un cuadro de ansiedad por vivir en Gran Canaria.
La UD Las Palmas entendió la situación personal del portero navarro, pero exigió una compensación económica para conceder la carta de libertad a Santamaría. Ningún equipo ofreció la cantidad estipulada por la entidad que preside Miguel Ángel Ramírez por el traspaso del guardameta, que a última hora encontró acomodo en el Malaga CF, pero en calidad de cedido.
Con Munúa como titular indiscutible para Juan Ramón López Muñiz, Santamaría no disputó ni un solo minuto de juego en la Liga BBVA. Sus únicas apariciones -cuatro- en las alineaciones del Málaga CF tuvieron lugar en la competición de la Copa del Rey, en la que el conjunto andaluz fue eliminado en dieciséisavos de final por el Getafe.
A pesar de su poca aportación al proyecto del Málaga CF, Santamaría mantiene un buen cartel tras destacar en la UD Las Palmas durante las temporadas 07/08 y 08/09 y el Athletic de Bilbao, que busca portero tras la retirada de Armando, tiene en su agenda al guardameta formado en la cantera del Atlético Osasuna (equipo en el que puede recalar Asier Riesgo, el otro arquero en el punto de mira del club vizcaíno).
La cláusula de rescisión de Santamaría asciende hasta los seis millones de euros, aunque la UD Las Palmas cifró el verano pasado en tres millones de euros su traspaso, tras recibir -a través del representante del futbolista- una propuesta que se aproximaba al millón de euros. La inactividad de este curso, probablemente, abaratará su precio.