Canarias rinde homenaje a ocho mujeres que han hecho del sector primario su forma de vida
El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, junto a la directora del Instituto Canario de Igualdad, Claudina Morales, entregaron el jueves de la semana pasada, en Santa Cruz de La Palma, los XXVI Premios Agrarios, Pesqueros y Alimentarios, que reconocen en esta edición el importante papel de las mujeres en el sector primario.
La viticultora y bodeguera palmera Eufrosina Pérez, propietaria de Vinos El Níspero, recibió el Premio a la Mujer Rural Canaria 2017, máximo galardón de este certamen, convocado por la Consejería de Agricultura. Para la concesión de esa distinción, el jurado ha valorado sobre todo la actitud emprendedora y dinamizadora de la galardonada, “pionera en su isla en ese subsector, especialmente masculinizado”, así como su “magnífica trayectoria profesional y la elevada calidad de sus productos”.
Las distinciones honoríficas, un total de siete, se concedieron a mujeres del sector que en el transcurso de su trayectoria profesional han realizado, de forma continuada y relevante, actuaciones en beneficio del sector agrario, pesquero y alimentario del archipiélago. Esos galardones recayeron en Nancy Acosta (El Hierro), Nicolasa Castro (Fuerteventura), Natalia y Beatriz Mayor (Gran Canaria), Armenia Mendozal (La Gomera), Luz Nélida Parque (Lanzarote), Martina Rasi-Rüger (La Palma) y Carmen Soto (Tenerife).
Durante el acto, organizado por la Consejería de Agricultura con el apoyo del Instituto Canario de Igualdad, el consejero Narvay Quintero felicitó a las galardonadas y destacó que es incuestionable el papel que han desempeñado y desempeñan las mujeres en el sector primario. También se refirió a la necesidad de que la sociedad “reconozca sus valores y su esfuerzo”, aparte de seguir trabajando desde los distintos ámbitos para promover y favorecer la igualdad real y efectiva, promoviendo la participación de estas en la agricultura, la ganadería y la pesca de manera profesional“.
Claudina Morales dijo que “las mujeres rurales representan el pasado y presente del desarrollo rural y socioeconómico de Canarias, y también del futuro, por su capacidad emprendedora e innovadora. Merecen disfrutar plenamente de los beneficios y oportunidades de dicho desarrollo”.
La premiada Eufrosina Pérez señaló que “este galardón inesperado supone mucho para mí ya que es una recompensa a mi trabajo; es una palmadita en la espalda que me llena de satisfacción y queda en la memoria de todos. Además, no es un premio solo para mí, sino para todas las mujeres que trabajamos en el campo, dentro y fuera de casa, y estamos poco reconocidas y valoradas”. Las candidatas a estos premios fueron propuestas por universidades y administraciones locales, además de por la propia Consejería de Agricultura.
Listado con las galardonadas
-Premio a la Mujer Rural Canaria, empresaria que haya destacado en su actividad y sea única titular de la explotación agraria: Eufrosina Pérez Rodríguez, viticultora y bodeguera, propietaria de la marca El Níspero, por su magnífica trayectoria, por ser pionera en su isla y en un subsector especialmente masculinizado, por su emprendimiento y por la elevada calidad de sus productos.
-Distinciones honoríficas a mujeres del sector que, en el transcurso de su trayectoria profesional, de forma continuada y relevante, hayan realizado actuaciones en beneficio del sector agrario, pesquero y alimentario en el ámbito de Canarias:
a) Distinción Honorífica por la isla de El Hierro: Nancy Acosta Acosta, entendiendo que destaca por la comercialización de productos ecológicos y la dinamización del sector, reflexionando que estos factores conforman de por sí una magnífica trayectoria relacionada directamente con el ámbito competencial de la alimentación y, por lo tanto, digna de reconocimiento, como ejemplo para visibilizar a las mujeres comercializadoras y dinamizadoras del sector.
b) Distinción Honorífica por la isla de Fuerteventura: Nicolasa Castro Roger, por su trayectoria en la agricultura, la ganadería y la distribución al frente de su empresa familiar, además de la quesería La Pared, y por ser firme representante del emprendimiento y el fomento del empleo en varias de las áreas del sector de la isla, especialmente en el agrario y en la distribución de su producción.
c) Distinción Honorífica por la isla de Gran Canaria: Natalia y Beatriz Mayor Monzón, jóvenes ganaderas trashumantes y emprendedoras, cotitulares de la quesería Naroy, como firmes representantes de la innovación combinada con los sistemas tradicionales, personificando el relevo generacional en el subsesector, la pasión por el trabajo y el futuro de la mujer en el sector primario.
d) Distinción Honorífica por la isla de La Gomera: Armenia Mendozal Meni, de vinos Bodega Montoro, perteneciente al Consejo Regulador de la DO Vinos de La Gomera. Destaca por su carácter emprendedor y colaborativo promoviendo iniciativas de mejora en la elaboración y comercialización de la producción insular. Es un ejemplo para visibilizar a las mujeres bodegueras y valorar y reconocer su profesión.
e) Distinción Honorífica por la isla de Lanzarote: Luz Nélida Parque Rodríguez, ganadera y titular de la quesería Flor de Luz, como claro exponente de la realidad social del sector primario que se está consolidando en Canarias, que responde a una mujer emprendedora, innovadora, que difunde y publicita su producción en redes y que, aun siendo una maestra quesera consolidada y galardonada, aúna tradición y vanguardia buscando nuevas fórmulas en la elaboración y mejora de sus productos.
f) Distinción Honorífica por la isla de La Palma: Martina Rasi-Rüger, agricultora ecológica (platanera), por sus técnicas innovadoras de permacultura, su fomento de los productos ecológicos y la difusión y dinamización de la ecología y de sus sistemas de cultivo a través de la formación y la práctica del ecoturismo.
g) Distinción Honorífica por la isla de Tenerife: Carmen Soto Barrera, pescadora y patrona de la embarcación El Vidal, cuya juventud, formación, capacitación y profesionalización simbolizan el necesario relevo generacional y el cambio cultural que se está produciendo en el subsector de la pesca en Canarias, en el que se va imponiendo poco a poco un giro hacia la igualdad de género. También por valorar y reconocer la dureza de su profesión.